TOXICIDAD RENAL GENERADA POR MEDICAMENTOS
Carolina V. Martinez1,Marcelo Ponte2 y Daniel Di Tulio3
1Médica, Servicios de Nefrología y Trasplante Renal, Hospital General de Agudos Dr Cosme Argerich, Ciudad de Buenos Aires, Argentina
2, Médico, Comité de Farmacovigilancia, Hospital General de Agudos Dr Cosme Argerich, Ciudad de Buenos Aires, Argentina
3, Médico, Servicios de Nefrología y Transplante Renal, Hospital General de Agudos Dr Cosme Argerich, Ciudad de Buenos Aires, Argentina
Ciudad de Buenos Aires, Argentina (SIIC)
La nefrotoxicidad por drogas es un evento médico frecuente en pacientes hospitalizados. El control estricto de la función renal y evitar la combinación de drogas nefrotoxicas puede disminuir la aparicion o la gravedad de esta toxicidad.
Los efectos adversos por medicamentos son un problema creciente en la práctica médica actual y son una causa muy importante de hospitalización. En los países desarrollados la toxicidad por medicamentos representa entre la cuarta y la sexta causa de muerte. Entre las justificaciones de este aumento en las toxicidades por fármacos se destaca el aumento de la supervivencia en la población, lo que genera un mayor porcentaje de personas ancianas que son aquellas que normalmente reciben polifarmacia (más de tres medicamentos) para el tratamiento de enfermedades crónicas. Otras causas son el rápido desarrollo de la industria farmacéutica que genera medicamentos para patologías antes incurables. También la automedicación es un factor muy importante.
Los efectos adversos pueden clasificarse en serios o no serios. Los serios son aquellos que generan la internación, la prolongan, comprometen seriamente la vida, provocan la muerte o una discapacidad permanente. Otra clasificación válida es dividirlos en reacciones de tipo A, que son aquellas que aparecen por efecto excesivo del fármaco y son dependientes de la dosis (como puede ser una toxicidad renal por enalapril), y de tipo B, que son idiosincrásicas y no dependientes de la dosis (toxicidad renal por sulfas). Las primeras representan casi el 90% de todas las reacciones adversas, mientras que las B constituyen entre el 5% y el 10%. Existen otros tipos pero son menos frecuentes: reacciones tipo C o crónicas (como puede ser una toxicidad por aminoglucósidos que no revierta), tipo D o diferidas y tipo E (ante el retiro), de las cuales no hay ejemplos en la nefrotoxicidad.
Entre las toxicidades por medicamentos más frecuentes se encuentra la toxicidad de la piel, la hepatotoxicidad y la nefrotoxicidad. En pacientes hospitalizados, hasta el 30% de los eventos de insuficiencia renal pueden ser provocados por fármacos. Durante la internación, los enfermos son más vulnerables a la toxicidad renal porque suelen recibir múltiples drogas, de las cuales más de una pueden ser neurotóxicas. A la toxicidad misma de los fármacos se agrega muchas veces el estado crítico de los pacientes con alteraciones hemodinámicas e infecciosas que los lleva a tener escasa reserva renal para responder a las injurias de los tóxicos.
En la bibliografía internacional que se ha revisado extensamente existe mucha información respecto de la toxicidad renal por fármacos, pero no es abundante la específica para los pacientes hospitalizados, como tampoco hay trabajos con gran casuística. Hay muy pocos datos sobre la incidencia de nefrotoxicidad por drogas en pacientes hospitalizados de nuestro país y de la región. Estas son algunas de las consideraciones que nos impulsó a realizar el estudio que se está comentando*. Este se llevo a cabo en el Hospital General de Agudos Dr. Cosme Argerich de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, institución que cuenta con 450 camas. El estudio se realizó entre el servicio de Nefrología y Trasplante Renal y el comité de farmacovigilancia de este hospital.
La investigación se llevó a cabo durante dos años. Para determinar que el deterioro de la función renal fue provocado por medicamentos se utilizó el algoritmo de Naranjo, uno de los más empleados a nivel internacional. Se aplicó debido a que, a pesar de ser más complicado que otros, es el más difundido en otros trabajos internacionales, lo que permite su comparación.
En la investigación se encontró una alta incidencia de toxicidad renal por drogas, de las cuales un porcentaje relevante generaron internación o la prolongaron. Los fármacos que más frecuentemente causaron toxicidad fueron los cardiovasculares, los antibióticos (estos dos grupos son también las drogas más consumidas en pacientes internados en nuestro hospital) y los antiinflamatorios no esteroides. Es muy importante resaltar que la toxicidad provocada por analgésicos no esteroides devino muchas veces de la automedicación de los pacientes por tiempo prolongado.
Una conclusión interesante del trabajo es que muchos de los eventos de toxicidad por fármacos podrían ser evitados o bien su gravedad podría ser disminuida en caso de intensificar el control clínico y de laboratorio de los enfermos que reciben medicación nefrotóxica potencial. Otro tanto podría ser prevenido evitando la automedicación de los pacientes.