Pese al aumento del consumo de los análogos cárnicos de origen vegetal, el ensayo desafía la percepción común referida a sus consecuencias para la salud cardiovascular en comparación con las carnes tradicionales.
Temas principales: proteína animal, presión arterial, riesgo de enfermedad cardiovascular, carne tradicional, análogos de carne a base de plantas, proteína vegetal
El trabajo que publica la revista The American Journal of Clinical Nutrition * compara en adultos con riesgo elevado de diabetes tipo 2, el efecto del consumo de una dieta omnívora a base de carne animal (Animal-based Meat Diet, ABMD) con otra de análogos de carne de origen vegetal (Plant-based Meat Analog Diet, PBMA).
Motivaciones del estudio
En los últimos años, las PBMA experimentaron un notable aumento en la producción y disponibilidad en todo el mundo. Entre los varios factores incidentes, el ensayo menciona las preocupaciones sobre la sostenibilidad, el bienestar animal, el aumento de la demanda de proteínas y los halos de salud que rodean a estos alimentos.
La introducción de PBMA en las dietas de la población, motivó a los autores a profundizar la comprensión nutricional de estos alimentos, su impacto en la incorporación dietética en nombre de la salud y el riesgo potencial de provocar enfermedades crónicas.
El artículo señala que es el primero de Asia en examinar los efectos del consumo de PBMA o sus homólogos de origen animal en la salud cardiometabólica.
Existe evidencia que aborda las ventajas cardiometabólicas de las dietas vegetarianas y veganas en comparación con las omnívoras, debido a la gran variedad de vitaminas, fibras y antioxidantes de las primeras. Sin embargo, para quienes comen carne de manera habitual, el cambio a este tipo de dietas puede resultar complicado debido a influencias culturales, históricas y sociales arraigadas sobre el consumo de carne, entre otros factores.
El diseño de los análogos cárnicos de origen vegetal pretende imitar el sabor y la textura de la carne real a través de ingredientes sostenibles cuyo consumo crece en todo el mundo.
El impacto en la salud de los análogos cárnicos
El objetivo del estudio fue investigar en la salud cardiometabólica de hombres y mujeres con un riesgo elevado de diabetes mellitus tipo 2 (T2DM), los efectos de los patrones dietéticos característicos o de las dietas que incluían análogos cárnicos como los de aquellas basadas en alimentos de origen animal.
Los investigadores plantearon la hipótesis de que las sustituciones dietéticas de carne animal por PBMA influirían positivamente en la salud cardiometabólica y reducirían los riesgos asociados con enfermedades no transmisibles, como cardiovasculares y T2DM.
Perfil de los participantes
En un ensayo controlado aleatorio de diseño paralelo de 8 semanas de duración, que involucró a 82 participantes, los investigadores indicaron a 40 de ellos que sustituyeran los alimentos ricos en proteínas habituales por cantidades fijas de PBMA y a los 42 restantes, sus correspondientes carnes de origen animal, manteniendo la ingesta de otros componentes de la dieta.
Los participantes reclutados eran hombres y mujeres de Singapur, mayores de 30 años y menores de 70, sin diabetes pero con niveles elevados de glucosa en sangre. Además, para mantener la homogeneidad dietética al inicio, los participantes también eran no veganos/no vegetarianos y consumían diariamente entre 2 y 4 porciones de alimentos ricos en proteínas.
Los autores examinaron los niveles de colesterol de lipoproteínas de baja densidad (LDL) y otros factores de riesgo relacionados con enfermedades cardiometabólicas como la glucemia y la presión arterial, entre otros indicadores de salud.
Resultados obtenidos
Los resultados revelaron que no hubo cambios significativos en los perfiles de LDL para ninguna de las dietas, aunque ambas se asociaron con mejoras en algunos marcadores glucémicos.
Pese a que en la investigación no se evidenció una ventaja clara de una dieta sobre la otra en términos de mejora de la salud cardíaca, en un grupo más reducido que monitoreaba de cerca sus niveles de azúcar en sangre, los que consumían carne animal lograron un mejor control glucémico. Además, en ese mismo grupo a diferencia del que consumía PBMA, se observaron mejoras en la presión arterial.
La información sugiere que los beneficios a menudo asociados a las dietas basadas en vegetales podrían no aplicar de manera directa a las correspondientes en análogos cárnicos, por no solo diferir nutricionalmente de los alimentos integrales de origen vegetal sino también por su impacto en la salud cardíaca.
Disparidades nutricionales
Los análisis nutricionales mostraron que las dietas de carne animal aportaban mayor cantidad de proteína, mientras que las PBMA eran más ricas en sodio, potasio y calcio.
El mejor control de la glucemia observado en el grupo de la carne animal podría deberse al menor consumo de carbohidratos con mayor ingesta de proteínas.
Aunque el estudio no abordó en particular la absorción de proteínas, investigaciones complementarias dieron cuenta que las proteínas provenientes de los sustitutos de carne a base de plantas podrían no ser absorbidas tan eficientemente como las de origen animal, condición que influiría de manera diferencial en las respuestas de insulina y en las hormonas intestinales.
La inclusión de análogos cárnicos de origen vegetal en la dieta podría potencialmente modificar el perfil nutricional con la afectación adversa del control glucémico, demostrando que las ventajas asociadas a las dietas en base a vegetales no deben suponerse aplicables para las PBMA, por las diferencias tanto de los atributos nutricionales como por los efectos en la salud cardíaca y metabólica.
Según sus autores, los hallazgos del estudio resaltan la oportunidad que se le presenta a la industria alimentaria para invertir en la creación de nuevos análogos cárnicos que no solo se centren en imitar el sabor y la textura de la carne, sino que también superen el nivel nutricional con mejor absorción por parte del organismo.
Las alternativas cárnicas podrían no ser saludables
Especialistas ajenos al estudio señalaron que uno de los principales inconvenientes metodológicos del ensayo radicó en la elección de los análogos cárnicos como consecuencia de sus elevados contenidos de sodio y aceites de semillas recalentados. Las opiniones resultaron de la compararon comparación entre un tipo de alimento ultra procesado poco saludable con otros de origen animal. Además consideraron que, a pesar de la abundancia de nutrientes esenciales enriquecidos -vitaminas B12 y D, hierro y zinc- los posibles efectos cardiometabólicos negativos del sodio y el potencial estrés oxidativo derivado del consumo de aceites recalentados, podrían superar cualquier beneficio posible de los análogos de carne de origen vegetal utilizados en el estudio.
Aunque el mercado recurre a alternativas cárnicas de origen vegetal más saludables, los comentaristas advierten a los consumidores que las opciones disponibles al ser con frecuencia alimentos muy procesados no deben inspirar confianza como fuente proteica principal de una dieta saludable.
Por el contrario, las dietas ricas en alimentos mínimamente procesados de origen vegetal, como cereales integrales, legumbres, frutos secos, frutas y verduras, así como sus compuestos bioactivos, están asociadas de manera consistente con mejores resultados de salud cardiometabólica y un menor riesgo de mortalidad por cualquier causa.
Los alimentos integrales saludables
Tanto en las dietas basadas en plantas como en las omnívoras, los alimentos integrales deberían constituir la principal fuente de proteínas por promover la salud cardiometabólica gracias a su mayor contenido de fibra, ácidos grasos omega-3 y antioxidantes.
La investigación resalta las diferencias nutricionales entre los análogos cárnicos, los alimentos de origen animal y los integrales de origen vegetal, a pesar de los avances en las técnicas de procesamiento, como asimismo los ingredientes seleccionados con cuidado para elaborar alternativas a la carne de origen vegetal.
Al concluir su trabajo, los autores destacan la importancia de comprender que as dietas basadas en plantas no son todas iguales. Aclaran también que la elección de más opciones basadas en plantas puede ofrecer beneficios para la salud, prioriza la calidad de los alimentos integrales o mínimamente procesados y desaconseja la dependencia de alternativas ultra procesadas.
* The American Journal of Clinical Nutrition
Plant-Based Meat Analogs and Their Effects on Cardiometabolic Health: An 8-Week Randomized Controlled Trial Comparing Plant-Based Meat Analogs With Their Corresponding Animal-Based Foods
Darel Wee KiatToh1, Amanda Simin Fu1, Kervyn Ajay Mehta1, Nicole Yi Lin Lam1, Sumanto Haldar1 2, Christiani Jeyakumar1 3
8 de abril, 2024
https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0002916524003964
Filiación de las autoras/es:
1- Singapore Institute of Food and Biotechnology Innovation (SIFBI), Agency for Science, Technology and Research (A∗STAR), Singapore, Republic of Singapore
2- Faculty of Health and Social Sciences, Bournemouth University, Bournemouth, United Kingdom
3- Department of Biochemistry, Yong Loo Lin School of Medicine, National University of Singapore, Singapore, Republic of Singapore
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