ReSIIC editado en: Infectología Pediatría Atención Primaria Bioquímica Cuidados Intensivos Diagnóstico por Imágenes Diagnóstico por Laboratorio Emergentología Epidemiología Neumonología Salud Pública |
Introducción
La enfermedad por coronavirus 2019 (COVID-19 por su sigla en inglés), causada por el coronavirus 2 del síndrome respiratorio agudo grave (Severe Acute Respiratory Syndrome [SARS]-CoV-2), surgió a finales de 2019 en la China y se propagó rápidamente a todo el mundo. Hasta junio de 2020 se habían comunicado más de 400 000 muertes por COVID-19. Francia es uno de los países con los índices más altos de infección, con alrededor de 30 000 decesos.
En los estudios epidemiológicos, los niños estuvieron muy poco representados entre los casos graves de COVID-19 (sólo entre 1% y 2% de todos los enfermos internados). Asimismo, diversos estudios sugirieron índices más bajos de infección en los niños respecto de los adultos y porcentajes elevados de formas benignas en la población pediátrica. Sin embargo, los niños con infección por SARS-CoV-2 pueden tener enfermedad grave y requerir internación en unidades de cuidados intensivos; recientemente se describieron diversos síndromes inflamatorios graves, con falla hemodinámica, en la población pediátrica. Por lo tanto, la identificación precoz de los pacientes con mayor riesgo de evolución desfavorable es un aspecto decisivo para el abordaje de niños con COVID-19.
Diversos estudios en pacientes con infección por SARS-CoV-2 sugieren que los niños de menos de 1 año y los niños con comorbilidades tendrían riesgo aumentado de evolución grave de COVID-19. Sin embargo, en estos trabajos se prestó especial atención a las formas respiratorias de la enfermedad y no se tuvo en cuenta el amplio espectro clínico de las infecciones por SARS-CoV-2 en los niños. Los factores asociados con COVID-19 en la población pediátrica siguen sin conocerse con exactitud.
Debido a que COVID-19 grave es muy infrecuente en niños, se requieren estudios a gran escala para describir con precisión las características y los factores predictivos de riesgo. En este escenario, el objetivo del presente estudio nacional de vigilancia fue aportar información acerca del espectro clínico en niños internados por COVID-19, el índice de formas graves de la enfermedad y los factores predictivos de progresión.
Pacientes y métodos
Fueron reclutados 60 hospitales de Francia, a partir de la red de meningitis bacteriana en niños de ese país. Se analizaron pacientes con infección por SARS-CoV-2 internados en uno de estos centros entre 15 de febrero y 1 de junio de 2020. La infección se confirmó por medio de reacción en cadena de la polimerasa por transcriptasa reversa (RT-PCR por su sigla en inglés) en tiempo real en hisopado nasofaríngeo y por tomografía computarizada de tórax, con lesiones características según los criterios del European Centre for Disease Prevention and Control y de la French National Health Agency. Se tuvieron en cuenta las características demográficas, las comorbilidades, los síntomas iniciales y los signos clínicos, los parámetros biológicos y microbiológicos, los hallazgos radiológicos, los tratamientos indicados y la evolución durante la internación. El criterio principal de valoración fue el porcentaje de pacientes con evolución grave de la infección por SARS-CoV-2, es decir enfermos que requirieron sostén ventilatorio o hemodinámico o pacientes que fallecieron durante la internación.
Resultados
Fueron evaluados 397 niños internados por COVID-19. Se identificaron diversos patrones clínicos, desde enfermedad con muy pocas manifestaciones clínicas, en pacientes internados para vigilancia, infección del tracto respiratorio inferior, o síndrome inflamatorio multisistémico.
Los niños de menos de 90 días de edad representaron el 37% de los casos (145 de 397), pero sólo el 3% (n: 4) de los casos de enfermedad grave. Luego de la exclusión de los pacientes con síndrome inflamatorio multisistémico (n: 29) y de los pacientes internados con diagnóstico no relacionado con infección por SARS-CoV-2 (n: 62), 23 de 306 niños (11%) tuvieron enfermedad grave y 6 pacientes fallecieron. Los factores asociados, de manera independiente, con evolución grave de la infección fueron la edad igual o superior a los 10 años (odds ratio [OR] = 3.4, intervalo de confianza del 95% [IC 95%]: 1.1 a 10.3), la hipoxemia (OR = 8.9, IC 95%: 2.6 a 29.7) y los niveles séricos de proteína C-reactiva de 80 mg/l o más altos (OR = 6.6, IC 95%: 1.4 a 27.5).
Conclusión
A diferencia de lo referido con anterioridad, los resultados del presente estudio en una cohorte nacional indican que los niños de menos de 90 días constituyen un amplio porcentaje de los casos de pacientes pediátricos internados por COVID-19 pero, a la vez, son los que presentan el riesgo más bajo de evolución grave de infección por SARS-CoV-2.
Copyright siicsalud © 1997-2024 ISSN siicsalud: 1667-9008