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Introducción
La pandemia de enfermedad por coronavirus 2019 (COVID-19, por sus siglas en inglés) o la fiebre del Ébola u otras enfermedades altamente infecciosas son amenazadas para la salud mundial. En 2019, la Organización Mundial de la Salud (OMS) elaboró una lista de 10 amenazas para la salud mundial capaces de causar enfermedades significativas, muerte, trastornos sociales e impacto en la salud pública. Estas requieren una mayor atención por parte de los gobiernos, los profesionales de la salud, las comunidades y las partes interesadas en todos los países, independientemente de su nivel de capacidades de salud pública del sistema de salud.
Las 10 amenazas seleccionadas comprenden enfermedades infecciosas, así como enfermedades de alta prevalencia y riesgos más amplios para la salud de la población, como las enfermedades no transmisibles o el cambio climático y la contaminación del aire. Estas tienen relevancia e implicancia para la salud oral.
El objetivo del presente reporte fue discutir 3 amenazas globales para la salud con implicancia para la salud oral: patógenos de alta amenaza, resistencia a los antimicrobianos (RAM) y atención primaria de salud débil. Estos son independientes, pero están interrelacionados.
Patógenos de alta consecuencia
Los patógenos de alta amenaza o patógenos de alta consecuencia son infecciones virales, bacterianas, fúngicas, priónicas y relacionadas y enfermedades de origen desconocido altamente contagiosas o letales. Es una función central de salud pública proteger a las poblaciones de estas amenazas.
La pandemia de COVID-19 ha tenido un impacto significativo sobre atención de la salud oral. Durante las primeras partes de la pandemia se interrumpió la atención de la salud bucodental. Entre todos los servicios de salud, la atención de la salud bucal fue la más afectada por confinamiento. Posteriormente, los principios del control universal de infecciones, las medidas contra la transmisión aérea, las adaptaciones de la gestión de los servicios y la rápida disponibilidad de vacunas eficaces permitieron reanudar completamente los servicios de atención de la salud oral.
Justo cuando la presión de COVID-19 comenzó a disminuir, otra infección de alta amenaza, la viruela del mono surgió como un problema de salud pública mundial. A pesar de los claros riesgos de infección en entornos dentales y los síntomas orales en las personas infectadas, el impacto de la viruela del mono en el cuidado de la salud oral no ha alcanzado los niveles de COVID-19. Todas las amenazas de infección mundial incluidas en la lista de la OMS subrayan la necesidad crucial de vigilancia y alerta constantes. Las medidas de control de infecciones existentes y aprobadas deben revisarse y actualizarse regularmente para garantizar la seguridad de los pacientes que buscan atención bucodental. Esto incluye las políticas, directrices y protocolos vigentes; evaluación de pacientes cuando buscan atención de salud oral; adaptaciones y modificaciones de los centros de atención de la salud bucodental; el cumplimiento de las medidas relativas a los equipos de protección individual; y medidas de control de infecciones, incluida la higiene de las manos y la selección de procedimientos para el manejo adecuado de los aerosoles.
Resistencia a los antimicrobianos
El control de infecciones es fundamental para abordar la RAM. Las bacterias resistentes a los antibióticos pueden causar enfermedades mortales. Las infecciones causadas por bacterias resistentes a los antibióticos son más difíciles de tratar y requieren medicamentos costosos y complejos, y a veces ninguno es eficaz. La prevención es fundamental para combatir la RAM. Los antibióticos deben prescribirse de forma correcta y solo cuando sea necesario.
Las áreas clave para abordar la amenaza de la RAM son prevención, vigilancia y seguimiento, respuesta e investigación y desarrollo. Diversas organizaciones profesionales de todo el mundo han emitido pautas para el uso de antibióticos en la práctica dental y abogan por la administración de los profesionales de la salud oral para abordar la RAM. El concepto de Una Salud, destaca las interconexiones entre la salud humana, animal y ambiental, se vuelve cada vez más relevante en el contexto actual.
Atención primaria de salud deficiente
La atención primaria de la salud oral se considera deficiente. La mitad de la población mundial carece de acceso a servicios esenciales de salud y salud oral. La atención de la salud bucodental debe formar parte de la cobertura sanitaria universal.
Conclusiones
Los profesionales de la salud oral pueden suponer que su trabajo clínico diario está muy lejos de las amenazas mundiales para la salud, pero esto no es así. Las pandemias mundiales han impulsado las amenazas a la salud mundial y ejemplificaron que el cuidado de la salud oral no está protegido de estas. La salud oral es parte de la salud general, la atención de la salud oral es una parte esencial de los sistemas de atención de la salud, y los profesionales de la salud oral son parte integral de la fuerza laboral de atención médica. Los sistemas de atención de la salud oral y los profesionales de la salud oral deben participar en de las acciones para combatir las amenazas mundiales para la salud.
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