Informe
Red Científica Iberoamericana
Yasmín Suárez Palla
Columnista Experto de SIIC
Institución: Hospital Zonal General de Agudos "Mi Pueblo"
Florencio Varela Argentina

La ideación autolítica en los jóvenes del AMBA en Argentina
El suicidio juvenil es un problema creciente en Argentina y el mundo. Factores como la salud mental, la violencia, las condiciones socioeconómicas y la falta de acceso a servicios de salud contribuyen a este problema. Un estudio en Florencio Varela revela una alta tasa de intentos de suicidio en jóvenes, especialmente en mujeres. Se necesitan más investigaciones y acciones preventivas para abordar esta crisis.

Resumen
La presente investigación tiene como objeto realizar un estudio epidemiológico de la población joven que consulta en un hospital del conurbano bonaerense por presentar ideación autolítica o intento autolítico. Este estudio se realizó en el marco de la residencia de Psicología Clínica que se enmarca en un Servicio de Salud Mental del Hospital Zonal General de Agudos "Mi Pueblo" de Florencio Varela, Argentina, y como consecuencia de un proyecto anual, siendo esta la primera investigación en salud pública que se realizó en dicho contexto. Se propuso caracterizar a este sector de la población joven que consulta en un servicio de salud por presentar intentos de autoeliminación. Se propone que estos resultados permitan lograr una intervención oportuna. La metodología implementada fue la búsqueda bibliográfica y la recolección de datos a través de un formulario digital (Google) entre noviembre de 2024 y enero de 2025.

Publicación en siicsalud
Artículos originales > Expertos de Iberoamérica >
http://www.siicsalud.com/acise_viaje/ensiicas-profundo.php?id=174955

Comentario
Autor del informe
Mariana Nieves Piazza 

, Hospital General de Agudos Bernardino Rivadavia, Ciudad deBuenos Aires, Argentina


El suicidio es una de las principales causas de muerte entre adolescentes y jóvenes a nivel mundial, y constituye una creciente preocupación en la Argentina, particularmente en contextos vulnerables (como el conurbano bonaerense). El presente comentario científico analiza, desde la perspectiva de la psiquiatría clínica y comunitaria, el estudio La ideación autolítica en los jóvenes del AMBA en Argentina, realizado en el Hospital Zonal General de Agudos (HZGA) Mi Pueblo de Florencio Varela, provincia de Buenos Aires. A partir de los datos epidemiológicos locales, las autoras reflexionan sobre la multicausalidad del fenómeno, los factores de riesgo más relevantes y la necesidad de contar con dispositivos de prevención eficaces, sostenidos y contextualizados. Se enfatiza el rol de la psiquiatría en la identificación precoz, la
intervención interdisciplinaria y la promoción de estrategias comunitarias para reducir los intentos de suicidio en población joven.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS),1 el suicidio juvenil es la cuarta causa de muerte entre personas de 15 a 29 años, con particular impacto en países de ingresos bajos y medios. En la Argentina, diversos estudios han señalado un aumento sostenido de suicidios consumados e intentos autolíticos en adolescentes y jóvenes, aunque las estadísticas oficiales son insuficientes o están desactualizadas.2
El estudio realizado por Suárez Palla y colaboradores, en el HZGA Mi Pueblo, aporta datos relevantes sobre internaciones por intento de suicidio en jóvenes del municipio de Florencio Varela, brindando evidencia empírica valiosa para comprender el fenómeno y diseñar estrategias de abordaje. Este comentario científico se propone ampliar el análisis desde una perspectiva psiquiátrica, con foco en la prevención, la multicausalidad y el rol de los servicios de salud mental en los contextos vulnerables.
Dimensión epidemiológica y expresión local del fenómeno
Según lo informado, entre junio de 2023 y febrero de 2024 se registraron 277 internaciones por salud mental, de las cuales el 41% correspondieron a intentos autolíticos (el principal motivo de ingreso). Del total, 57 casos se situaron en el grupo etario de 15 a 24 años, siguiendo el criterio de juventud de la OMS.
Entre los hallazgos relevantes se destacan: Mayor prevalencia de intentos en mujeres (58.9%), con predominio de la sobreingesta medicamentosa como método.
La mitad de los casos tenía antecedentes de tratamiento en salud mental.
El 21.9% de los casos estaban asociados con situaciones de violencia de género.
Alta proporción de estudiantes y jóvenes desocupados en la muestra.
Estos datos coinciden con estudios que indican una feminización de la ideación e intento autolítico, y subrayan el peso de factores estructurales como el desempleo, la exclusión y la violencia interpersonal.3-4
Aportes desde la psiquiatría clínica y comunitaria
Desde el enfoque psiquiátrico contemporáneo, la conducta suicida se comprende como un fenómeno complejo, multicausal e históricamente determinado. En un estudio de 2016, los autores proponen un modelo integrador que incluye la predisposición biológica, los trastornos mentales, los eventos vitales estresantes, el acceso a medios letales y las condiciones contextuales.5
Los datos del estudio indican que más del 50% de los jóvenes ya había tenido contacto previo con servicios de salud mental. Esta información interpela la eficacia de las estrategias de prevención secundaria y la continuidad del cuidado. El hecho de que dichas intervenciones no hayan evitado el intento autolítico sugiere la necesidad de reforzar el vínculo terapéutico, la evaluación de riesgo y el seguimiento posterior al alta.6
El abordaje psiquiátrico debe contemplar no solo el tratamiento del padecimiento mental de base, sino también el contexto social y familiar del paciente, sus recursos de afrontamiento, su red de apoyo y los determinantes estructurales del sufrimiento psíquico. En este sentido, es crucial articular los dispositivos clínicos con estrategias comunitarias e intersectoriales.
Prevención del suicidio: niveles y estrategias clave Prevención primaria
Campañas de promoción de la salud mental y desestigmatización.
Espacios de escucha y acompañamiento en instituciones educativas y comunitarias.
Capacitación de los agentes de salud, los docentes y los líderes comunitarios en señales de alarma y rutas de derivación.
Prevención secundaria
Evaluación sistemática del riesgo suicida en consultas médicas y psicológicas, con la utilización de escalas (como la Columbia-Suicide Severity Rating Scale [C-SSRS]).
Intervenciones breves centradas en el riesgo, con énfasis en la motivación para vivir.
Planes de seguridad personalizados.
Prevención terciaria
Seguimiento intensivo posterior alalta, especialmente en el primer mes.
Integración con servicios ambulatorios y comunitarios.
Trabajo con la familia y la red de apoyo del paciente.
El modelo propuesto por la OMS en 2014 destaca que las intervenciones comunitarias sostenidas tienen mayor eficacia que las puramente clínicas. En contextos como el AMBA (Área Metropolitana de Buenos Aires), donde el acceso a los servicios es desigual, las estrategias deben adaptarse a la realidad territorial (contemplando la escasez de recursos, la sobrecarga de los servicios y la fragmentación institucional).
Reflexiones críticas sobre el sistema de salud y la producción de datos
Uno de los aportes más importantes del estudio es visibilizar el déficit de información local y nacional sobre intentos autolíticos. Mientras que las muertes por suicidio suelen estar registradas, los intentos —que representan una proporción mucho mayor— no son sistemáticamente documentados. El formulario digital implementado por el equipo de investigación constituye una herramienta útil y replicable, aunque se vio limitado por la falta de historias clínicas completas y la ausencia de sistemas informatizados en el hospital.
Esto revela la urgencia de fortalecer los sistemas de registro, implementar historia clínica electrónica en salud mental y desarrollar indicadores sensibles para monitorear la evolución del riesgo suicida.
Conclusiones
El trabajo desarrollado en el HZGA Mi Pueblo pone en evidencia que los intentos autolíticos en jóvenes constituyen una problemática central para los servicios de salud mental del AMBA. Desde la psiquiatría, se vuelve imprescindible promover una mirada integral, interdisciplinaria e intersectorial y la implementación de políticas sostenidas de prevención con enfoque comunitario. Es fundamental garantizar el acceso efectivo a la salud mental con calidad y continuidad, producir y sistematizar la información local que oriente la toma de decisiones.
La psiquiatría contemporánea, lejos de limitarse al diagnóstico, debe articular escucha, contexto y acción. El sufrimiento de las juventudes del conurbano bonaerense requiere respuestas comprometidas, sensibles y sostenidas en el tiempo.
Copyright © SIIC, 2025 Bibliografía
1 Organización Mundial de la Salud. Prevención del suicidio: un imperativo global, 2021. https://www.who.int.
2 Observatorio de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes. Informe sobre suicidio adolescente en Argentina, 2020. https://www.observatoriodelainfancia.gob.ar 3 González MA., Pérez S, Navarro R. Factores asociados a la conducta suicida en adolescentes latinoamericanos. Revista Latinoamericana de Salud Mental, 14(2):113-126, 2022.
4 UNICEF Argentina. La salud mental en la adolescencia: una prioridad pospandemia, 2019. https://www.unicef.org/argentina 5 Turecki G, Brent DA. Suicide and suicidal behaviour. The Lancet 387(10024): 1227-1239, 2016. https://doi.org/10.1016/S0140-6736(15)00234-2 6 Zalsman G y col. Suicide prevention strategies revisited: 10-year systematic review. The Lancet Psychiatry 3(7):646–659, 2016. https://doi.org/10.1016/S2215-0366(16)30030-X

Palabras Clave
suicidio adolescente, intento autolítico, muerte violenta, ideación suicida, antecedentes de suicidio
Especialidades
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Informe
Autor del informe original
X Niu
Institución: IQVIA,
Falls Curch EE.UU.

Beneficios de la Lurasidona sobre la Funcionalidad y la Productividad en Adultos
En pacientes con depresión bipolar, la monoterapia con lurasidona mejora significativamente y de manera sostenida la productividad y la funcionalidad. La mejor comprensión de los beneficios de la droga sobre estos dos aspectos contribuiría a reducir las consecuencias económicas y funcionales, en pacientes con depresión bipolar.

Publicación en siicsalud
https://www.siicsalud.com/des/resiiccompleto.php/172746

Comentario
Autor del informe
Mariana Nieves Piazza 

, Hospital General de Agudos Bernardino Rivadavia, Ciudad deBuenos Aires, Argentina


Los trastornos bipolares (TBP) tienen una prevalencia de por vida de alrededor del 1.0% para el tipo I y del 0.4% en el caso del tipo II. En la mayoría de los pacientes, los episodios depresivos recurrentes en el transcurso de la enfermedad son más frecuentes que los episodios de manía o hipomanía. Además, es frecuente que los síntomas depresivos persistan en el transcurso del tiempo. Se estima que los pacientes con TBP tipo I están sintomáticos alrededor del 70% del tiempo; la depresión estaría presente en aproximadamente las tres cuartas partes del tiempo de enfermedad.
La edad más frecuente de inicio es la tercera década de la vida (es decir entre los 20 y 30 años).
Los TBP están vinculados con menor expectativa de
vida, principalmente debido a su inicio temprano y su cronicidad, además de relacionarse con una gran carga económica. Esta última alude a la utilización y los costos directos de la atención médica, a la perdida de la productividad en el lugar de trabajo, al cuidado de los pacientes y también a otros costos indirectos. De este modo, es fácil inferir que la carga económica de los TBP impacta significativamente en los pacientes, en las familias, en el sistema de salud y en la sociedad.1
Tradicionalmente, se determinó el impacto que genera el TBP a través de la clínica, según la cantidad de recaídas y de internaciones, y de acuerdo con el grado de reducción de los síntomas, para lo cual se han usado escalas como la Hamilton Depression Rating Scale (HAM-D) o la Young Mania Rating Scale (YMRS). Posteriormente, se sugirió la importancia de considerar la recuperación funcional como indicador de respuesta terapéutica, ya que algunos pacientes presentan buena recuperación, aun luego de haber tenido síntomas graves, mientras que otros tienen menor funcionalidad y manifiestan escasa sintomatología.Una evaluación completa debe incluir el estudio de varios dominios conductuales, como el social, el laboral y el educacional, además de la capacidad de vivir de forma independiente; la recuperación funcional significa alcanzar la normalidad en esos dominios. La funcionalidad puede medirse con instrumentos breves, administrados por el médico, como la escala Global Assessment of Functioning (GAF), que asigna puntajes de 0 a 100. También se utilizan el NIMH-LCM, el Life Functioning Questionnaire y el Longitudinal Interval Follow-up Evaluation-Range of Impaired Function Tool, que evalúa el área laboral, las relaciones interpersonales, la recreación y la satisfacción en las actividades realizadas.2
La calidad de vida (CV) se refiere al buen estado del individuo y a la respuesta al tratamiento, y se ha descrito como la percepción individual de la posición frente a la vida, de acuerdo con la cultura y los valores impuestos en ella, y en relación con las metas y expectativas del individuo; la diferencia de este concepto con el de calidad de vida relacionado con la salud (CVRS), es que esta última se refiere específicamente a aquello que es afectado por la enfermedad.Comparada con la evaluación de la funcionalidad, la CV se determina de forma subjetiva mediante la utilización de escalas. El establecimiento de la CV no reemplaza la evaluación de funcionalidad ni de recuperación; esta última se define no solo por la remisión sintomática, sino también por la remisión sindromática y funcional.2
En relación con la lurasidona, es un antipsicótico atípico con elevada afinidad por los receptores D2, 5-HT7 y 5-HT2A (antagonismo), con afinidad moderada por los receptores 5-HT1A (agonismo parcial) y sin afinidad por los receptores H1 y M1. Estudios aleatorizados y controlados con placebo demostraron la eficacia de la lurasidona como monoterapia y como terapia adyuvante, en pacientes con depresión bipolar, en combinación con litio o valproato.
Lo que me resultó interesante del estudio Beneficios de la lurasidona sobre la funcionalidad y la productividad en adultos con depresión bipolar*, es que se tiene en cuenta un aspecto olvidado muchas veces en los tratamientos del TBP, la recuperación funcional. Los cambios a largo plazo en los dominios de la SDS referidos en este trabajo aportan evidencia significativa acerca del beneficio en cuanto a la productividad y la funcionalidad, del uso delurasidona en monoterapia. Por lo tanto, se reducirían los costos indirectos en los pacientes con depresión bipolar.
Copyright © SIIC, 2023 Bibiografía
Tercer Consenso Argentino sobre el manejo de los trastornos bipolares. Pimera Parte. VertexRevArgPsiquiatr 33(158):56-57, 2022.
Michalak EE, Murray G, Young AH, Lam RW. Burden of bipolar depression: impact of disorder and medications on quality of life. CNS Drugs 22(5):389-406, 2008.

Palabras Clave
efectos, lurasidona, funcionamiento, costos indirectos, depresión bipolar
Especialidades
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