UTILIDAD DE LOS ACIDOS GRASOS POLIINSATURADOS EN PACIENTES CON DISLEXIA Y SÍNTOMAS DE TRASTORNO POR DÉFICIT DE ATENCIÓN CON HIPERACTIVIDAD

Londres, Reino Unido: Dado que la dislexia y el trastorno por déficit de atención con hiperactividad son enfermedades heterogéneas, se sugiere la existencia de un subgrupo de pacientes con déficit de ácidos grasos y síntomas característicos de ambos trastornos.

Progress in Neuro-Psychopharmacology & Biological Psychiatry 26(2):233-239

Autores:
Richardson AJ, Puri BK

Institución/es participante/s en la investigación:
Imperial College School of Medicine

Título original:
A Randomized Double-Blind, Placebo-Controlled Study of the Effects of Supplementation with Highly Unsaturated Fatty Acids on ADHD-Related Symptoms in Children with Specific Learning Difficulties

Título en castellano:
Estudio Aleatorizado, a Doble Ciego y Controlado con Placebo sobre los Efectos de la Administración de Acidos Grasos Poliinsaturados en Niños con Trastornos Específicos del Aprendizaje y Síntomas de Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactivida

Extensión del  Resumen-SIIC en castellano:
2.29 páginas impresas en papel A4

ReSIIC editado en:  Salud Mental  Nutrición  Pediatría

Introducción y objetivos El trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH) se presenta con frecuencia en comorbilidad con otras enfermedades entre las cuales se incluyen las alteraciones específicas del aprendizaje. Es sabido que los ácidos grasos (AG) insaturados cumplen un papel importante respecto de la salud, especialmente en lo que concierne a la respuesta inmunológica. Las dietas occidentales modernas no incluyen cantidad suficiente de AG insaturados n-3 y n-6, lo que podría constituir un factor de riesgo para la aparición de diferentes enfermedades, como el TDAH. Los ácidos poliinsaturados araquidónico y docosahexaenoico (DHA) son importantes nutrientes respecto de la estructura de la membrana neuronal y la transducción de señales. Además, los eicosanoides derivados de los ácidos dihomogammalinolénico y eicosapentaenoico (EPA) son importantes para la maduración y el funcionamiento cerebral. Se sugirió que el déficit relativo de ciertos AG poliinsaturados puede contribuir con la aparición de trastornos del aprendizaje y la conducta, característicos del TDAH. Además, se halló una asociación entre la disminución de los niveles plasmáticos de AG esenciales y la presencia de síntomas conductuales y de aprendizaje. Los datos disponibles permiten proponer la utilidad de la administración de suplementos de AG n-3 y n-6 en caso de síntomas de TDAH, dado que este trastorno se asocia frecuentemente con la dislexia, en especial en los pacientes con subtipo inatentivo. Las coincidencias clínicas entre el TDAH y la dislexia indican que es posible que ambas enfermedades se asocien con disfunción de los mecanismos vinculados con la atención y relacionados anatómicamente con el lóbulo parietal. Se estima que el 20% a 40% de los niños con TDAH presentan dificultades para leer y que ambos trastornos compartirían factores de riesgo genéticos. Asimismo, los trastornos del metabolismo de los AG se relacionan con la presencia de dislexia, por lo que el tratamiento con AG también sería de utilidad en estos casos. Dado que la dislexia y el TDAH son enfermedades heterogéneas, se sugiere la existencia de un subgrupo de pacientes con déficit de AG y síntomas característicos de ambos trastornos. El presente estudio se llevó a cabo con el objetivo de evaluar los efectos de la administración de AG poliinsaturados sobre los trastornos conductuales y de aprendizaje a niños con síntomas relacionados con el TDAH. Pacientes y métodos Participaron niños de 8 a 12 años con dislexia que no reunían los criterios para el diagnóstico de TDAH u otro trastorno psiquiátrico. Para seleccionar a los participantes se emplearon determinadas subescalas de la British Ability Scale; también se aplicaron subescalas de evaluación diagnóstica de TDAH acordes con los criterios incluidos en el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-IV), que se obtuvieron a partir de la Conners’ Parent Rating Scale (CPRS-L). Los participantes fueron divididos en forma aleatoria en 2 grupos para recibir tratamiento activo o placebo durante 12 semanas. El primero consistió en la administración de AG poliinsaturados n-3 y n-6. Específicamente, se administró una combinación de EPA, DHA, ácido gamma-linolénico, cis-linoleico y araquidónico, vitamina E y aceite de tomillo, en tanto que los sujetos incluidos en el grupo de referencia recibieron aceite de oliva. Tanto al inicio del estudio como a las 12 semanas de tratamiento, los participantes fueron evaluados para detectar la presencia de trastornos del aprendizaje y la conducta, característicos de TDAH. Resultados Participaron 41 niños con un cociente intelectual acorde a la edad pero con dificultades para leer. En total, 22 niños recibieron tratamiento con AG y 19 fueron tratados con placebo. No se observaron diferencias entre ambos grupos respecto de la edad, el sexo, el origen étnico y los parámetros psicométricos evaluados al comienzo del estudio. Inicialmente, los puntajes de las subescalas de la CPRS-L no difirieron significativamente entre los grupos. Luego de 3 meses de estudio, los pacientes que recibieron el tratamiento activo presentaron un puntaje significativamente inferior en la Conners’ Global Total Scale (CGTS) y en la subescala de inatención en comparación con aquellos tratados con placebo. También se verificó una disminución del puntaje de las subescalas de trastornos psicosomáticos, cognitivos y de ansiedad y en la escala Conners’ Restless-Impulsive. Los pacientes tratados con placebo no presentaron una mejoría del puntaje de ninguna de las escalas luego de 12 semanas de estudio; más aún, el puntaje de la CGTS indicó deterioro significativo. En cambio, los pacientes que recibieron tratamiento activo presentaron mejorías sustanciales de los síntomas psicosomáticos, de ansiedad y cognitivos. También se verificó una mejoría significativa en las subescalas globales de falta de atención, hiperactividad e impulsividad, labilidad emocional e inquietud, entre otras. En cuanto a las subescalas de síntomas cognitivos y de ansiedad, la mejoría fue significativamente superior para los pacientes tratados con AG en comparación con el grupo de referencia. Lo mismo se observó para la CGTS y la escala de labilidad emocional. Los resultados indicaron un perfil favorable de cambios relacionados con el tratamiento con AG en comparación con lo verificado tras la administración de placebo. Discusión De acuerdo con los resultados del presente estudio, la administración de AG poliinsaturados resultó significativamente superior frente al placebo para disminuir los síntomas relacionados con TDAH en niños con dislexia. No se detectaron efectos adversos relacionados con el tratamiento. Si bien ninguno de los participantes había recibido diagnóstico de TDAH, los resultados permiten afirmar que algunos niños presentaban el trastorno. La dislexia y el TDAH son enfermedades heterogéneas que comparten características clínicas. Según los autores, son necesarios estudios adicionales para evaluar la presencia de trastornos del metabolismo de los AG en los pacientes con estos trastornos. Los resultados del presente y otros estudios permiten sugerir que el empleo de AG n-3 es más útil en comparación con el AG n-6 para disminuir los síntomas de TDAH. Una cuestión importante a la hora de efectuar estudios como el presente es la elección del placebo. Es conveniente emplear aceites inertes, ya que el uso de aceite de oliva aporta ácido oleico, a partir del cual se sintetiza oleamida; a su vez, la oleamida es un agente psicoactivo involucrado en la inducción del sueño y la modulación de la señalización serotoninérgica. Entre las limitaciones del presente estudio los autores mencionan que no fue posible obtener muestras de sangre para medir objetivamente el nivel de AG; en consecuencia, no se evaluaron los mecanismos bioquímicos involucrados en las mejorías asociadas con la administración de AG poliinsaturados. Además, la muestra de participantes no fue grande. Son necesarios estudios adicionales para confirmar los resultados obtenidos y evaluar el papel específico de los AG n-3 como el EPA. Por último, señalan los investigadores, sería oportuno que en los estudios futuros se empleen placebos inertes en lugar de aceite de oliva. Conclusión La administración de AG poliinsaturados puede resultar en una disminución significativa de los síntomas relacionados con el TDAH en niños con dislexia.