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Introducción
Estudios recientes sugieren que un porcentaje considerable de pacientes con antecedente de enfermedad por coronavirus 2019 (COVID-19 por su sigla en inglés) presente síntomas persistentes, como fatiga y debilidad muscular, falta de aire y trastornos neurológicos, más de 6 meses después de la fase aguda de la enfermedad – COVID prolongada (CP) o síndrome posCOVID. En un estudio del Reino Unido, la mayor prevalencia de CP después de 12 semanas de la enfermedad aguda se observó entre los pacientes de 25 a 34 años (18.2%), en tanto que la prevalencia más baja ocurrió entre los pacientes de 2 a 11 años (7.4%).
La evidencia para CP en la población pediátrica aún es escasa; sin embargo, la información en conjunto derivada de estudios a escala reducida sugiere que más de la mitad de los enfermos presenta un síntoma persistente, como mínimo, 4 meses después de la infección aguda. Sin embargo, en un estudio reciente de Australia, sólo el 8% de los pacientes de 0 a 19 años (mediana de 3 años) tuvo CP, 3 a 6 meses después de COVID-19 predominantemente leve.
El objetivo del presente estudio de cohorte fue determinar la incidencia de CP y los factores de riesgo para CP en niños con antecedente de internación por COVID-19, para lo cual se aplicó un protocolo estandarizado para la recolección de datos, creado por el grupo de trabajo del International Severe Acute Respiratory and Emerging Infection Consortium (ISARIC), para COVID-19 en la población pediátrica.
Pacientes y métodos
Para el presente estudio prospectivo de cohorte se incluyeron pacientes de 18 años o menos con antecedente de infección confirmada por coronavirus 2 del síndrome respiratorio agudo grave (Severe Acute Respiratory Syndrome [SARS]-CoV-2). Específicamente se analizaron pacientes que fueron internados por COVID-19 entre 2 de abril y 26 de agosto de 2020. Se realizaron entrevistas telefónicas con el cuestionario del ISARIC; los síntomas persistentes, es decir aquellos que perduraron más de 5 meses, se clasificaron por sistemas orgánicos.
Resultados
Se dispuso de datos durante el seguimiento para 518 de 853 (61%) pacientes. La mediana de edad fue de 10.4 años (rango intercuartílico [RIC] de 3 a 15.2 años); 270 (52.1%) eran niñas. La mediana del seguimiento desde el alta fue de 256 días (RIC de 223 a 271) días.
En el momento de la entrevista de seguimiento, 126 pacientes (24.3%) refirieron síntomas persistentes, fundamentalmente fatiga (n: 53, 10.7%), trastornos del sueño (n: 36, 6.9%,) y trastornos sensitivos (n: 29, 5.6%).
El 8.4% de los pacientes (n: 44) presentaron múltiples síntomas. Los factores de riesgo para la presencia de síntomas persistentes fueron la mayor edad, de 6 a 11 años (odds ratio [OR] de 2.74; intervalo de confianza del 95% [IC 95%]: 1.37 a 5.75) y de 12 a 18 años (OR de 2.68, IC 95%: 1.41 a 5.4), y el antecedente de enfermedades alérgicas (OR de 1.67, IC 95%: 1.04 a 2.67).
Conclusión
Los resultados del presente estudio indican que alrededor de la cuarta parte de los pacientes pediátricos con antecedente de internación por COVID-19 presenta síntomas persistentes, meses después de haber sido internados por enfermedad aguda. Aproximadamente 1 de cada 10 pacientes presenta compromiso multisistémico. La mayor edad y el antecedente de enfermedades alérgicas fueron factores predictivos de CP en la población pediátrica.
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