Informes comentados


EM.gif Endocrinología y Metabolismo EM.gif
 
Informe
Resumen SIIC
E Lurbe
Institución: Universitat de València,
Valencia España

Comorbilidades Asociadas con la Obesidad Infantil
Se describen las enfermedades clásicas y emergentes asociadas a la obesidad, así como las complicaciones de procedimientos que requieren maniobras invasivas. El reconocimiento de las consecuencias asociadas a la obesidad infantil es de vital importancia no solo durante el periodo infantil, sino también su proyección a la vida adulta.


Publicación en siicsalud
http://www.siicsalud.com/des/resiiccompleto.php/175161


Comentario
Autor del comentario
Flor de María Cruz Estrada 
Jefa de Departamento, Comisión Nacional de Bioética, Ciudad de México, México


Las comorbilidades asociadas con la obesidad eran principalmente comunes en la edad adulta; sin embargo, la obesidad infantil se ha convertido actualmente en el punto de partida de enfermedades como diabetes mellitus (DBT), resistencia a la insulina, hipertensión arterial (HTA), apnea, trastornos músculo esqueléticos, algunos tipos de cáncer, etc., además, otras condiciones como el auto concepto, el enfoque social en los estereotipos, prejuicios o creencias acerca de la apariencia corporal del niño con obesidad pueden hacerlo sentir avergonzado, intimidado, culpable, discriminado o excluido, desencadenando a su vez, ansiedad, estrés (aumento de cortisol), baja autoestima, aislamiento social y/o depresión. El resumen objetivo del trabajo “Comorbilidades asociadas con la obesidad infantil" aborda la obesidad infantil y cómo sus complicaciones para la salud, pueden impactar en
edades posteriores, afectando, además, su desempeño académico o profesional, y generando posibles riesgos de discapacidad, incapacidad laboral o deserción académica, incluso muerte prematura. Hoy en día, el abordaje es preventivo, motivando a la sociedad en general a tener estilos de vida saludables, promoviendo una dieta sana y actividad física regular que estimule el bienestar general; sin embargo, al ser una enfermedad que no causa “dolor” ni “sufrimiento” y que muchas veces no se distinguen sus repercusiones futuras, es difícil que las personas acudan al servicio médico para tratarse a tiempo. Por esa razón, la necesidad inminente de contar con expertos o especialistas en obesidad que brinden a la población una orientación pertinente, clara, generando consciencia de la importancia de mantener hábitos y estilos de vida saludables en edades tempranas, es cada vez más valiosa. La información disponible acerca del consumo correcto y moderado de alimentos azucarados o edulcorantes, sobre todo en población infantil, ocasionaría ventajas futuras, es decir, cuando sean población madura, pues se ha demostrado que son los hidratos de carbono quienes influyen en la aparición del sobrepeso y obesidad, y que dicha acumulación de adipocitos con una vida promedio de 10 años, posee una gran diferencia de lo que sucede en la infancia: estos suelen permanecer estables en la edad adulta. Por lo anterior, tener una alimentación saludable, incluso desde el embarazo o el nacimiento de un hijo optando por la mejor opción: la leche materna y no por “fórmulas” (que, si bien se han modificado para que coincidan con la composición de la leche materna, no la sustituye; además de que no amamantar aumenta el riesgo de obesidad tanto en el bebé como en la madre); así como romper el sedentarismo marcado por la vida digital realizando ejercicio regular, recobra vital importancia en edades tempranas, abriendo camino a la condición física saludable, la cual, con sus componentes, en estado óptimo, relacionados con la salud (resistencia cardiorespiratoria y muscular, fuerza muscular, flexibilidad y composición corporal) mejoraría la salud de los niños con obesidad, ayudando a prevenir comorbilidades como el síndrome metabólico.
Por tal motivo, es imprescindible un abordaje multidisciplinario en el tratamiento de la obesidad infantil, con un enfoque en la “educación para la salud” que sea la “medicina preventiva” pero también la “medicina correctiva” de los niños que la padecen, ya que es tan importante prevenirla como tratarla, no obstante, en tanto la obesidad sea percibida como un defecto estético o asociada a pereza o falta de voluntad y no como una condición médica enfermedad crónica tratable y curable, será difícil un abordaje social y médico oportuno, que prevenga las afecciones fisiológicas, físicas y mentales que conlleva, restringiendo así, una calidad de vida, bienestar y el derecho a la salud que los niños, niñas y todas las personas merecemos.
Copyright © SIIC, 2025

Palabras Clave
obesidad, niños, adolescentes, anestesia, comorbilidades
Especialidades
EM.gif   P.gif         AN.gif   AP.gif   C.gif   D.gif   DB.gif   EdM.gif   G.gif   MF.gif   MI.gif   NM.gif   N.gif   Nu.gif   SP.gif   
Informe
Resumen SIIC
E Lurbe
Institución: Universitat de València,
Valencia España

Comorbilidades Asociadas con la Obesidad Infantil
Se describen las enfermedades clásicas y emergentes asociadas a la obesidad, así como las complicaciones de procedimientos que requieren maniobras invasivas. El reconocimiento de las consecuencias asociadas a la obesidad infantil es de vital importancia no solo durante el periodo infantil, sino también su proyección a la vida adulta.


Publicación en siicsalud
http://www.siicsalud.com/des/resiiccompleto.php/175161


Comentario
Autor del comentario
Mariel Alejandra Gabe 
Fundadora líder, Nutrición Infanto Juvenil, Buenos Aires, Argentina


La obesidad infantil representa una de las principales amenazas para la salud pública global. El resumen objetivo del trabajo “Comorbilidades asociadas con la obesidad infantil" de Herrera y Lurbe, publicado en Anales de Pediatría, ofrece una revisión integral de las comorbilidades asociadas a esta condición, aportando una perspectiva holística que resulta especialmente relevante para el abordaje interdisciplinario, en el cual el papel de los profesionales que trabajan con niños desempeña un punto central. En las últimas décadas, el crecimiento económico y la expansión de la industria alimentaria han promovido un mayor consumo de dietas con alta densidad energética y elevado contenido de grasas saturadas, acompañado de un estilo de vida cada vez más sedentario. A este escenario se suman las alteraciones en los
depósitos y en la función del tejido adiposo, que afectan la secreción de adipoquinas, proteínas bioactivas con funciones metabólicas e inflamatorias. Entre ellas, la proteína estimuladora de acilación (ASP), el factor de necrosis tumoral alfa (TNF-a), la interleucina-6 (IL-6), la resistina y la leptina se asocian con un aumento del estado proinflamatorio y con la resistencia a la insulina, mientras que la adiponectina, con efectos antiinflamatorios y sensibilizadores de la insulina, tiende a disminuir. Asimismo, moléculas como el angiotensinógeno y el inhibidor del activador del plasminógeno (PAI-1) impactan en la regulación de la presión arterial (PA) y la función vascular. Este desequilibrio entre adipoquinas pro y antiinflamatorias genera inflamación crónica de bajo grado, resistencia a la insulina, aterosclerosis y otras complicaciones microvasculares. En consecuencia, el incremento de la obesidad infantil, cada vez más frecuente en edades tempranas y en formas graves, obliga a replantear el paradigma de atención en niños y adolescentes.1
Las guías argentinas más recientes recomiendan el cribado precoz de alteraciones metabólicas, lipidómicas, deficiencia de vitamina D, hipertensión arterial (HTA) y esteatohepatitis no alcohólica entre otras comorbilidades.2
En Argentina, las guías de práctica clínica para la prevención, diagnóstico y tratamiento de la obesidad de la Sociedad Argentina de Pediatría (2024) reportan que más del 41% de los niños y adolescentes de 5 a 17 años presentan exceso de peso, de los cuales más del 20% corresponde a obesidad. Estas guías recomiendan un abordaje diagnóstico integral que incluya antropometría (índice de masa muscular [IMC], percentilos, circunferencia de cintura), antecedentes familiares y clínicos. Asimismo, enfatizan la necesidad de intervenciones interdisciplinarias centradas en cambios en el estilo de vida, con participación de la familia y seguimiento sostenido en el tiempo.3
Aunque el artículo de Herrera y Lurbe enfatiza las complicaciones respiratorias asociadas con la obesidad infantil, en particular el síndrome de apnea-hipopnea del sueño y sus repercusiones sobre el crecimiento, el rendimiento académico y el estado de ánimo, otros trabajos, como el de López-Galisteo et al., destacan además una mayor prevalencia de asma en esta población.2 En el ámbito psicosocial, la obesidad infantil se asocia con baja autoestima, trastornos del estado de ánimo y exclusión social. Estas consecuencias, aunque menos visibles, son profundamente incapacitantes. Como nutricionista, considero que la educación nutricional debe incorporar herramientas de comunicación empática, promoción de la imagen corporal positiva y trabajo con las familias para generar entornos alimentarios saludables y emocionalmente seguros. En esta misma línea, el consenso multidisciplinar publicado en la Revista Española de Nutrición Comunitaria resalta la necesidad de diseñar estrategias específicas para la prevención y el tratamiento de la obesidad infantil. El documento enfatiza la importancia del diagnóstico precoz y de planes de intervención inter y transdisciplinarios, destacando que la complejidad de esta problemática exige la participación coordinada de distintos profesionales de la salud.4
En conclusión, el artículo de Herrera y Lurbe constituye una contribución significativa al conocimiento clínico sobre la obesidad infantil, ya que integra múltiples dimensiones de sus comorbilidades y aporta una visión amplia de sus implicancias. Para el profesional de la salud que trabaja en pediatría, este enfoque multidisciplinario no solo representa una oportunidad para fortalecer su papel en la prevención, diagnóstico y tratamiento de esta condición, sino también un llamado a la acción para implementar estrategias sostenibles, individualizadas y culturalmente adaptadas. Asimismo, es necesario resaltar la importancia de promover intervenciones basadas en evidencia científica, centradas en el paciente y su familia, que incluyan la educación nutricional, la promoción de hábitos de vida saludables y el acompañamiento psicosocial, con el fin de mejorar la calidad de vida de los niños y adolescentes afectados y reducir el impacto de esta problemática en la salud pública. Finalmente, resulta esencial continuar trabajando en esta línea, consolidando los esfuerzos ya iniciados en el ámbito clínico y comunitario, y articulando la práctica asistencial con la investigación y las políticas públicas para enfrentar de manera integral el desafío de la obesidad infantil.
Copyright © SIIC, 2025

Referencias bibliográficas
1 Herrera R, Lurbe E. A holistic perspective of the comorbidities in childhood obesity. An Pediatr (Engl Ed) 101(5):344-350, 2024.
2 López-Galisteo JP et al. Prevalence and risk factors associated with different comorbidities in obese children and adolescents. Endocrinología, Diabetes y Nutrición 69(8):566–575, 2022.
3 Sociedad Argentina de Pediatría. Guías de práctica clínica para la prevención, diagnóstico y tratamiento de la obesidad. Actualización 2024. Arch Argent Pediatr. 123(4):e1-e27, 2025. Disponible en: https://www.sap.org.ar/docs/publicaciones/archivosarg/2025/v123n4a01.pdf 4 García-Solano M, et al. Consenso multidisciplinar sobre la prevención y abordaje de la obesidad infantil. Rev Esp Nutr Comunitaria 29(2):1-15, 2023. Disponible en: https://www.renc.es/imagenes/auxiliar/files/RENC-D-22-0026.pdf

Palabras Clave
obesidad, niños, adolescentes, anestesia, comorbilidades
Especialidades
EM.gif   P.gif         AN.gif   AP.gif   C.gif   D.gif   DB.gif   EdM.gif   G.gif   MF.gif   MI.gif   NM.gif   N.gif   Nu.gif   SP.gif   
Informe
Resumen SIIC
MG Ballerini
Institución: Hospital de Niños “Ricardo Gutiérrez”,
Buenoas Aires Argentina

Precisión Diagnóstica del Cortisol Salival para Evaluar el Hipercortisolismo Endógeno en los Niños
El cortisol salival nocturno es un biomarcador preciso para confirmar el síndrome de Cushing en los niños con una sensibilidad y especificidad dentro del 100%.


Publicación en siicsalud
http://www.siicsalud.com/des/resiiccompleto.php/175735


Comentario
Autor del comentario
Cecilia Maribel Diaz Olmedo 
Médico de planta, Hospital Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social Quevedo, Quevedo, Ecuador


El síndrome de Cushing (SC) es un trastorno poco frecuente en pediatría, caracterizado por hipercortisolismo crónico y signos como obesidad central, estrías, y retraso en el crecimiento. Su diagnóstico es un desafío, especialmente en niños con obesidad exógena, donde los síntomas pueden superponerse. En el resumen objetivo sobre el trabajo Nocturnal Salivary Cortisol Is an Accurate Non-Invasive Test to Assess Endogenous Hypercortisolism in Children with Obesity and a Clinical Phenotype Suspicious for Cushing’s Syndrome, se evaluó la precisión diagnóstica del cortisol salival nocturno (CSn) como prueba no invasiva para detectar hipercortisolismo en niños con obesidad y sospecha clínica de SC.
En la metodología se realizó un estudio de casos y controles con 112 niños (2 – 18 años, índice de masa corporal (IMC) =
2.0 desviaciones estándar (DE). Los participantes se clasificaron en 3 grupos según su fenotipo clínico: grupo A: rasgos fuertemente indicativos de SC (retraso de crecimiento más aumento de peso); grupo B: rasgos sugestivos de SC (cara de luna, estrías); grupo C: rasgos inespecíficos (hipertensión arterial, hirsutismo, resistencia a la insulina). El grupo control incluyó niños de los grupos A y B (sin SC confirmado), mientras que el grupo de casos consistió en 10 pacientes con SC confirmado mediante el cortisol libre urinario (CLU) de 24 h = 90 µg/24 h y pruebas complementarias. Todos los participantes recolectaron muestras de saliva a las 7 – 8 a.m. (CSm) y a las 11 p.m. (CSn). Se midió el cortisol salival mediante electroquimioluminiscencia.
En los resultados obtenidos los investigadores demostraron que el CSn fue significativamente mayor en niños con SC (mediana: 15.1 nmol/L) frente a los controles (2.0 nmol/L; *p* < 0.0001). Un punto de corte de CSn =8 nmol/L mostró sensibilidad y especificidad del 100% para diagnosticar SC. La disminución porcentual nocturna del cortisol (%D) fue menor en SC (40.9%) comparado con controles (68.7 – 71.0%; *p* < 0.0001), pero su precisión diagnóstica fue inferior (81%). Ningún niño con SC presentó un %D = 50%. Mediante este estudio se demuestra que el CSn es una prueba efectiva para confirmar hipercortisolismo en niños con obesidad y sospecha de SC. Su utilidad radica en su no invasividad y facilidad de recolección, evitando hospitalizaciones requeridas por pruebas tradicionales como cortisol sérico nocturno. Además, se observó que los niños con obesidad exógena mantienen el ritmo circadiano normal de cortisol, que permite diferenciarlos de aquellos con SC.
El cortisol salival a las 11 p.m. (CSn = 8 nmol/L) es una prueba eficaz como primer paso en el algoritmo diagnóstico de SC en pediatría. Valores por encima de este umbral justifican estudios adicionales (imágenes, pruebas dinámicas) para confirmar la etiología.
Este estudio sobre el CSn como herramienta diagnóstica para el SC en niños con obesidad tiene implicaciones significativas en entornos con recursos limitados por la facilidad de recolección de la muestra que no requiere hospitalización previa o venopunciones repetidas, y es de fácil acceso. Además, permite evitar el sobrediagnóstico y las pruebas innecesarias a niños que no cumplan criterios de estudio.
La determinación de CSn es un método de diagnóstico accesible, económico y fiable para diagnosticar SC en niños con obesidad, sobre todo en unidades de salud con limitaciones tecnológicas y económicas. La implementación precoz de esta prueba diagnóstica puede optimizar el abordaje diagnóstico en el paciente pediátrico con obesidad, prevenir complicaciones metabólicas a largo plazo como la diabetes y la osteoporosis y racionalizar el uso de recursos sanitarios. Copyright © SIIC, 2025

Palabras Clave
síndrome de Cushing, niños, obesidad, cortisol salival, ritmo circadiano
Especialidades
EM.gif   P.gif         AP.gif   Bq.gif   DL.gif   EdM.gif   Nu.gif   Od.gif   SP.gif   
Informe
Resumen SIIC
E Lurbe
Institución: Universitat de València,
Valencia España

Comorbilidades Asociadas con la Obesidad Infantil
Se describen las enfermedades clásicas y emergentes asociadas a la obesidad, así como las complicaciones de procedimientos que requieren maniobras invasivas. El reconocimiento de las consecuencias asociadas a la obesidad infantil es de vital importancia no solo durante el periodo infantil, sino también su proyección a la vida adulta.


Publicación en siicsalud
http://www.siicsalud.com/des/resiiccompleto.php/175161


Comentario
Autor del comentario
Alan Berduc 
Director, Instituto de Ciencias de la Salud, Universidad Nacional del Oeste, Merlo, Argentina


El resumen objetivo sobre el trabajo Una Visión Holística de las Comorbilidades en la Obesidad Infantil de Herrera y Lurbe ofrece un excelente compendio de las múltiples afecciones asociadas con el exceso de adiposidad en niños y adolescentes. La obesidad infantil es hoy un problema de salud pública de alcance mundial: su prevalencia ha crecido de manera exponencial durante las últimas décadas y se asocia no solo con un exceso de adiposidad, sino a una disfunción metabólica y un patrón inflamatorio de bajo grado que comprometen el desarrollo físico, psicológico y social de niñas, niños y adolescentes. Según la Organización Mundial de la Salud, en 2022 más de 390 millones de niños y adolescentes de 5 a 19 años tenían sobrepeso, de los
cuales 160 millones eran obesos.
En el contexto pospandemia y con tendencias mundiales de aumento de la obesidad infantil, la revisión adquiere urgencia. El reconocimiento temprano de perfiles de riesgo, uso de antropometría más allá del índice de masa corporal (IMC), medición de circunferencia de cintura, valoración de ácido úrico y marcadores de resistencia insulínica, es coherente con la evidencia emergente que se asocia con la adiposidad visceral y daño multiorgánico. Además, la atención a la estigmatización y su efecto paradójico sobre la salud es clave para diseñar programas que no perpetúen daños psicosociales.
El presente trabajo aborda, de manera exhaustiva, tanto las comorbilidades clásicas (musculoesqueléticas, respiratorias, cutáneas) como las de aparición más sigilosa (renal, hígado graso metabólico, cardiometabólicas) y las repercusiones psicosociales. Esta amplitud permite apreciar la obesidad infantil como un proceso multisistémico, subrayando la necesidad de un abordaje interdisciplinario integral.
Este artículo contribuye al: - Reconocimiento temprano de comorbilidades: destaca la importancia de buscar marcadores de daño subclínico (microalbuminuria, alteraciones hepáticas asintomáticas) para prevenir la progresión a enfermedad crónica adulta.
- Énfasis en la dimensión psicosocial: al visibilizar el estigma y la baja autoestima, el trabajo impulsa la incorporación de estrategias de apoyo psicológico en los programas de tratamiento.
- Implicaciones perioperatorias: el apartado sobre anestesia es un aporte novedoso que enlaza la fisiopatología de la obesidad con el abordaje farmacológico y de la vía aérea en procedimientos invasivos.
La revisión deja clara la necesidad de: a) cohortes longitudinales pediátricas que cuantifiquen el riesgo de progresión a enfermedad renal crónica y eventos cardiovasculares; b) estudios multicéntricos que estandaricen definiciones pediátricas de síndrome metabólico y validen puntos de corte antropométricos predictivos; c) ensayos de intervención integrados (clínicos + escolares + comunitarios) que incluyan métricas de reducción del estigma; y d) análisis de la rentabilidad de las herramientas diagnósticas no invasivas (elastografía, resonancia magnética cuantitativa) para cribado del hígado graso asociado con disfunción metabólica (MAFLD por su sigla en inglés) en población pediátrica. Estos ejes permitirían pasar de la descripción al diseño de políticas escalables.
Los autores sintetizan con rigor la amplitud de daños asociados con la obesidad infantil y recuerdan que muchas enfermedades del adulto tienen raíces pediátricas. Su llamado implícito es a combinar diagnóstico precoz, tratamientos adaptados y políticas que aborden los determinantes sociales y el estigma. La evidencia acumulada exige un cambio: pasar de abordajes fragmentados a estrategias integradas y sensibles a la dimensión psicosocial, con investigación orientada a intervenciones escalables y equitativas. Copyright © SIIC, 2025

Palabras Clave
obesidad, niños, adolescentes, anestesia, comorbilidades
Especialidades
EM.gif   P.gif         AN.gif   AP.gif   C.gif   D.gif   DB.gif   EdM.gif   G.gif   MF.gif   MI.gif   NM.gif   N.gif   Nu.gif   SP.gif   
ua81618
Inicio/Home

Copyright siicsalud © 1997-2025 ISSN siicsalud: 1667-9008