Introducción

Los trastornos musculoesqueléticos causan dolor a largo plazo, discapacidad física, angustia psicológica y reducción de la calidad de vida. En 2017, el número mundial de casos prevalentes de trastornos musculoesqueléticos alcanzó los 1.3 millones, lo que provocó 121 300 muertes y 138.7 millones de años de vida ajustados por discapacidad. Además de los resultados adversos para la salud, los trastornos musculoesqueléticos también conducen a la discapacidad laboral, la disminución de la productividad y el aumento del gasto en atención médica. Se ha demostrado que el índice de masa corporal (IMC) elevado es un factor de riesgo para el dolor lumbar, la artrosis y la gota entre los trastornos musculoesqueléticos. El grado en que los resultados económicos y de salud de los trastornos musculoesqueléticos son atribuibles al IMC elevado no se ha cuantificado a escala mundial.

El objetivo de la presente investigación fue estimar los resultados económicos y de salud mundiales asociados con los trastornos musculoesqueléticos (dolor lumbar, gota y artrosis) atribuibles al IMC elevado en 2019.

Métodos

El presente estudio transversal utilizó datos de 192 países y territorios de las bases de datos Global Burden of Diseases, Injuries, and Risk Factors Study; World Health Organization Global Health Expenditure; World Bank e International Labour Organization. Los análisis de los datos se realizaron del 24 de febrero al 16 de junio de 2022. Los criterios de valoración principales fueron la prevalencia, los años vividos con discapacidad (AVD), los costos de atención médica y las pérdidas de productividad debido a la morbilidad por dolor lumbar, gota y artrosis atribuibles al IMC elevado por región y país. La prevalencia y los AVD se calcularon con el enfoque de fracción atribuible poblacional (nivel de morbilidad que podría reducirse si se elimina un factor de riesgo). Además, se cuantificó la carga económica, incluidos los costos de atención de salud y las pérdidas de productividad debidas a la morbilidad. Los costos de atención médica asumidos por los sectores público, privado y de bolsillo se estimaron sobre la base de sus correspondientes cuotas de pago. Las pérdidas de productividad se estimaron en función de la producción por trabajador. Se realizó un análisis de sensibilidad para llegar a las estimaciones base, mínima y máxima (es decir, intervalo de incertidumbre [II]) utilizando los límites medio, inferior y superior de todas las variables de entrada.

Resultados

Se estimó que el IMC elevado fue responsable de 36.3 millones (II: 18.4 a 61.0 millones), 16.9 millones (II: 7.5 a 32.5 millones) y 73 millones (II: 32.4 a 131.1 millones) casos prevalentes de dolor lumbar, gota y atrosis, respectivamente, que representaron 7.3 millones (II: 3 a 15 millones) de AVD en 192 países y territorios en 2019. A nivel mundial, los AVD de trastornos musculoesqueléticos atribuibles al IMC elevado representaron el 1.0% de los AVD por todas las causas en la población en edad laboral de 15 a 84 años. A nivel regional, en términos de dolor lumbar y gota, la carga más pesada se encontró en las Américas. En contraste, la región del Pacífico Occidental fue la más afectada por la artrosis.

Los costos totales mundiales de los trastornos musculoesqueléticos atribuibles al IMC elevado alcanzaron $ 180.7 mil millones (II: $ 83.8 a $ 333.1 mil millones), incluidos $ 60.5 mil millones (II: $ 30.7 a $ 100.5 mil millones) en costos de atención médica y $ 120.2 mil millones (II: $ 53.1 a $ 232.7 mil millones) en pérdidas de productividad. En términos de los costos mundiales de atención médica, el 58.9% ($ 35.6 mil millones; II: $ 17.8 a $ 59.6 mil millones) fue asumido por el sector público, el 24% ($ 14.5 mil millones; II: $ 7.8 a $ 23.2 mil millones) por el sector privado y el 17.1% ($ 10.3 mil millones; II: $ 5.1 a $ 17.6 mil millones) por el sector de bolsillo. En promedio, los costos totales representaron el 0.2% del producto interno bruto mundial. Se observaron grandes desigualdades en la enfermedad y la carga económica entre regiones y países. Casi el 80% de la atención sanitaria mundial (82.4%) y los costos relacionados con la morbilidad (82.9%) fueron pagados por países de ingresos altos, mientras que más del 60% (61.4%) de los AVD mundiales ocurrieron en países de ingresos medios.

Conclusiones

En el presente estudio transversal de 192 países y territorios, una cantidad sustancial del impacto sanitario y económico de los trastornos musculoesqueléticos fue atribuible al IMC elevado. Se necesita desarrollar políticas eficaces y la participación activa de los profesionales de la salud para prevenir el aumento excesivo de peso. Además, se necesitan más estimaciones disponibles para facilitar un análisis mundial. El aumento de la prevalencia del sobrepeso y la obesidad no debe tratarse simplemente como resultado del aumento de los ingresos, ya que este aumento también se observa en países de ingresos medianos y bajos. También deben tenerse en cuenta los efectos mundiales de la rápida urbanización; aunque la urbanización ha desempeñado un papel clave en el aumento del IMC al cambiar los hábitos alimenticios y el ejercicio físico, el aumento del IMC en las zonas rurales es el principal contribuyente a la epidemia de obesidad a nivel mundial.