ReSIIC editado en: Farmacología Geriatría Epidemiología Medicina Legal Salud Pública |
Introducción
El envejecimiento de la población es un resultado inevitable de la prolongación de la esperanza de vida y la reducción de la fecundidad. El envejecimiento y el crecimiento negativo de la población también son procesos que se refuerzan mutuamente. El envejecimiento de la población no es sólo un foco de atención social, sino también un importante problema de salud que enfrenta esta era. A medida que el cuerpo envejece gradualmente, la debilidad es inevitable, y las personas mayores se vuelven propensas a la multimorbilidad, especialmente las enfermedades crónicas. Actualmente, el tratamiento de las enfermedades crónicas en personas mayores tiende a centrarse en una sola enfermedad. Sin embargo, con el aumento de las enfermedades crónicas combinadas, los pacientes mayores a menudo tienen que usar varios fármacos al mismo tiempo. El uso de medicamentos potencialmente inapropiados (MPI) está muy extendido, pero sigue recibiendo poca atención en los servicios ambulatorios, donde la seguridad del uso de fármacos es de gran importancia.
El objetivo de esta revisión sistemática y metanálisis fue estimar la prevalencia mundial del uso de MPI entre los pacientes adultos mayores en los servicios ambulatorios.
Métodos
Se realizaron búsquedas en las fuentes de datos Pubmed, Embase y Web of Science para identificar estudios relevantes publicados desde el 1 de enero de 1990 hasta el 21 de noviembre de 2022. Se incluyeron estudios observacionales que informaron la prevalencia del uso de MPI entre los pacientes adultos mayores en servicios ambulatorios. Dos revisores seleccionaron de forma independiente los artículos elegibles, extrajeron los datos y evaluaron el riesgo de sesgo. Se realizó un metanálisis de efectos aleatorios para agrupar las estimaciones de prevalencia. Además, se estimaron los patrones mundiales en la prevalencia del uso de MPI entre los pacientes adultos mayores en servicios ambulatorios, y se investigaron las tendencias temporales y las diferencias regionales en el uso de MPI.
Resultados
Se analizaron en total 94 artículos con 132 estimaciones de prevalencia, incluidos casi 371.2 millones de participantes adultos mayores de 17 países. La media de edad de los participantes en la mayoría de los estudios (65 trabajos) era menor de 80 años y mayor de 65 años, y 31 investigaciones tenían una media de fármacos por encima de 5. Treinta y cuatro estudios tuvieron una proporción masculina de más del 50%, y 34 incluyeron pacientes con ciertas enfermedades. Veintiséis ensayos tuvieron un tamaño de muestra de más de 10 000 personas. La prevalencia del uso de MPI entre los pacientes ambulatorios de edad avanzada varió del 1.3% al 95.2% en los estudios, y los MPI más utilizados fueron las benzodiazepinas.
La prevalencia agrupada del uso de MPI fue de 36.7% (intervalos de confianza del 95% [IC 95%]: 33.4% a 40.0%). África tuvo la mayor prevalencia de uso de MPI (47.0%; IC 95%: 34.7% a 59.4%), seguida de América del Sur (46.9%; IC 95%: 35.1% a 58.9%), Asia (37.2%; IC 95%: 32.4% a 42.2%), Europa (35.0%; IC 95%: 28.5% a 41.8%), América del Norte (29.0%; IC 95%: 22.1% a 36.3%) y Oceanía (23.6%; IC 95%: 18.8% a 28.8%). Además, la prevalencia de uso de MPI fue más alta en las zonas de ingresos bajos que en comparación con los países de ingresos altos. El uso de MPI entre pacientes adultos mayores se ha vuelto cada vez más frecuente en las últimas dos décadas. La prevalencia agrupada del uso de MPI fue mayor entre los participantes con polifarmacia (45.9%; IC 95%: 40.5% a 51.5%) y de 80 años o más (41.9%; IC 95%: 33.3% a 50.9%).
Conclusiones
Este estudio de los patrones de uso de MPI por diferentes grupos, como regiones geográficas y países del Banco Mundial, revela diferencias notables en el entorno geográfico y los ingresos económicos en la carga de MPI en los servicios ambulatorios. Además, la tendencia de prevalencia elevada en las últimas dos décadas indica que la carga mundial del uso de MPI sigue siendo digna de atención y destaca la necesidad global de implementar reformas de la atención médica y mejoras en la seguridad de los medicamentos en entornos ambulatorios. De los resultados obtenidos en el estudio, las benzodiazepinas fueron los MPI más frecuentes. La tasa elevada de prescripción de benzodiazepinas podría atribuirse a la prevalencia elevada de insomnio en la población geriátrica. Debido al envejecimiento gradual de las funciones de los órganos y los tejidos, la población geriátrica es más sensible a las drogas, y aunque se cree que las benzodiazepinas están asociadas con un mayor riesgo de deterioro cognitivo, caídas y fracturas, todavía se indican de forma frecuente en la población geriátrica. Por lo tanto, casi todos los criterios enumeran este tipo de medicamento como potencialmente inapropiado.
Copyright siicsalud © 1997-2024 ISSN siicsalud: 1667-9008