Introducción

Hasta el 4 de enero de 2021, la pandemia de enfermedad por coronavirus 2019 (COVID-19 por su sigla en inglés), causada por un nuevo coronavirus, en coronavirus 2 del síndrome respiratorio agudo grave (Severe Acute Respiratory Syndrome [SARS]-CoV-2), se asoció con más de 83 millones de casos confirmados y más de 1.8 millones de muertes en todo el mundo. Las características clínicas y epidemiológicas, la etiopatogenia y las complicaciones de la fase aguda de COVID-19 se conocen bastante bien; en cambio, las consecuencias de la enfermedad a largo plazo no han sido analizadas con precisión.

Con urgencia se requieren estudios a largo plazo para conocer la persistencia de los síntomas, la función pulmonar y los trastornos físicos y psicológicos, en pacientes que debieron ser internados por COVID-19. Los pocos estudios al respecto realizados hasta ahora incluyeron muestras reducidas de pacientes y el seguimiento más prolongado ha sido de 3 meses; no obstante, el amplio espectro de manifestaciones posteriores al alta no ha sido caracterizado. Asimismo, en ningún estudio se analizaron las manifestaciones extrapulmonares persistentes después del daño agudo, como tampoco aquellas que aparecen después del alta. El objetivo del presente estudio fue describir las consecuencias de COVID-19 luego del alta e identificar los factores de riesgo asociados con ellas.

Pacientes y métodos

En el presente estudio de cohorte ambidireccional se incluyeron pacientes con COVID-19 confirmada, dados de alta del Jin Yin-tan Hospital (Wuhan, China) entre el 7 de enero y el 29 de mayo de 2020. Los pacientes respondieron una serie de cuestionarios para conocer los síntomas y la calidad de vida, y fueron sometidos a examen físico, prueba de caminata en 6 minutos y estudio bioquímico. Los pacientes de las categorías clínicas más altas (3, 4 y 5 a 6) fueron sometidos, también, a pruebas de función pulmonar, tomografía computarizada (TC) de tórax de alta resolución y ecografía. Mediante modelos de variables múltiples se establecieron las asociaciones entre la gravedad de la enfermedad y las consecuencias a largo plazo sobre la salud.

Resultados

Fueron reclutados 1733 de 2469 pacientes dados de alta luego de presentar COVID-19; la mediana de edad fue de 57 años (rango intercuartílico [RIC] de 47 a 65 años) y el 52% eran hombres. El estudio de seguimiento se realizó entre 16 de junio y 3 de septiembre de 2020, luego de una mediana de 186 días luego del inicio de los síntomas (175 a 199 días).

Los síntomas referidos con mayor frecuencia fueron la fatiga o la debilidad muscular (63%, 1038 de 1655) y los trastornos del sueño (26%, 437 de 1655). El 23% de los pacientes (367 de 1617) presentaron ansiedad o depresión.

El 24% de los pacientes con categoría clínica de gravedad 3, el 22% de los enfermos con categoría 4 y el 29% de los sujetos con categoría 5 a 6 presentaron mediana de distancia de caminata en la prueba de 6 minutos por debajo del límite inferior de normalidad. Los porcentajes de pacientes con trastornos de la capacidad de difusión fueron de 22% para la categoría 3, 29% para la categoría 4 y 56% para la categoría 5 a 6. En el mismo orden, la mediana de los puntajes en la TC de tórax fueron de 3 (RIC: 2.0 a 5.0), 4.0 (RIC: 3.0 a 5.0) y 5.0 (4.0 a 6.0).

En los modelos de variables múltiples, el odds ratio (OR) para el compromiso de la capacidad de difusión fue de 1.61 (intervalo de confianza del 95% [IC 95%]: 0.80 a 3.25) para la categoría 4, respecto de la categoría 3, y de 4.60 (IC 95%: 1.85 a 11.48) para la categoría 5 a 6, en comparación con la categoría 3. Para la ansiedad y depresión, el OR fue de 0.88 (IC 95%: 0.66 a 1.17) para la categoría 4, respecto de la categoría 3, y de 1.77 (IC 95%: 1.05 a 2.97) para la categoría 5 a 6, en comparación con la categoría 3. Para la fatiga o la debilidad muscular, el OR fue de 0.74 (IC 95%: 0.58 a 0.96) para la categoría 4, en comparación con la categoría 3, y de 2.69 (IC 95%: 1.46 a 4.96) para la categoría 5 a 6, respecto de la categoría 3.

Entre los 94 pacientes sometidos a estudio serológico durante el seguimiento, la seropositividad (96.2% en comparación con 58.5%) y la mediana del título de anticuerpos neutralizantes (19.0 en comparación con 10.0) fueron significativamente más bajos en comparación con los valores obtenidos durante la fase aguda. Un total de 107 de 822 pacientes sin daño renal agudo y con índice de filtrado glomerular (IFG) estimado de 90 ml/min/1.73 m² o más durante la fase aguda tuvieron IFG de menos de 90 ml/min/1.73 m² durante el seguimiento.

Conclusión

Los resultados del presente estudio muestran que a los 6 meses del inicio de los síntomas, los pacientes con COVID-19 presentan con frecuencia fatiga o debilidad muscular, trastornos del sueño, depresión o ansiedad. Los pacientes con enfermedad más grave durante la internación tuvieron más compromiso de la capacidad de difusión pulmonar y más anormalidades radiológicas. La declinación del título de anticuerpos neutralizantes es un aspecto de particular preocupación por la posible reinfección; esta posibilidad debe ser considerada en los pacientes que presentan nuevamente síntomas de COVID-19.