Resúmenes amplios

EXISTEN FACTORES AMBIENTALES QUE AUMENTAN EL RIESGO DE DEPRESIÓN


Tampico, México:
La depresión es una enfermedad con un nivel elevado de comorbilidad que aumenta el riesgo de suicidio y representa un problema importante de salud pública. En consecuencia, es importante conocer los factores ambientales que incrementan el riesgo de depresión.

Revista Médica del Instituto Mexicano del Seguro Social 52(5):574-579

Autores:
Hernández-Benitez CT, García-Rodriguez A, Durán-González J

Institución/es participante/s en la investigación:
Universidad Autónoma de Tamaulipas

Título original:
Factores Ambientales Relacionados a Trastornos Depresivos

Título en castellano:
Factores Ambientales Relacionados con los Trastornos Depresivos

Extensión del  Resumen-SIIC en castellano:
2.38 páginas impresas en papel A4

Introducción y objetivos

Según la información disponible, los trastornos mentales, especialmente la depresión, se encuentran entre las causas principales de discapacidad. De hecho, la depresión es una enfermedad con un nivel elevado de comorbilidad que incrementa el riesgo de suicidio y representa un problema importante de salud pública. Por este motivo, el diagnóstico y el tratamiento de los pacientes con depresión son fundamentales. De acuerdo con los criterios incluidos en la cuarta edición del Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales, texto revisado (DSM IV-TR, por su sigla en inglés), tanto la depresión mayor como episodio único, la depresión mayor recurrente y la distimia son enfermedades importantes.

Es sabido que los trastornos depresivos tienen una etiología multifactorial. Es decir, entre las causas que originan la enfermedad se incluyen factores genéticos y ambientales. La identificación de los factores genéticos implicados en dichos cuadros clínicos resultará beneficiosa para mejorar el tratamiento de los pacientes con trastornos psiquiátricos, ya que los genes implicados, así como las vías de acción y las proteínas involucradas pueden constituir nuevos blancos terapéuticos.

En cuanto a los aspectos ambientales relacionados con la aparición de trastornos depresivos, se incluyen factores perinatales y psicosociales. En un estudio realizado en la población mexicana se halló una relación entre el maltrato físico a las mujeres y el trastorno depresivo mayor o el trastorno distímico. Concretamente, la mayoría de las mujeres con trastorno depresivo mayor o trastorno distímico presentaron el antecedente de maltrato físico en la infancia. Otros autores informaron un aumento del riesgo de suicidio asociado con el sexo femenino, el desempleo, los ingresos bajos, el nivel educativo bajo y el estado civil separado o soltero. También se informó que el riesgo de depresión en mujeres jóvenes se asocia principalmente con la disfunción familiar. Otros factores asociados con el aumento del riesgo de depresión incluyen la presencia de enfermedades como la diabetes mellitus tipo 2, la hipertensión arterial, los trastornos gastrointestinales y la obesidad. Lo antedicho pone de manifiesto la importancia de contar con programas que permitan intervenir sobre los factores ambientales vinculados con la aparición de depresión.

El presente estudio se llevó a cabo con el objetivo de analizar los factores ambientales relacionados con la presencia de depresión mayor episodio único, depresión mayor recurrente y distimia.

Pacientes y métodos

Participaron 121 pacientes atendidos en el Hospital General de Subzona con Medicina Familiar 33 del IMSS de San Andrés Tuxtla, Delegación Veracruz Norte, de México. Todos habían recibido el diagnóstico de depresión al ser evaluados por un médico especialista en psiquiatría, de acuerdo con los criterios del DSM IV-TR. Las variables clínicas y sociodemográficas fueron evaluadas mediante entrevistas y cuestionarios clínicos.

Resultados

Participaron 88 mujeres y 33 hombres, de los cuales 16 presentaron depresión mayor episodio único, 72 presentaron depresión mayor recurrente y 33 presentaron distimia. La depresión mayor recurrente fue el cuadro asociado con la mayor cantidad de comorbilidades, especialmente en las mujeres. Los cuadros comórbidos más frecuentes en este caso fueron los trastornos gastrointestinales, seguidos por la obesidad, la hipertensión arterial y los trastornos de ansiedad. En total, 31 mujeres y 20 hombres con distimia presentaron alguna comorbilidad. En este grupo los cuadros comórbidos más frecuentes fueron los trastornos gastrointestinales, los trastornos de ansiedad y la hipertensión arterial. En cuanto al grupo de pacientes con depresión mayor episodio único, 15 mujeres y tres hombres presentaron comorbilidades como la obesidad, la hipertensión arterial y los trastornos de ansiedad.

La mayoría de los pacientes tenían entre 41 y 60 años, eran casados, habían alcanzado el nivel educativo medio superior y eran empleados o, en el caso de las mujeres, amas de casa. En general, la evaluación de la violencia psicológica o física arrojó porcentajes superiores entre las mujeres en comparación con los hombres, tanto al considerar la familia de origen como la familia de procreación. Por último, el tabaquismo y el alcoholismo no fueron frecuentes. De hecho, no se observaron en la mayoría de los participantes a pesar del sexo y el diagnóstico considerado.

Discusión

Los trastornos mentales son enfermedades de origen multifactorial. La identificación de los factores ambientales que contribuyen a su aparición es importante con el fin de asegurar un diagnóstico y un tratamiento oportunos. En cuanto a la neurobiología de la depresión, las teorías más aceptadas son la monoaminérgica y la afección del eje hipotálamo-hipófisis-suprarrenal. De acuerdo con los resultados obtenidos y en coincidencia con lo informado por otros autores, los pacientes con cuadros depresivos generalmente tuvieron entre 41 y 60 años. En cuanto a las comorbilidades más frecuentes, los cuadros observados incluyeron los trastornos gastrointestinales, la hipertensión arterial y la obesidad.

En cuanto a los trastornos gastrointestinales, se observaron principalmente en los pacientes con depresión mayor recurrente, de sexo femenino. Es posible que dichos cuadros hayan resultado de la alteración de la interacción entre el cerebro y el intestino y de factores vinculados con la dieta. Según los resultados de un estudio anterior, existe una relación entre los trastornos gastrointestinales y la depresión. También se halló que la presencia simultánea de obesidad, la hipertensión arterial y la diabetes mellitus tipo 2 se asocia con más síntomas de depresión en comparación con la presencia aislada de diabetes mellitus tipo 2.

A diferencia de lo informado en otros estudios, los individuos casados presentaron un nivel de afección superior, en comparación con las personas solteras, viudos o en unión libre. Según otros investigadores, el sexo femenino y la soltería se asocian con un incremento del riesgo de suicidio. El nivel educativo medio superior fue el más frecuente en los pacientes con depresión. Este hallazgo coincide con lo informado en estudios anteriores. En cuanto a la situación laboral y su relación con el riesgo de depresión, los resultados disponibles son heterogéneos. Mientras que algunos autores informaron que el desempleo aumenta el riesgo de depresión, otros señalaron que la autonomía económica de las mujeres puede afectar la salud mental al aumentar el riesgo de violencia familiar. El funcionamiento familiar constituye un factor determinante para conservar la salud mental, en tanto que la desintegración de la familia incrementa el riesgo de intento de suicidio en pacientes con trastornos depresivos.

La administración de un tratamiento adecuado depende de la realización de un diagnóstico correcto. Esto incluye la evaluación de los factores ambientales que desencadenan la depresión. Una vez administrado el tratamiento, es importante evaluar la respuesta y hacer los ajustes necesarios para asegurar la evolución satisfactoria del paciente. Además, el seguimiento disminuye el riesgo de abandono del tratamiento y de recaídas. En el presente estudio, el abandono del tratamiento fue más frecuente en las mujeres con distimia.

Conclusión

La presencia de un trastorno depresivo se asoció con el sexo femenino, la edad mayor de 40 años, la disfunción familiar, el estar casado y el nivel educativo medio o bajo. Las comorbilidades más frecuentes en caso de depresión fueron los trastornos gastrointestinales, la obesidad y la hipertensión arterial. La identificación oportuna de los factores ambientales que incrementan el riesgo de depresión es importante para disminuir la probabilidad de aparición del trastorno. Asimismo, resulta fundamental que la intervención profesional sea acertada, incluida la derivación al especialista en salud mental.

 



ua40317

Imprimir esta página
Inicio/Home

Copyright siicsalud © 1997-2024 ISSN siicsalud: 1667-9008