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Introducción
La variante ómicron del coronavirus 2 del síndrome respiratorio agudo grave (SARS-CoV-2, por sus siglas en inglés) es más transmisible que las variantes anteriores y se ha extendido de forma rápida por todo el mundo. La variante ómicron contiene hasta 36 mutaciones en la proteína espiga y se ha especulado que difiere de las variantes anteriores no solo en la infectividad, sino también en las manifestaciones clínicas. Estudios indican que la variante ómicron causa una enfermedad más leve en los niños que las variantes anteriores, con tasas más bajas de ingresos a las unidades de cuidados intensivos y de ventilación mecánica. Sin embargo, un trabajo estadounidense ha observado que las tasas de hospitalización por población entre pacientes de 0 a 4 años con enfermedad por coronavirus 2019 (COVID-19, por sus siglas en inglés) habían sido aproximadamente cinco veces más altas después de la aparición de la variante ómicron que cuando predominaba la variante delta. Esto puede indicar que la variante ómicron tiene una carga de enfermedad sustancial en los niños de 0 a 4 años, que en la actualidad no son elegibles para la vacunación contra la COVID-19. Los datos detallados sobre las características clínicas en niños infectados con la variante ómicron de SARS-COV-2 son limitados. Además, no está claro si los síntomas y la gravedad de la enfermedad causada por ómicron difieren según la edad y si las características clínicas de ómicron difieren de las variantes anteriores.
El objetivo del presente estudio fue investigar las características clínicas de los pacientes pediátricos con COVID-19 durante y antes de la aparición de la variante ómicron en diferentes grupos de edad.
Métodos
Se realizó un estudio observacional retrospectivo de pacientes pediátricos (< 18 años) con COVID-19 que visitaron el Centro Nacional para la Salud y el Desarrollo Infantil en Tokio, Japón, entre el 1 de julio de 2021 y el 28 de febrero de 2022. Se incluyeron pacientes sintomáticos sin enfermedades de base. El diagnóstico de COVID-19 se confirmó mediante reacción en cadena de la polimerasa o prueba de antígeno para SARS-CoV-2. Los participantes se dividieron en dos grupos según el momento de presentación: la “era ómicron” (de enero de 2022 a febrero de 2022) y la “era pre-ómicron”, en la que predominó la variante delta (de julio de 2021 a noviembre de 2021). Los pacientes se subclasificaron en un grupo elegible para la vacuna de mayor edad (de 12 a 17 años), un grupo elegible para la vacuna de menor edad (de 5 a 11 años) y un grupo no elegible para la vacuna (de 0 a 4 años). En Japón, la vacunación contra el SARS-CoV-2 comenzó en junio de 2021 para niños mayores de 12 años y en marzo de 2022 para niños de 5 a 11 años. Las manifestaciones clínicas también se clasificaron según la presencia de síntomas respiratorios (tos, rinorrea, dolor de garganta y ronquera) y gastrointestinales (diarrea, vómitos y dolor abdominal). La gravedad de las manifestaciones se clasificó de acuerdo con las directrices de la Organización Mundial de la Salud.
Resultados
Se compararon las características de 113 pacientes que se infectaron durante la era ómicron y 106 se infectaron antes de la era ómicron. La era ómicron tenía una mayor proporción de pacientes de 5 a 11 años y una menor proporción de 12 a 17 años. La mayoría de los pacientes en ambos períodos tenían una enfermedad no grave y ningún paciente requirió ventilación mecánica o murió. Tres pacientes se clasificaron como enfermedad grave (dos en la era pre-ómicron y uno en la era ómicron). Tres pacientes requirieron oxigenoterapia en la era ómicron (media de duración de 1.7 días) y seis pacientes en la era pre-ómicron (media de duración de 2.8 días). Solo un paciente de 12 años en la era pre-ómicron y ningún paciente en la era ómicron había recibido la vacuna contra la COVID-19.
Entre los pacientes de 0 a 4 años, el dolor de garganta y la ronquera fueron más prevalentes durante la era ómicron que en la era pre-ómicron (11.1% frente a 0% y 11.1% frente a 1.5%, respectivamente). El síndrome de crup fue diagnosticado en todos los pacientes con ronquera. Entre los pacientes de 5 a 11 años, los vómitos fueron más frecuentes durante la era ómicron (47.2%) que durante la era pre-ómicron (21.7%). Los síntomas gastrointestinales aparecieron como una presentación bastante prevalente, independientemente de la presencia de síntomas respiratorios durante la era ómicron. La tos y la rinorrea fueron menos frecuentes durante la era ómicron en pacientes de 0 a 4 años y de 5 a 11 años, respectivamente, que durante la era pre-ómicron. No se encontraron diferencias en la frecuencia de ningún síntoma en pacientes de 12 a 17 años entre los dos períodos.
Conclusiones
En niños con COVID-19, las manifestaciones clínicas difirieron entre las eras ómicron y pre-ómicron. En la era ómicron, el síndrome de crup era más frecuente en niños no elegibles para la vacuna. Se necesitan estudios adicionales para distinguir las características clínicas de la variante ómicron de las de otras variantes, especialmente en adolescentes. En la actualidad, los pacientes de 0 a 4 años no son elegibles para la vacunación contra la COVID-19, y las tasas de hospitalización asociadas con la COVID-19 en este grupo de edad aumentaron drásticamente cuando la variante ómicron comenzó a predominar en los Estados Unidos. La vacunación de los familiares y cuidadores elegibles es esencial para prevenir la transmisión del virus a este grupo de edad.
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