Introducción

Los primeros estudios y la experiencia global acerca de la enfermedad por coronavirus 2019 (COVID-19 por su sigla en inglés) sugieren que los niños son menos vulnerables a la infección que los adultos y que presentan riesgo reducido de enfermedad sintomática o grave. Sin embargo, los niños no son inmunes al coronavirus 2 del síndrome respiratorio agudo grave (Severe Acute Respiratory Syndrome [SARS]-CoV-2). El objetivo del presente estudio fue evaluar los patrones temporales en las internaciones pediátricas por COVID-19 en 22 estados de Norteamérica, en relación con la gravedad de la enfermedad y la diseminación del virus.

Pacientes y métodos

Se utilizaron datos aportados por el University of Minnesota COVID-19 Hospitalization Tracking Project; se identificaron 22 estados para los cuales se dispuso de información acerca de los índices acumulados de internaciones por COVID-19 en la totalidad de la población, como también en pacientes de 19 años o menos (para algunos estados también se dispuso de información para pacientes de menos de 17 o de menos de 14 años) entre 15 de mayo y 15 de noviembre de 2020.

Los datos a nivel estatal se correlacionaron con las estimaciones poblacionales del último censo de los Estados Unidos. Se calcularon los índices acumulados de internaciones por COVID-19 por cada 100 000 niños, a intervalos regulares; también se calcularon los cambios en las internaciones per cápita.

Resultados

Se registraron en total 301 102 internaciones por COVID-19 y 5364 internaciones pediátricas por COVID-19 en 22 estados, durante el período de estudio.

Al inicio del ensayo, el índice acumulado promedio de internaciones por cada 100 000 niños fue de 2.0, y aumentó a 17.2 por cada 100 000 niños al final del estudio. Se registraron variaciones importantes entre los estados en ambos momentos de valoración, como también en la magnitud de cambio de los índices. Por ejemplo, en Hawái y en Rhode Island se comprobaron los índices más bajos de internaciones pediátricas, de 0.0 por cada 100 000 niños, mientras que las ciudades de New Jersey y Colorado tuvieron los índices más elevados, de 5.0 y 4.4 por cada 100 000 niños, respectivamente.

Al final del estudio, Hawái y New Hampshire tuvieron los índices más bajos, de 4.3 y 3.4 por cada 100 000 niños, respectivamente, mientras que South Dakota y Arizona tuvieron los valores más elevados, de 33.7 y 32.8 por cada 100 000 niños.

También se registraron variaciones significativas entre los estados, en la magnitud de cambio desde el inicio hasta el final del período de estudio, con índices en aumento en Hawái y New Hampshire de 4.3 y 1.0 por cada 100 000 niños, en comparación con incrementos mucho más importantes en Arizona y South Dakota, de 32.0 y 31.2 por cada 100 000 niños, respectivamente.

En algunos estados se comprobaron incrementos significativos en tan sólo 3 meses; en Utah se registró un incremento del 5067%, desde 0.3 internaciones a 15.5 internaciones por cada 100 000 niños, al final del estudio, en comparación con un aumento del 42%, de 2.4 a 3.4 por cada 100 000 niños en New Hampshire. 

Conclusión

Se comprobaron índices muy variables de internaciones pediátricas por COVID-19 entre los estados, como también en el curso de la pandemia. En general, los cambios por estados fueron similares a los referidos para la población de adultos, con algunas excepciones. Por ejemplo, en Nueva Jersey se comprobaron los índices más altos de internaciones en adultos alrededor del 15 de noviembre, en tanto que las internaciones pediátricas ocuparon el séptimo lugar. Asimismo, en Indiana se comprobaron diferencias significativas, con el sexto lugar más alto para las internaciones en adultos y el lugar número 13, para las internaciones pediátricas.

Si bien COVID-19 sigue siendo tema de especial preocupación en los adultos y sobre todos en los sujetos de edad avanzada, las poblaciones pediátricas podrían requerir recursos para la salud que no están disponibles en la actualidad. La inclusión de sólo el 56% de los estados del país es una limitación del presente estudio que debe ser tenida en cuenta. Incluso así, se considera que los estados analizados son representativos, ya que incluyen a más de 29 millones de niños de los Estados Unidos.