Programa Actualización Científica sin Exclusiones (ACisE)

Informes comentados

dispuestos por fecha de ingreso a SIIC

Informe
Autor del informe original
A Kumar Verma
Institución: G.S.V.M. Medical College,
Kanpur India

Fentanilo y Ketamina o Dexmedetomidina en la Intubación de Sujetos con Vía Aérea Difícil
Los resultados del estudio indican que para la intubación con fibra óptica de vía aérea difícil, la utilización de dexmedetomidina se asocia con mejores condiciones de intubación y variables hemodinámicas, en comparación con el uso de fentanilo más ketamina.

Publicación en siicsalud
https://www.siicsalud.com/des/resiiccompleto.php/167291

Comentario
Autor del informe
Orlando Carrillo Torres(1) María Guadalupe Pliego Sánchez(2)  

(1) : Intensivista adscrito al servicio de anestesiología, Hospital General de México "Dr. Eduardo Liceaga", México
(2) Algólogapediátra adscrita al servicio de anestesiología, Hospital General de México "Dr. Eduardo Liceaga", México


En este estudio se evaluó la diferencia entre la satisfacción del paciente y del endoscopista al utilizar una combinación de analgésico opioide (fentanilo) con dexmedetomidina o ketamina; además de los cambios hemodinámicos y en la saturación de oxígeno relacionado.
El diseño fue un ensayo clínico aleatorizado en el que se midieron cuantitativamente las medias de la respuesta de los dos grupos y la diferencia estadísticamente significativa por medio de t de student (p <0.05 significancia o p> 0.05 falta de significancia) ya que se encontró que por prueba de Shapiro-Wilks; las variables fueron paramétricas. El procedimiento se graficó por medio de protocolo CONSORT para conocer los momentos de intervención y posibles sesgos, aunque no se describió la manera en la que se realizó la
aleatorización de los pacientes.
El estudio fue doblemente cegado (ya que ni el anestesiólogo y/o paciente conocieron el fármaco que fue aplicado). Como objetivo para la dosificación fue lograr una sedación en la Ramsay Sedation Scale (RSS) = 2; lo cual es un punto que en la discusión se debió de analizar ya que en general lo que esta establecido para evitar sesgos, es buscar la equipolencia de los medicamentos.
Se realizaron comparaciones entre variables para conocer la satisfacción y diferencia estadística, y aunque si existieron diferencias estadísticas en algunas variables, no es posible conocer la significancia clínica ya que solamente describen la desviación estándar sin los intervalos de confianza. La satisfacción del paciente y del médico es un punto importante para considerar, sobre todo por el hecho de que, al no ser dosis equipotentes, existe la posibilidad que la ketamina alcanzara dosis de disociación aún con los pacientes ventilando espontáneamente sin la posibilidad de responder a órdenes; por ello es probable que los médicos prefirieran la dexmedetomidina. En cuanto a la analgesia y sedación posterior al procedimiento, la dexmedetomidina por sus características farmacológicas, puede producir de una mayor intensidad y por más tiempo, aunque los pacientes no tuvieron diferencias en la satisfacción entre los grupos.
El objetivo en el estudio, determinar comparaciones entre fármacos, se cumplió; con lo que se puede determinar que el uso de ambos anestésicos (alfa 2 agonista e inhibidor del NMDA) son seguros para la realización de broncoscopía y satisfactorios tanto para el médico como para el paciente. Se observaron la existencia de sesgos de información y algunas variables, por lo que la diferencia estadística encontrada, no resulta muy relevante y faltaría conocer, sabiendo si se interponen los intervalos de confianza, la diferencia clínica que finalmente es lo aporta de este tipo de estudios, logran cambios en los paradigmas durante los procedimientos médicos. Copyright © SIIC, 2022

Palabras Clave
condiciones de intubación, cambios hemodinámicos, intubación con fibra óptica en el paciente despierto, vía aérea difícil anticipada
Especialidades
AN.gif   Ci.gif        C.gif   EdM.gif   F.gif   Mfa.gif   MI.gif   N.gif   Ne.gif   
Informe
Red Científica Iberoamericana
Camilo Urra Albornoz
Columnista Experto de SIIC
Institución: Universidad Católica del Maule
Talca Chile

Uso de redes sociales, ansiedad, depresión e indicadores de adiposidad corporal en adolescentes
Este estudio demostró que la ansiedad y la depresión están relacionadas estrechamente con elevados índices de adiposidad corporal y, al mismo tiempo, con mayor uso de redes sociales en adolescentes de ambos sexos. Sin embargo, los indicadores de adiposidad corporal no se asociaron con el uso de redes sociales. Estos hallazgos sugieren que los adolescentes con un elevado número de horas en redes sociales, adoptan estilos de vida que perjudican principalmente su salud mental.

Publicación en siicsalud
Artículos originales > Expertos de Iberoamérica >
http://www.siicsalud.com/acise_viaje/ensiicas-profundo.php?id=158538

Comentario
Autor del informe
Claudia Wydler(1) Liliana Papalia(2)  

(1) Hospital General de Agudos "Dr. Ignacio Pirovano", Buenos Aires, Argentina
(2) Responsable Área Nutrición – Obesidad, Instituto Realize: Dra. Tania Borda, Buenos Aires, Argentina


Los adolescentes de hoy crecen en un mundo digital que les resulta natural, pero los efectos que la virtualidad ejerce sobre su bienestar físico y su salud mental aún continúan en estudio. Los adolescentes y los jóvenes se encuentran entre los usuarios que más utilizan las redes sociales y es común que los jóvenes coman o duerman cerca de sus teléfonos. ¿Qué padres desconocen lo que es pedir a sus hijos que dejen el celular para cenar en familia o para irse a dormir más temprano? Es un tema de estudio el que el uso excesivo de las redes sociales podría tener consecuencias adversas en el desarrollo durante la adolescencia, entre las que se incluye bajo nivel educativo, abandono escolar, relaciones sociales deterioradas y,
en sus extremos, mayor riesgo de abuso de sustancias, problemas de salud mental y suicidio; además, sumado a ello, se agrega que sería un factor de riesgo significativo para trastornos cardiovasculares, sobrepeso y obesidad. Esto último nos refiere directamente a la investigación en cuestión.
El objetivo de esta investigación fue determinar la relación entre el uso de redes sociales y la presencia de ansiedad, depresión e indicadores de adiposidad corporal en adolescentes de ambos sexos.
Los resultados han puesto de manifiesto una relación positiva entre el uso de las redes sociales y la ansiedad y depresión, y la presencia de estas últimas, a su vez se asoció positivamente con los indicadores de adiposidad corporal en ambos sexos, excepto en mujeres en cuanto a la relación entre la circunferencia de cintura y la ansiedad. Esta última diferencia entre los distintos sexos puede tener su explicación en que en las redes sociales se ve reflejado algo que se manifiesta a través de diferentes discursos, muchos de ellos paradójicos, como una modificación en la presión social sobre el cuerpo: lo que se denomina una “ilusoria liberación del cuerpo femenino”. Es decir una valorización y un culto al cuerpo sin precedentes, que específicamente en el caso de la figura femenina, es valorado de forma positiva o negativa, no sólo por la mirada masculina sino además, por una mirada que juzga a las mujeres por las mismas mujeres, que afecta la autoestima y genera mayor labilidad emocional. Con respecto a las redes sociales, se encuentra establecido que el uso de ciertas aplicaciones que se caracterizan por proponer retos, llevan a compararse con otras personas “más exitosas” y potencian intencionadamente el éxito de los cuerpos “atractivos” además de permitir comentarios negativos hacia los que no lo son tanto, puede generar frustración y dar lugar a elementos que son un coctel peligroso sobre la nutrición, el cuerpo y la imagen corporal, al mismo tiempo que afectan negativamente a la salud mental. La regulación emocional juega un rol central en el comportamiento alimentario y el control del peso corporal y el proceso por el que se da la ganancia de peso a través del tiempo es muy complejo. El estrés y la ansiedad pueden conducir a un aumento del apetito y cambios en las preferencias alimentarias. Estaríamos ante una ingesta emocional que refiere el consumo de alimentos por razones diferentes a la ingesta homeostática: esto sería para afrontar emociones, para celebrar, para socializar, en respuesta a señales del entorno y en respuesta a creencias relacionadas con los alimentos o el cuerpo. Peor aún, las redes sociales en relación con la alimentación suelen suscitar confusión al presentar diferentes discursos contrapuestos. Si a esto le añadimos que un mismo discurso suele ser modificado una y otra vez por nuevos estudios, los cambios socioculturales o los intereses económicos, entre otros factores, la desorientación es todavía mayor. Si bien algunos adolescentes, por su propia iniciativa, miden y reducen su tiempo en las redes sociales para realizan actividades por fuera de sus dispositivos, esto podría no ser sencillo para adolescentes que sufren ansiedad, depresión u obesidad, con el estigma que dichos padecimientos en algunas sociedades implica. Enfocarse en esta población cuándo tienen dichos factores de riesgo, podría evitar el uso problemático de las redes sociales y promover conductas más saludables. Sería prioritario que los padres, no sólo en la adolescencia, sino antes de la llegada de la misma, entrenen a sus hijos a cortar a tiempo el excesivo uso de la tecnología para dar lugar a mayor cantidad de horas de sueño y comidas compartidas en familia, libre de dispositivos dando un lugar adecuado a ambas actividades fundamentales en la vida de todo adolescente. Rever y mitigar el impacto de las redes sociales, diseñando programas eficaces de intervención abarcando la imagen corporal, la autoestima, y la educación alimentaria, sería una herramienta fundamental para trabajar en el mejoramiento de la autorregulación conductual, es decir, la habilidad de inhibir impulsos, de calmarse frente al estrés, que tendría un importante efecto en la prevención del aumento y el mantenimiento del peso corporal.

Especialidades
SM.gif   SP.gif        EdM.gif   Nu.gif   P.gif   
Informe
Autor del informe original
Claudia Paola Félix de la O
Columnista Experto de SIIC
Institución: Instituto Mexicano del Seguro Social
La Paz México

Disminución del índice de masa corporal al sustituir bebidas endulzadas por agua simple
Los profesionales de la salud recomiendan aumentar el consumo de agua a 8 tazas por día para reducir el peso. A pesar de la adopción de este consejo, la evidencia de su eficacia es limitada. La sustitución de bebidas edulcoradas por agua simple como intervención para la disminución del índice de masa corporal en trabajadores del Instituto Mexicano del Seguro Social, logró resultados estadísticamente significativos, que confirman nuestra hipótesis de trabajo.

Resumen
Antecedentes: Los profesionales de la salud recomiendan aumentar el consumo de agua a 8 tazas por día para reducir el peso. A pesar de la adopción de este consejo, la evidencia de su eficacia es limitada. Objetivo: Evaluar la sustitución de bebidas edulcoradas por agua simple como intervención para disminución del índice de masa corporal (IMC) en trabajadores sanitarios. Materiales y métodos: Se llevó a cabo un estudio analítico, cuasiexperimental, longitudinal y prospectivo, en el Hospital General de Zona / Medicina Familiar N° 1, de La Paz, México, del 15 de octubre de 2019 al 15 de abril de 2020. Se desarrolló un instrumento de recolección para recopilar información para evaluar la ingesta de agua en trabajadores de la salud, recomendando el consumo de agua simple de 8 tazas por día; se determinaron medidas antropométricas al inicio y al final del estudio. Resultados: Se realizó la recolección de los datos de 150 trabajadores del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) que aceptaron participar. La edad fue de 40.1 ± 8.4 años, con una distribución mayor en mujeres, con 60.0%; la mayoría pertenecía al turno matutino (46.0%). Luego de la intervención, encontramos que solo el 9.3% tenía ingesta de menos de 1 l/día, el 23.3% de 1 a 1.5 l/día y el 67.3% presentó la ingesta recomendada de 1.6 a 2 l/día. El peso inicial fue de 87.0 ± 17.4 kg vs. 84.1 ± 15.4 kg al final. Por su parte, el IMC inicial fue 31.1 ± 4.8 kg/m2 y final de 30.1 ± 4.4 kg/m2. El análisis inferencial mediante la prueba de diferencias para muestras emparejadas identificó una diferencia estadísticamente significativa en favor de la intervención para el IMC, con una reducción media de 1.004 kg/m2 (IC 95%: 0.776 a 1.232, p < 0.001). Conclusiones: La sustitución de bebidas edulcoradas por agua simple como intervención para disminución del IMC en trabajadores del IMSS, logró resultados estadísticamente significativos, que confirman nuestra hipótesis de trabajo.

Publicación en siicsalud
Artículos originales > Expertos de Iberoamérica >
https://www.siicsalud.com/des/expertocompleto.php/169010

Comentario
Autor del informe
Laura Colombo 
Jefa de Docencia, Hospital Escuela Eva Perón, Granadero Baigorria, Argentina


La mejora de la calidad de vida a través de cambios en los hábitos alimentarios es actualmente en uno de los temas de mayor interés por parte tanto de la comunidad científica como de la población general. Resulta por lo tanto muy interesante la decisión de plantear hipótesis que, de verificarse, podrían ser un aporte para quienes tienen la capacidad de tomar decisiones en este ámbito.
Los autores consideraron la población hospitalaria como un grupo de riesgo de enfermedades relacionadas con mala alimentación y sedentarismo. El índice de masa corporal (IMC) es un método rápido, de fácil de aplicación y de bajo costo para evaluar sobrepeso, aunque actualmente se lo considera solamente como un buen orientador, a nivel poblacional más que individual, ya que
no permite observar la composición corporal. La densitometría y la bioimpedancia se imponen para identificar la adiposidad de tipo central como predictor de riesgo cardiometabólico y mortalidad. Existe evidencia de que beber ayuda a perder peso debido a diferentes mecanismos, entre ellos la termogénesis. Las personas obesas tienen mayor requerimiento de agua para una correcta hidratación y generalmente presentan un consumo inferior al aconsejado.
De acuerdo con lo anteriormente expuesto resulta valorable la realización un estudio prospectivo, durante seis meses estudiando el comportamiento de las variables luego de cesar el consumo de bebidas azucaradas.
Es meritorio haber logrado la incorporación de un número importante de agentes de la salud a los que se caracteriza correctamente desde el punto de vista antropométrico, según sexo e incluso horario de trabajo. No se observaron bajas durante el lapso en que se llevó adelante el trabajo, seguramente como respuesta a una comunicación permanente por parte del grupo de investigadores. El proceso de medición y registro de las distintas variables fue cuidadosa y correctamente explicado.
Sin embargo, me permito puntualizar algunos aspectos que considero cuestionables 1. El objetivo no se encuentra planteado claramente, la metodología utilizada permite observar el comportamiento de algunos parámetros preintervención y posintervención, no evaluar ni definir su efecto sobre el índice de masa corporal.
2. Al tratarse de un estudio cuasi experimental, la falta de un grupo control lo hace más susceptible de sesgos y los datos se constituyen en una aproximación a una probable asociación causa-efecto que se debe probar utilizando el modelo de estudio correspondiente.
3. Si bien queda claramente de manifiesto el aumento del consumo de agua por parte de los sujetos en estudio, el cese del consumo de bebidas azucaradas puede, per se, ser causa de una disminución del índice de masa corporal.
4. Los resultados de la reducción del índice de masa corporal (IMC) muestran un intervalo relativamente amplio que incluye el 1, y por lo tanto significa que no existe suficiente evidencia que avale la hipótesis.
En síntesis, el trabajo evalúa el comportamiento de dos variables, el consumo de agua y el cese de consumo de bebidas azucaradas y la probable influencia de éstas sobre el IMC. El aumento del consumo de agua verificado durante los seis meses del estudio fue incentivado por el grupo de investigadores y se espera se haya mantenido luego de finalizado el estudio, ya que se asocia con una composición corporal más saludable. Estimo que hubiese sido más correcto analizar la influencia del consumo de agua como única variable independiente luego de un período considerable de dieta sin bebidas azucaradas, por ejemplo, seis semanas.
Copyright © SIIC, 2022

Palabras Clave
agua, bebidas edulcoradas,, índice de masa corporal., perdida de peso, trabajador de la salud
Especialidades
AP.gif   EM.gif   MF.gif        En.gif   Ep.gif   MF.gif   SP.gif   
Informe
Autor del informe original
KN Anderson
Institución: Centers for Disease Control and Prevention,
Atlanta EE.UU.

Fármacos Antidepresivos Específicos durante las Primeras Etapas del Embarazo y Riesgo de Defectos Congénitos Específicos
La utilización del antidepresivo venlafaxina se asoció con el número más alto de malformaciones congénitas; sin embargo, el hallazgo deberá ser confirmado en estudios futuros por la evidencia escasa, disponible hasta ahora. Los hallazgos sugieren la necesidad de considerar el sesgo asociado con las enfermedades subyacentes y de analizar los riesgos que suponen la depresión o la ansiedad sin tratamiento apropiado.

Publicación en siicsalud
https://www.siicsalud.com/des/resiiccompleto.php/164284

Comentario
Autor del informe
Doménica Alejandra Villarreal Gómez 
Instituto Mexicano del Seguro Social, Veracruz, México


La depresión y ansiedad se consideran trastornos de gran importancia en el embarazo. Se estima que la depresión afecta a 350 000 000 de personas en el mundo y afecta más a la mujer que al hombre. Tiene la capacidad de inducir cambios desfavorables en la salud física y psicológica de las pacientes.
La ansiedad se define como un estado subjetivo de incomodidad, malestar, tensión y displacer que hace que el sujeto se sienta molesto. La depresión debe considerarse en términos de debilidad interna, vulnerabilidad y en el sentido del desamparo e inferioridad del propio yo. La mujer suele ser más susceptible, gran parte debido a los cambios hormonales durante el ciclo menstrual y aún más en el embarazo.
La ansiedad y la depresión
antes del parto son trastornos psiquiátricos frecuentes y factores de riesgo a padecer trastornos postparto. La causa de estas patologías es indefinida, se relaciona con una combinación de factores genéticos, ambientales (estrés, traumas), exigencias físicas y emocionales de tener hijos y cuidar a un nuevo bebé, y a los cambios hormonales durante el embarazo. El diagnóstico se basa en los criterios establecidos por el DSM -V y la aplicación de escalas, como la Escala de depresión postnatal de Edimburgo. Existe una relación entre presentar depresión durante el embarazo y más riesgo de parto prematuro, bajo peso del bebé al nacer, menor crecimiento fetal y otros trastornos del recién nacido. La inestabilidad de la depresión durante el embarazo también aumenta el riesgo de depresión posparto, de terminación temprana de la lactancia materna y de dificultad para establecer un vínculo con el bebé.
El tratamiento durante el embarazo es un reto para el clínico, la decisión de usar antidepresivos durante el embarazo se basa en un equilibrio entre riesgos y beneficios, es indispensable tener conocimiento actual sobre las implicaciones que tiene el uso de antidepresivos. Todos los antidepresivos tienen transmisión fetoplacentaria y son excretados en la leche materna. Se ha estudiado extensamente la seguridad de los antidepresivos con respecto al riesgo de teratogénesis, síndromes perinatales, complicaciones posnatales del neurodesarrollo y de la lactancia. Se recomienda el uso de antidepresivos como los inhibidores selectivos de la recaptura de serotonina como sertralina y citalopram que no se han relacionado con teratogenicidad pero sí con cambios de peso en la madre y parto pretérmino. Estudios muestran que los inhibidores selectivos de la recaptura de serotonina no se asocian con anomalías congénitas. La fluoxetina se considera el inhibidor selectivo de la recaptura de serotonina más seguro, pero se ha identificado un riesgo elevado de malformaciones congénitas cardiovasculares durante el primer trimestre del embarazo.
La sertralina y el citalopram no sugieren incremento en el riesgo de malformaciones congénitas cardiovasculares. Los inhibidores de la recaptación de serotonina y norepinefrina (IRSN), también se consideran una opción durante el embarazo y dentro de ellos están la duloxetina y la venlafaxina , sin embargo, los estudios plantean una relación entre tomar inhibidores de la recaptación de serotonina y norepinefrina al final del embarazo y hemorragia posparto. La venlafaxina no parece asociarse con un riesgo aumentado de malformaciones fetales, pero está asociado a un riesgo incrementado de hipertensión arterial.
Es indispensable la evaluación y control psicológico de la mujer embarazada, es de vital importancia en la salud de la gestante crear una consulta psicológica-psiquiátrica permanente en las clínicas dentro de su control prenatal, elaborando seguimiento y vigilancia de las pacientes con depresión y ansiedad, durante y después del embarazo, para determinar la evolución y repercusiones de los tratamientos a largo plazo en la salud del binomio madre e hijo.

Palabras Clave
uso materno, fármacos antidepresivos específicos, primeras etapas del embarazo, defectos congénitos seleccionados
Especialidades
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Informe
Autor del informe original
JY Shim
Institución: University of Ulsan College of Medicine,
Seúl Corea del Sur

Manejo Óptimo de la Anemia en Embarazadas
Cerca del 30% de las mujeres en edad reproductiva en todo el mundo tienen anemia, y por lo menos la mitad de estos casos se debería a deficiencia de hierro. La prevalencia de este tipo de anemia llega hasta el 50% en mujeres sin aporte suplementario de hierro, pero puede alcanzar valores del 25%, inclusive en mujeres que reciben este aporte.

Publicación en siicsalud
https://www.siicsalud.com/des/resiiccompleto.php/167662

Comentario
Autor del informe
Jose Antonio Gomez Maidana 
Coordinador de la Unidad de Medicina Fetal, Hospital Regional Río Gallegos, Río Gallegos, Argentina


Cerca del 30% de las mujeres en edad reproductiva en todo el mundo tienen anemia, y por lo menos la mitad de estos casos se debería a anemia por deficiencia de hierro (ADH). La prevalencia de esta anemia llega hasta el 50% en mujeres sin aporte suplementario de hierro, pero puede alcanzar valores del 25%, inclusive en mujeres con este aporte.  Los requerimientos de hierro aumentan durante el embarazo debido a la demanda de la madre y el feto, lo que genera riesgo de aparición de ADH. Este cuadro se asocia con mayor riesgo de parto prematuro, bajo peso al nacer, restricción del crecimiento fetal y aumento en la mortalidad materna y neonatal. La ADH suele ser tratada con suplementos orales de hierro.
Sin embargo, estos tienen efectos adversos gastrointestinales como náuseas, vómitos y constipación, por lo que suelen ser discontinuados de forma frecuente. La carboximaltosa férrica (CMF) es una formulación de hierro libre de dextranos que permite administrar de forma rápida y semanal altas dosis de este nutriente. Ha sido aprobada para el tratamiento de la DH por las autoridades regulatorias europeas en 2007, por la Food and DrugA dministration de los EE.UU. (FDA) en 2013 y por la FDA coreana en 2010.
El estudio FER-ASAP fue un ensayo clínico aleatorizado, a doble ciego y de fase 2b, realizado en numerosos países, Corea entre ellos. Las participantes recibieron dosis de CMF de 1000 mg a 1500 mg por vía intravenosa o sulfato ferroso (SF) oral en dosis de 200 mg diarios. La dosificación de CMF fueron estratificados de acuerdo con el peso corporal previo al embarazo y con los niveles de Hb; la administración cesó a la semana 3 en este caso. Las pacientes tratadas con SF tuvieron una duración de tratamiento de 12 semanas.
 Para este análisis post hoc se incorporaron a las embarazadas mayores de 18 años que se encontraban entre la semana 16 y 33 del embarazo, con niveles de ferritina sérica menores de 20 ng/ml y ADH definida como un nivel de Hb entre 8 y 10.4 g/dl entre las semanas 16 y 26, o menor de 11 g/dl entre las semanas 27 y 33. El criterio de valoración principal fue comparar la eficacia de la CMF intravenosa con el SF oral para el tratamiento de la ADH desde el inicio del estudio hasta la semana 3. De las 252 pacientes embarazadas en el estudio original, 90 eran coreanas y fueron tratadas con CMF y SF (46 y 44, respectivamente) en 9 centros, entre 2010 y 2014.  En las mujeres coreanas embarazadas, el nivel de Hb se incrementó a lo largo del período de estudio en ambos grupos, aunque las mujeres tratadas con CMF tuvieron mejoras superiores desde el inicio hasta la semana 3, en comparación con las tratadas con SF, aunque la diferencia no fue estadísticamente significativa (p = 0.848). Sin embargo, los cambios fueron superiores a lo largo del tiempo. Además, se encontró que las tratadas con CMF tuvieron mayores probabilidades de corregir su anemia que las tratadas con SF (93.3% contra 85.7%, p = 0.304). El análisis comparativo de parámetros hematológicos demostró mayores incrementos en la ferritina sérica en cada visita para las pacientes tratadas con CMF.
Sobre la base de los resultados de este análisis de subgrupo de embarazadas coreanas con ADH durante las últimas etapas del embarazo, se demuestra que la Hb tiene mayores incrementos luego de la administración de CMF comparado con el SF, aunque la diferencia no fue estadísticamente significativa a la semana 3. Respecto de los  criterios de valoración secundarios, hubo mejoras en la ferritina sérica, el TSAT y el receptor de transferrina sérica en las pacientes tratadas con CMF, en comparación con el SF, así como en la calidad de vida.
En conclusión, la CMF es una alternativa eficaz y rápida para el tratamiento de la ADH en pacientes coreanas con embarazos avanzados. Además, se observaron menos eventos adversos y mejoras significativas en la calidad de vida. En pacientes que no pueden tolerar el hierro oral o tienen un período muy corto para corregir la ADH (esto es, antes del parto), la CMF podría ser una alternativa para la corrección de la anemia, con un perfil de seguridad similar al del hierro oral.

Palabras Clave
hierro intravenoso, deficiencia de hierro, anemia, embarazo, carboximaltosa férrica
Especialidades
He.gif   OG.gif        F.gif   Mfa.gif   MI.gif   Nu.gif   
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