LA REPOLARIZACIÓN TEMPRANA EN EL ELECTROCARDIOGRAMA DEL FUTBOLISTA
Roberto Maximino Peidro1,Graciela Beatriz Brión2,Martín Bruzzese3 y Gustavo Castiello4
1Médico, Jefe Rehabilitación Cardiovascular, Instituto de Medicina del Deporte y Rehabilitación de Futbolistas Argentinos Agremiados, Buenos Aires, Argentina
2Médica, Cardióloga De Planta, Instituto de Medicina del Deporte y Rehabilitación de Futbolistas Argentinos Agremiados, Buenos Aires, Argentina
3Médico, Médico De Planta, Instituto de Medicina del Deporte y Rehabilitación de Futbolistas Argentinos Agremiados, Buenos Aires, Argentina
4Médico, Cardiólogo De Planta, Hospital General De Agudos Dr. Cosme Argerich, Buenos Aires, Argentina
Buenos Aires, Argentina (SIIC)
La repolarización temprana como patente aislada en el electrocardiograma del futbolista de alto rendimiento, asintomático y aparentemente sano, es un hallazgo de elevada prevalencia y asociado con signos eléctricos que manifiestan mayor influencia vagal
El entrenamiento sistemático del atleta genera remodelamiento cardíaco, fisiológico, que puede estar asociado con modificaciones electrocardiográficas. Uno de los hallazgos en el electrocardiograma (ECG) del deportista es la repolarización precoz (RP), que consiste en la elevación del segmento ST = 0.1 mV en, al menos, dos derivaciones simultáneas. Puede incluir una “melladura” o “muesca” positiva de la porción final del intervalo QRS, asociada o no con “tironeamiento” en el comienzo del segmento ST, formando un domo o “joroba”, conocida como onda J. Al punto J o, bien, a la onda J, pueden seguirle una elevación del segmento ST y, frecuentemente en los atletas, ondas T positivas y de alto voltaje.
La RP ha sido considerada un hallazgo benigno en la población general. Sin embargo, varias publicaciones han llamado la atención sobre la relación entre la fibrilación ventricular (FV) y la RP. En pacientes sin cardiopatía estructural, la FV idiopática es una enfermedad de muy rara aparición. Fue descrita con una prevalencia de 3 en 100 000 personas, con aumento a 11 en 100 000 ante la presencia de ondas J. De estos hallazgos han surgido interrogantes sobre el real carácter benigno de la RP.
A raíz de estas dudas, iniciamos una investigación* con 210 futbolistas, hombres, profesionales y de las divisiones inferiores de instituciones afiliadas a la Asociación del Fútbol Argentino. Los objetivos de nuestro trabajo se centraron en conocer la prevalencia de RP en el futbolista de alto rendimiento, relacionar su presencia con otras variables electrocardiográficas e investigar su pronóstico.
La patente de RP se encontró en 86 ECG (40.95%). En 17 ECG (8.09%) se observó en derivaciones inferiores (en 16, asociada con RP lateral, en tanto que un solo ECG mostró la patente de RP únicamente en cara inferior). En todos los casos, la morfología del segmento ST fue ascendente.
Pudimos observar que los sujetos de mayor edad, con mayor tiempo de entrenamiento, menor frecuencia cardíaca y PR más prolongado, fueron portadores más frecuentes de la patente de RP. A los cinco años, ninguno de los deportistas que la presentaba había tenido eventos cardiovasculares.
Estos resultados expresaron la confirmación de nuestras sospechas sobre el carácter benigno de la RP, con estas características electrocardiográficas, en el atleta. En primer lugar, por el elevado número de futbolistas sin manifestaciones de cardiopatía que lo presentaban y, además, por la evolución benigna que tuvieron.
La RP podría estar relacionada con el entrenamiento sistemático y prolongado en el tiempo. Esta circunstancia se muestra al estar asociada la patente con signos que manifiestan una mayor influencia vagal. Estos son los casos de una menor frecuencia cardíaca y un intervalo PR más prolongado.
La morfología del segmento ST se describió como una variable a analizar ante la presencia de RP. En los futbolistas que hemos estudiado fue ascendente, signo señalado como benigno en comparación con las formas horizontal o descendente. Algunos autores suman como sospecha de evolución maligna la presencia sólo en derivaciones de cara inferior, localización de escasa prevalencia en nuestra población.
La muerte súbita del atleta es un evento de rara aparición. El impacto público que genera este evento en el deportista joven es enorme. Las medidas de prevención primaria incluyen el chequeo preparticipativo, donde la aplicación sistemática del ECG está discutida. Una de las razones esgrimidas para no utilizar el ECG en el deportista es la baja especificidad diagnóstica ocasionada por la elevada aparición de “falsos positivos” generados por el entrenamiento sistemático. Esta situación puede llevar a la realización de otros estudios cardiológicos que elevarían los costos del chequeo preventivo.
Tal podría ser el caso de la aparición de patentes de RP en el ECG del futbolista. La presente investigación colabora en este sentido y le resta valor patológico a la presencia aislada de RP. La elevada prevalencia de esta patente en el ECG del futbolista asintomático y aparentemente sano le quita utilidad para ser tomado como factor de riesgo en un chequeo.
La decisión clínica de realizar exámenes complementarios a partir del hallazgo debería basarse en la presencia de antecedentes personales, familiares o ambos, síntomas, comorbilidades u otras variables clínicas o electrocardiográficas asociadas.