LA ASISTENCIA INSTITUCIONAL EN LOS PARTOS COMO MEDIDA PARA REDUCIR LA MORTALIDAD MATERNA
Las ciudades de Pisco, Huancavelica y Ayacucho están dispuestas geográficamente en triángulo. En el medio de éste, se encuentra el pueblo de Santa Inés (4700 msnm), la puerta que abre la Ruta de los Espejos, una seguidilla de lagunas altiplánicas de entre las que se destacan por su belleza Choclococha, de la que se cuenta en alguna leyenda que oculta bajo sus aguas una ciudadela, y Orcococha.
De camino a Huancavelica, los profesores R. Bernal y R.M. Hermitte hicieron un alto en el Puesto de Salud de Santa Inés, a cuyo cargo está la enfermera y técnica Magda Huamán Cudo, quien afirma tener su actual profesión gracias a su padre, "(él) era chófer de hospital. De verlo acabó naciéndome esta profesión".
Según comenta la enfermera, desde que se terminó en la región el Programa Tambo Ccaracocha para resolver el problema de la falta de agua en el Valle de Ica, gran parte de la población de Santa Inés emigró hacia las ciudades de Huancayo, Ica o Ayacucho en busca de trabajo. Esto generó un descenso poblacional sin precedentes, por lo que en la actualidad Sta. Inés pasó a tener de 462 a 186 habitantes censados.
En referencia a las patologías predominantes de la zona, la enfermera Huamán alude fundamentalmente a las infecciones respiratorias como el principal mal a tratar. No obstante, en su opinión, comienza a haber una llamada de atención sobre otras afecciones acuciantes: "Ahorita en el Perú, por orden de prioridad, disminuir la mortalidad materna, tratar la desnutrición y abordar cuestiones de saneamiento ambiental son nuestros principales objetivos sanitarios."
Respecto a esta primera prioridad nacional, la enfermera manifiesta que por fortuna en Santa Inés ha comenzado a generarse una toma de conciencia en la comunidad y "ya casi todos los partos son asistidos institucionalmente en los hospitales de referencia de la zona, como Pilpichaca o Huancavelica." Además en esta aldea, al contrario de lo que sucede en otras regiones del Perú donde por tradición se acostumbra a atender partos verticales por voluntad materna, ya muchas de las parturientas solicitan expresamente el parto en camilla y rara es la vez que se practica el manteo.
Magda Huamán Cudo
Santa Inés, Perú