siiclogo2c.gif (4671 bytes)
RITMO DE MENARQUIA Y EXPECTATIVA DE FIESTA O VACACION-ESTUDIO
(especial para SIIC © Derechos reservados)
bbbb
cccc

vuniversidaddechile9.gif valenzuelayuraidini9.jpg Autor:
Carlos Y. Valenzuela
Columnista Experto de SIIC

Institución:
Programa de Genética Humana, ICBM, Facultad de Medicina, Universidad de Chile

Artículos publicados por Carlos Y. Valenzuela 

Recepción del artículo: 2 de enero, 2006

Aprobación: 26 de diciembre, 2005

Primera edición: 7 de junio, 2021

Segunda edición, ampliada y corregida 7 de junio, 2021

Conclusión breve
Refutación de los factores climáticos (fotoperíodo y temperatura), socioculturales, étnicos, nutricionales, días de fiesta o ambientales en general, y los sesgos de memoria o de año de encuesta, como causas mayores de ritmos anuales de incidencia y de edad mensual de menarquia.

Resumen

Los ritmos anuales de incidencia (RIMM) y de edad mensual (REMM) de menarquia suceden en todas las poblaciones examinadas hasta ahora. Presentamos pruebas concluyentes que refutan los factores climáticos (fotoperíodo y temperatura), socioculturales, étnicos, nutricionales, días de fiesta o ambientales en general, y los sesgos de memoria o de año de encuesta, como causas mayores de RIMM o REMM. Los ritmos anuales de expectativas de fiesta (vacaciones, cumpleaños, festividades relevantes para las niñas) y de no fiesta (estudio) aparecen como factores causales mayores consistentes de estos ritmos.

Palabras clave
incidencia mensual de menarquia, ritmo anual de edad de menarquia, expectativa de fiesta, ritmo vacación-estudio

Clasificación en siicsalud
Artículos originales> Expertos del Mundo>
página www.siicsalud.com/des/expertos.php/77908

Especialidades
Principal: Obstetricia y Ginecología
Relacionadas: Endocrinología y MetabolismoMedicina FamiliarMedicina InternaPediatría

Enviar correspondencia a:
Carlos Y. Valenzuela, Programa de Genética Humana, ICBM, Facultad de Medicina, Universidad de Chile, 70061, Santiago de Chile, Chile

Patrocinio y reconocimiento
Agradecimientos Este estudio habría sido imposible sin la colaboración de Cevuru R. Srikumari (India), Nubiola Pineda (Colombia), Judit Csoknyay (Hungría) y de mis colegas Eduardo Núñez y Claudio Tapia (Chile), que recolectaron y analizaron los datos y discutieron las ideas en los estudios previos. Los comentarios con Paola Gueresi (Italia) fueron de provecho.

FIESTA OR SCHOOL-VACATION EXPECTANCY AND ANNUAL RHYTHM OF INCIDENCE AND AGE AT MENARCHE

Abstract
The yearly rhythm of incidence of menarche (YRIM) and the monthly rhythm of age at menarche (MRAM) occur yearly in all the girl samples examined until now. We present conclusive evidence that refute climatic factors (photoperiod and temperature), socio-cultural, ethnic, nutritional, holidays and environmental factors, in general, as well as memory bias or the year of survey bias, as main causes of YRIM or MRAM. The annual rhythm of fiesta expectancy (vacation, birthday, and relevant celebrations for girls) and no-fiesta expectancy (school period) appear as major causal factors consistent with these rhythms.


Key words
monthly incidence of menarche, annual rhythm of menarche age, fiesta expectancy, school-vacation rhythm

RITMO DE MENARQUIA Y EXPECTATIVA DE FIESTA O VACACION-ESTUDIO

(especial para SIIC © Derechos reservados)

Artículo completo
Introducción

La menarquia ocurre con un ritmo de incidencia y de edad por mes en el año. Los estudios de este ritmo son numerosos y no es posible citar una fracción pequeña de ellos. Pueden seguirse con trabajos comprensivos y sus referencias, que abarcan desde 1930 hasta 2004.1-7 El estudio del ritmo de incidencia mensual de menarquia (RIMM) es distinto del estudio de edad de menarquia. Los factores que inciden en la edad de menarquia se analizan desde hace más de tres siglos1 y no coinciden con los de sus ritmos anuales. Este estudio se refiere a los ritmos circanuales de la incidencia mensual (IMM) o de la edad mensual (EMM) de menarquia (REMM).1-7

Entre los factores de RIMM o de REMM aparecen: el clima, factores socioeconómicos, culturales, el ritmo escolar vacación-estudio, ritmos laborales de los padres, ritmos nutricionales, días de fiesta y otros ritmos circanuales.1-7 Los trabajos describen asociaciones entre estos factores y los ritmos de menarquia, buscando la mayor importancia de cada uno de ellos por correlatos estadísticos y matemáticos. Se ha desarrollado un programa distinto con estudios hipotético-deductivos para refutar o afirmar factores causales de RIMM o de REMM, en forma científica concluyente.4,8-10 Usamos estacionalidad únicamente como clima, especificado por el fotoperíodo y la temperatura.

En 1978, una investigación sobre edad de menarquia, en Santiago (Chile, latitud 33º S) reveló excesos de menarquia en diciembre y enero,8 lo que refutaba, en principio, la hipótesis climática, ya que muchas ciudades europeas mostraban excesos de menarquia en diciembre y enero.2,8 Como las encuestas sobre fecha de menarquia podían incluir algún sesgo de memoria, juntamos datos transversales8 y los de un seguimiento longitudinal de aproximadamente 1 000 niños entre varones y mujeres, de las cuales teníamos fechas exactas de menarquia, para refutar la estacionalidad climática y explorar dos hipótesis alternativas: el factor filogenético y el factor ontogenético.4 Por factor filogenético propusimos una impronta circanual dejada por el paso del ciclo estral al ciclo menstrual desde los antropoides hasta los homínidos, en su sitio ecogeográfico de origen. Este factor es accesible por los ritmos presentes en diversas etnias.4,9 Por factor ontogenético propusimos las improntas circanuales adquiridas durante el desarrollo individual. El factor ontogenético es accesible desde el estudio de la concordancia de diferentes fechas o períodos notables como mes de nacimiento y de menarquia.

Sometimos a prueba tres hipótesis: I) el RIMM depende del fotoperíodo y la temperatura; II) la incidencia mensual de menarquia se asocia positivamente con la incidencia mensual de nacimientos (impronta ontogenética); III) hay un ritmo originario en la especie humana presente en las muestras (impronta filogenética).4 Tanto el estudio transversal como el longitudinal mostraron mayor IMM en diciembre y enero, al igual que muchas muestras europeas, por lo que consideramos refutada la hipótesis estacional. Ambas muestras coincidieron en una mayor IMM en el mes de nacimiento (impronta ontogenética). Se encontró mayor incidencia de nacimientos en septiembre-octubre, 9 meses posteriores a los excesos de menarquias en diciembre-enero, por lo que se concluyó que había huellas de impronta filogenética con origen del ser humano al sur de Africa (óptimo con embarazos en otoño e invierno y nacimiento al inicio de la primavera). Se generó una viva discusión sobre la refutación del factor climático o estacional y del ambiental en general.10,11 Esta refutación y la coincidencia mes de menarquia-mes de nacimiento no fueron aceptadas como conclusivas. El estudio del factor filogenético fue postergado, pues ignoramos la realidad ginecoendocrina de especies intermedias (australopitécidos y otros).

Realizamos una serie de trabajos en diversos países del mundo para continuar probando el factor climático y el ontogenético.12-15 Pensamos que la coincidencia en los meses de menarquia y nacimiento podía deberse a coincidencia con el cumpleaños. La inspección de los datos de varios países mostró concordancia entre alta IMM en meses de vacación y una baja en meses de estudio. La posible alta IMM en el cumpleaños y en vacaciones indicaba que la menarquia podría reprimirse por una situación de estrés o negativa para la niña (no fiesta, estudio) y podría verse favorecida por una situación afectivo-emotiva positiva (fiesta, vacación). La impronta ontogenética sería una situación circanual de significado socio-psico-neuroendocrino para la niña. Estas hipótesis se sometieron a prueba en los trabajos que resumiremos.12-15 En alguna forma, se plantearon en otros estudios y criticadas con datos de tendencia secular en Japón.3


Lógica (racional), muestras, materiales y métodos

Lógica

Se prueban varias hipótesis. A) La estacionalidad climática (fotoperíodo y temperatura) es el factor mayor de los ritmos mensuales de incidencia (RIMM) y edad (REMM) de menarquia. B) Un factor mayor de RIMM, REMM y de incidencia diaria de menarquia (IDM) es el sesgo de memoria. C) El ritmo escolar vacación-estudio es el factor mayor de RIMM y REMM. D) El RIMM y el REMM son producidos por ritmos nutricionales, ambientales, culturales o socioeconómicos. E) La expectativa de fiesta en torno a días o períodos del año se asocia con alta IDM y con variaciones en la EDM. F) El día de fiesta, per se, implica alta incidencia de menarquia. Hipótesis nulas (contra las cuales se contrastan las otras): H01) La menarquia ocurre al azar, y por lo tanto, con distribución uniforme en los días; su incidencia sigue una distribución binomial (en cada día, semana o mes) o multinomial a lo largo del año, tanto en su aparición diaria, hebdomadaria o mensual; se espera para todos los días o semanas el mismo número promedio y error típico de menarquias, para los meses se espera un número de menarquias proporcional al número de sus días; H02) La edad de menarquia es igual en días, semanas o meses del año y sigue una distribución normal. En ambas hipótesis nulas hay homoscedasticidad de varianzas. Nota epistémica. La crítica más importante es el sesgo de memoria para los días de menarquia. Como cualquier factor mayor debe desviar lo observado en forma sistemática de la distribución binomial, desviación detectable con muestras grandes (miles) de niñas. Los factores causales (incluidos los sesgos) son factores materiales y desvían los datos de su distribución al azar en forma precisa y pueden someterse a prueba de hipótesis.

El método hipotético-deductivo permite probar la hipótesis y la negación de la hipótesis (principio de no contradicción). La hipótesis de que el fotoperíodo determina el RIMM implica que el fotoperíodo no determina el RIMM. La hipótesis implica correlación entre fotoperíodo y RIMM; su negación implica independencia de ambas variables. Otro sesgo es el del año de la encuesta. Si las niñas son encuestadas en junio y julio, los meses de enero a julio presentarán más menarquias que los meses de agosto a diciembre. Un tercer sesgo se produce por los cursos o edades encuestados; si son cursos superiores habrá más niñas con menarquia, pero aumentará el sesgo de memoria y la edad de menarquia; no analizaremos este sesgo. Presentaremos los análisis con los datos completos y luego diferenciando entre las niñas que recuerdan el día y el mes (menor sesgo de memoria) y las que recuerdan sólo el mes (mayor sesgo de memoria), en la muestra, una vez removidas las menstruaciones que ocurrieron el año de la encuesta.


Muestras

Provienen de datos de la literatura1-7 y propios, de cuatro fuentes: Debrecen, Hungría (latitud 47.5º N; longitud 22º E, zona templada-fría); Chennai, Madras, India (Lat 13º N; Lon 80º E, zona tropical no ecuatorial); Medellín, Colombia (Lat 7º N; Lon 76º O, zona ecuatorial); Santiago, Chile (Lat 33º S; Lon 71º O, zona templada).9,12-15


Métodos

Niñas escolares, entre 7.5 y 19 años de edad fueron encuestadas sobre sus fechas de nacimiento y menarquia. En Santiago, Chennai y Medellín se utilizó el mismo cuestionario y método. Los datos de Debrecen fueron obtenidos con cuestionarios similares hechos por colegas magiares. Se pidió a las niñas, que anotaran el día, mes y año de nacimiento y menarquia, si los recordaban exactamente (reducción del sesgo de memoria). La ubicación de la fecha de menarquia se ayuda con una red de días y períodos notables del año (debe notarse que la niña tiene además los días de cumpleaños y onomásticos de su familia y amistades relevantes para precisar su día de menarquia). El resto de la metodología, convenciones, definiciones conceptuales y operacionales ha sido publicado.4,9,12-15 La estadística se presenta junto a los resultados y discusión.

Etica

Las encuestas fueron aplicadas con el consentimiento o permiso de las niñas, apoderados, profesores y directores de las instituciones educacionales.


Resultados y discusión

Ritmo mensual de incidencia de menarquia (RIMM)

La tabla 1 presenta el porcentaje mensual esperado y el observado de RIMM en Debrecen (Hungría), Chennai (India), Medellín (Colombia) y Santiago (Chile). Se especifica si cada porcentaje mensual en cada ciudad concuerda con la hipótesis [(vacación = mayor %) - (estudio = menor %)]. La tabla es una modificación de la de un trabajo previo.13 La muestra de Santiago de 1978 fue reemplazada por otra tomada en 1990-91.13,14 Así, los datos permiten probar las hipótesis enunciadas en el apartado Lógica.


Tabla 1

A) El fotoperíodo y la temperatura son factores mayores de RIMM. Se refuta porque: i) las poblaciones de zonas tropicales no deben presentar RIMM; hay un ritmo significativo en Medellín y Chennai, y Medellín (ecuatorial) tiene el ritmo más marcado (DT %) y es bimodal. ii) La variación de la IMM debe ser mayor desde el Ecuador hacia los polos; el orden observado es contradictorio: Medellín > Santiago > Debrecen > Chennai; las varianzas (DT%) del porcentaje son muy significativas. iii) Meses contiguos o de la misma estación deben presentar pequeñas variaciones (homogeneidad) en IMM; enero y febrero, en Debrecen y Medellín, muestran exceso y deficiencia de menarquias significativos (respecto de lo esperado, binomial); en Chennai y Santiago, ambos meses presentan deficiencia y exceso, respectivamente, pero difieren entre sí, lo que sucede con junio, julio y agosto, en Medellín, es notable. iv) Meses no contiguos con similares fotoperíodos y temperaturas deben presentar similares IMM; febrero y noviembre difieren significativamente en Chennai, Medellín y Santiago. v) Meses con fotoperíodos y temperaturas dispares deben presentar IMM dispares, se refuta ya que, en Debrecen y Santiago, enero y septiembre tienen similares IMM y en Santiago la IMM se mantiene deprimida con cifras similares desde marzo a noviembre (excepto septiembre). vi) Ciudades vecinas o de latitud similar deben tener ritmos similares, pero Medellín y Chennai (tropicales) tienen RIMM significativamente diferentes, además la literatura describe muchas ciudades vecinas o de igual latitud cuyos RIMM difieren significativamente.1-7 vii) Ciudades con climas templados o árticos de hemisferios diferentes deben tener RIMM antitéticos, pero Debrecen, que tiene un RIMM diferente del de Santiago no es antitético, coinciden en IMM en enero, marzo, abril, mayo, octubre y noviembre y difieren en febrero, julio, agosto, septiembre y diciembre; además, Debrecen tiene RIMM bimodal, no encontrado en Santiago. En lógica, las afirmaciones de una hipótesis no son definitivas (falacia de la inducción o del modus ponens), pero lo son las refutaciones (falsación o modus tollens). No pretendemos que el clima carezca de influencia; podría actuar como factor menor por la expectativa de “tiempos mejores” (parte de la otra hipótesis).


B) Es difícil que se produzca el sesgo de memoria respecto de un mes, salvo en días cercanos a su inicio o término, pero en ese caso no alteraría la IMM. La enorme heterogeneidad de IMM (Prob χ2 < 10-9), en las cuatro ciudades no puede deberse a este sesgo.


C) El RIMM se produce por una mayor IMM en meses de vacaciones y una menor IMM en meses de estudio. Definimos13 mes de vacación si tenía más de 6 días de vacaciones. En Santiago, en 1978, no se daba en septiembre (mes patrio) una semana de vacaciones; en 1990-91 se daba la semana completa. Esta hipótesis es evidente ante la simple lectura de la tabla 1. En las cuatro ciudades se da un desacuerdo y 11 acuerdos, en los 12 meses, siendo lo esperado binomial de 6 acuerdos y 6 desacuerdos. Se tiene χ12 = (11-6)2/6 + (1-6)2/6 = 50/6 = 8.33, p < 0.005, en cada ciudad. La concordancia en las cuatro ciudades da: χ12 = 33.33, p < 10-9 (correlato υ = 0.833).16 Por esta alta correlación, el método hipotético deductivo refuta la negación de la hipótesis: no hay ninguna relación entre el ritmo vacación-estudio y el RIMM, cuya esperanza coincide con la binomial del signo.


D) El RIMM depende de factores ambientales, culturales, socioeconómicos, nutricionales u otros ambientales no relacionados con el ritmo vacación-estudio. Los pueblos de Debrecen, Chennai, Medellín y Santiago difieren enormemente en estos factores y sus RIMM concuerdan con el ritmo vacación-estudio [C)]. Luego, estos factores son refutados como causas de la concordancia (ritmo vacación-estudio) - RIMM.


Expectativa de fiesta e incidencia diaria de menarquia (IDM)

Exploramos la posibilidad de que los días o períodos de fiesta (cumpleaños, feriados civiles o religiosos) fueran responsables de excesos de menarquias, para lo cual estudiamos la distribución anual de la IDM. Descartamos a priori que sólo un día festivo precipitara la menarquia, ya que toda menstruación necesita de un proceso de por lo menos 10 días para producirse. Se estudió la expectativa de fiesta (o de no fiesta) en torno a días festivos, como una modificación periódica circanual que influye el estado psico-neuroendocrino de la niña y la IDM. El obstáculo más importante para este estudio es el posible sesgo de memoria. Como el estudio previo,4 con 259 niñas, cuyos días de menarquia fueron consignados sin errores (seguimiento longitudinal), mostró una distribución de menarquias similar a la de la muestra transversal, que no fue considerada suficiente9-11 por posibles sesgos de pesquisa, decidimos realizar nuevos estudios sometiendo a prueba los posible sesgos. Hay evidencias de que el sesgo de memoria, si opera, lo hace en forma indetectable por los métodos utilizados.17 Este sesgo tiene dos componentes: I) Sesgo de memoria con día de menarquia verdadero. Las niñas recuerdan mejor el día de menstruación si ocurrió en un día notable; los días ordinarios aparecen con menos menarquias que las esperadas según la binomial. Este sesgo se descarta utilizando como valor esperado diario de menarquias el cociente entre el número total de niñas (recuerden o no el día de su menarquia) y 365.14 II) Sesgo de memoria con cambio del día (falso) de menarquia. Las niñas recuerdan el día sin precisión y lo desplazan hacia el día de fiesta más cercano. Según este sesgo: i) se espera un día de fiesta con exceso rodeado por una distribución en U deficitaria en IDM; ii) todos los días feriados tienen que estar afectados según i); iii) días no festivos no pueden estar afectados. Con los datos de Colombia y Chile probamos estas hipótesis, la E) y la F).14

Cumpleaños. Muestra chilena: El promedio esperado no sesgado (la muestra con o sin recuerdo del día) de menarquias diarias fue PM = 10.36 M/D (desviación típica DT = 3.21). El límite superior del intervalo de confianza fue LS = 19.98 (19 M/D). Ningún día del año tuvo 0 menarquia (0M). Anotamos la distancia en días al cumpleaños como ± #D y encontramos 18 M o más en -3D = 18 M; -2D = 30 M; -1D = 22 M; 0D = 49 M; +1D = 26 M; +2D = 22 M; +3D = 18 M; el cumpleaños acumuló 49 M, muy por encima del número crítico (19 M). Se observa una campana sesgada a izquierda (más menarquias antes que después del cumpleaños) de excesos de menarquia en torno del cumpleaños, que refuta la U esperada del sesgo de memoria. El resto se ajustó a la binomial. Muestra colombiana: PM = 9.91 M/D (DT = 3.143). LS = 19.3 (19 M/D). No hubo día con 0M, sólo el cumpleaños tuvo exceso significativo de menarquias y su vecindario fue -3D = 17 M; -2D = 14 M; -1D = 11 M; 0D = 36 M; +1D = 14 M; 2D = +11 M; 3D = 7 M; distribución campaniforme sesgada a izquierda y no en U según el sesgo de memoria. El resto se ajustó a la binomial.

Día de fiesta. Muestra chilena: Con estimadores anuales no sesgados (toda la muestra) se encontraron excesos significativos en diciembre, 22 = 22 M, 24 = 30 M, 25 = 23 M, 31 = 26 M y enero, 1 = 33 M con relación a Navidad y Año Nuevo. En relación con las fiestas patrias (18 y 19 de septiembre) sólo el 18 fue significativo, con 23 M. En febrero 14 = 43 M (día de los enamorados) y 28 = 18 M (último día de vacaciones). Con estimadores mensuales no sesgados (el día de cada mes tiene su estimador) se agregan marzo, 3 =14 M, 5 = 15 M, 7 = 13 M; mayo 10 = 9 M, 21 = 11 M (fiesta patria); junio 12 = 1 M, 15 = 10 M; octubre 5 = 16 M; el 28 de febrero no es significativo. Con estimadores mensuales sesgados (sólo las niñas que recuerdan el día) se agregan días festivos y no festivos con excesos significativos,14 de los cuales son notables septiembre 15 = 12 M; 16 = 13 M; 17 = 13M (preceden las fiestas patrias). Muestra colombiana: No conocíamos los días de fiesta en Medellín. Con estimadores anuales no sesgados resultó significativo julio 20 = 22 M; diciembre 8 = 28 M; 16 = 23 M; 22 = 18 M; 24 = 19 M; 28 = 22 M; 31 = 19 M. Con estimadores mensuales no sesgados sólo resultó significativo diciembre 8. Con estimadores mensuales sesgados se agregan varios otros días con excesos significativos que corresponden a feriados o a no feriados.14 El 20 de julio es el día patrio de Colombia, y el 8 de diciembre, la fiesta religiosa más importante. Estos resultados refutan el sesgo de memoria [B)] dado que en ambas ciudades: i) varios feriados no presentan excesos de menarquias (mayo 1; octubre 12, agosto 15, noviembre 1); ii) días no feriados presentan excesos de menarquias;14 iii) cuando hay días con exceso marcado están acompañados de una distribución campaniforme en torno de ellos, muy sesgada a izquierda; en Navidad, el 25 de diciembre (el único día feriado) no es el día con más exceso (en Medellín ni siquiera tiene exceso significativo) sino que es el 24 precedido por otros días (no feriados) con excesos significativos; lo mismo sucede en Santiago, donde los días patrios (septiembre 18 y 19) están precedidos de varios días con exceso (ninguno feriado) y el día feriado del desfile patrio (19) no tuvo exceso significativo (campana sesgada a izquierda). También estas refutaciones son válidas para [F)], donde el día (no la expectativa de fiesta) causa los excesos de menarquia; es imposible explicar bajo esta hipótesis las distribuciones campaniformes sesgadas a izquierda, donde la mayor parte son días no feriados los que presentan un exceso significativo, y algunos feriados importantes no lo presentan. No es el día, sino la expectativa de fiesta de alguna celebración circanual, de importancia neuropsicosocial para la niña, lo que precipita la menarquia. En ambos países católicos, el 8 de diciembre es feriado, pero sólo Medellín muestra exceso de menarquia. En Colombia, el 8 de diciembre es día de Primera Comunión y fiesta familiar; en Chile este evento no se produce preferentemente el 8 de diciembre desde hace más de 25 años.

Días de la Semana. Muestra chilena: Domingo 366 M, lunes 382 M, martes 354 M, miércoles 340 M, jueves 350 M, viernes 333 M, sábado 352 M, total: 2 477. La distribución fue homogénea, χ26= 4.45, p = 0.62. Muestra colombiana: Domingo 322 M, lunes 315 M, martes 306 M, miércoles 322 M, jueves 316 M, viernes 331 M, sábado 334 M, total: 2 246. La distribución fue homogénea, χ26 = 1.74, p = 0.94. Como no hubo excesos significativos de menarquias en sábado (semi feriado) y domingo (feriado), en ambas muestras, se refuta que el día festivo, per se, induzca la menarquia.


Estudio del ritmo anual de edad de menarquia por mes (REMM)

La edad de menarquia (EDM) fue calculada en meses por la diferencia entre las fechas de menarquia y de nacimiento.15 Las hipótesis son las mismas pero aquí serán probadas no por la incidencia sino por la EDM. Debemos especificar según la hipótesis de la expectativa de [fiesta o (vacación)] - [(no fiesta) o estudio], la influencia de estos eventos sobre la EDM. Debemos evaluar si todas las niñas postergan su menarquia por el régimen de estudio. Los porcentajes menores de incidencia mensual están cerca del 5% y el esperado es 8.3%; entonces, las niñas refractarias a la influencia de este factor son cerca de 5/8.3 = 60% y las sensibles que dan RIMM son cerca del 40%. Las niñas cuyas menarquias fueron postergadas (no suprimidas) tendrán menarquias en edades mayores. Se espera que al iniciar sus estudios en febrero o marzo, las niñas refractarias tendrán menarquia en edades menores y a medida que avance el año la EDM irá aumentando hasta tener su máximo en noviembre-diciembre, cuando menstruarán las niñas retrasadas ante la expectativa del fin del año escolar y las vacaciones. En Medellín, el mes de vacación en junio-julio (termina con las fiestas patrias) ofrece una oportunidad crucial para probar la hipótesis pues tiene un período en el cual encontramos aumento de la IMM (julio).


Tabla 2

La tabla 2 presenta el promedio (PEDM) y DT de EDM mensual de muestras de Santiago (1978 y 1990-91), de Medellín y una de Brasil (municipalidad de Barrinha, Riberão Preto, zona tropical, Lat 21º S, con vacaciones la última semana de diciembre y enero y dos semanas en julio). Se evitaron los decimales del promedio. La heterogeneidad de PEDM entre los meses fue muy significativa (véase ANOVA en el original15), excepto en la muestra brasileña que es pequeña y no publica DT. Las muestras chilenas coinciden con la hipótesis. Si el exceso de menarquia en diciembre termina con todas las niñas retrasadas durante el período escolar marzo-noviembre, el período de enero a julio debe tener un PDEM similar y después debe aumentar hasta el máximo en noviembre-diciembre. Enero y febrero, meses de vacaciones posteriores a un período de un mes o más de vacaciones deberían tener PEDM bajo, y así sucede. La baja de casi 8 meses en el PEDM entre diciembre y enero-febrero en las dos muestras de Santiago es asombrosa. Es prácticamente imposible que el sesgo de memoria o el clima produzcan esta diferencia en meses consecutivos, luego ambos factores son refutados, ya que siendo estos meses de vacaciones y de verano, sus valores esperados de PEDM por clima y sesgo de memoria son similares. Se refutan también factores nutricionales y socioculturales (no relacionados con vacación-estudio), que no cambian en un mes en una magnitud que puedan producir 8 meses de diferencia en el PEDM. La negación de la hipótesis, es decir, el PEDM no tiene relación con el ritmo vacación-estudio, se refuta. En Medellín, también la hipótesis se confirma y la negación de la hipótesis se refuta. Como hay un mes de vacación, los 10 últimos días de junio hasta el 20 de julio (día patrio), debían presentar alteraciones drásticas en la IM y en el EDM, que se observan. Noviembre y diciembre, que son los primeros meses de vacaciones tienen alta IM y PEDM. Los estudios, que empiezan en febrero, hacen bajar la IM y el PEDM. En junio, la expectativa de vacación lleva a las niñas más retrasadas de febrero-mayo a menstruar, lo que hace subir sustantivamente el PEDM, aunque no tanto la IM (no tan de acuerdo con la hipótesis); todas las niñas muy retrasadas del período menstruarían en junio (PEDM alto) o los primeros días de julio, por lo que julio tendría muchas menarquias de niñas no tan retrasadas (hipótesis auxiliar) más las que menstruarían normalmente. Hemos forzado el ajuste a la hipótesis dado que ignoramos i) el tiempo que los estudios retrasan la menarquia; ii) la fuerza con que la expectativa de vacación precipita la menarquia; iii) el tiempo en que dicha expectativa adelanta la menarquia, y otras condiciones que deben investigarse. Con la IDM constatamos que a fines de mayo y en todo junio se mantiene un PEDM (diario) alto; la expectativa de vacación parece actuar anticipando bastante la menarquia muy retrasada. En Medellín, el PEMM cae 5 meses entre diciembre y febrero. La muestra brasileña se ajusta a nuestra hipótesis. Entre diciembre (vacación) y febrero (entrada al estudio), la IMM cae de 14.4% a 7.6%, correlativamente con la caída de PEDM de 153 a 144 meses, correlato que no puede producirse por factores culturales o sesgos y que los autores no consideran como prueba de hipótesis.


Estudio del efecto del sesgo de memoria y del año de la encuesta

En el Anexo se presentan las muestras de Medellín y Santiago una vez removidas las menarquias que ocurrieron el mismo año de la encuesta (evita la sobreestimación en los primeros meses del año y la subestimación en los últimos) separadas por aquellas que recuerdan el día y mes (menor sesgo de memoria) y las que recuerdan sólo el mes de menarquia (mayor sesgo). Es evidente que a mayor tiempo entre la menarquia y la encuesta habrá menor recuerdo (extinción) de la fecha de menarquia, lo que debería verse al separar entre las que recuerdan y las que no recuerdan el día. Aun, esta diferencia mostrada por los datos de Medellín (PEDM con día 150.2 vs. PEDM sin día = 147.9), no se ve en Santiago (150.2 vs. 150.4), aunque el porcentaje de las niñas que no recuerdan el día es menor en la muestra que tuvo menarquia el año de la encuesta (%SDM). Estudiamos los ritmos según el tiempo entre la encuesta y la menarquia y hemos encontramos que el RIMM permanece invariable (no publicado). Aunque las IMM cambian enormemente en las dos submuestras de ambas ciudades, los ritmos –tanto de IMM como de EDM– permanecen y se hacen más marcados en las niñas que recuerdan el día. Es obvio que diciembre tenga ahora el mayor exceso en ambas muestras. Es notable cómo, en ambas, en las niñas que recuerdan sólo el mes, julio presenta un exceso (enorme en Medellín). Esto sucede en meses que tienen vacaciones y pocos días festivos, entonces, las niñas recuerdan que fue en vacaciones, sin precisar el día. En las niñas cuyas menarquias ocurrieron el año de la encuesta, la gran distorsión en los porcentajes mensuales (diciembre 0%) no es suficiente para borrar el aumento de PEDM hacia los últimos meses del año (el valor 159.1 de enero en Santiago se debe al promedio 162.4 de 15 niñas con menarquia entre el 1 y 3 del mes, que podrían asimilarse a diciembre) o hacia junio-julio en Medellín. Vemos que estos sesgos contribuyen más bien a oscurecer los ritmos de incidencia o edad de menarquia que a aumentarlos. Se prueba así que el sesgo de memoria y el de año de la encuesta no contribuyen a producir RIMM ni REMM.

Concluimos que la hipótesis, que plantea que la expectativa de vacación (fiesta) induce la menarquia y la expectativa de estudio (no fiesta) la retarda, se confirma por la distribución de incidencia diaria o mensual y por la del promedio mensual de edad de menarquia. Se refutan el sesgo de memoria o de año de la encuesta, el fotoperíodo, la temperatura, las condiciones socioculturales o nutricionales, o el día o período de fiesta per se, como factores mayores de RIMM o de REMM.

Las implicancias médicas, neuroendocrinas, antropológicas, sociales y educacionales de estos hallazgos son directas. No pretendemos que el ritmo vacación-estudio sea el único factor, pues éste se relaciona con otros ritmos, laborales, sociales y culturales. Cualquiera que sea el factor mayor del ritmo de menarquia, tiene gran influencia en el ritmo psico-neuroendocrino de la niña. Parece que la expectativa, vitalmente significada, condiciona nuestros ritmos internos e influye nuestros estados anímicos; gozamos y sufrimos más por el futuro que por el presente. La relación con las fiestas religiosas, diferente en dos culturas católicas (colombiana y chilena) apunta a un estudio neuroantropoteológico. El retraso menstrual, de hasta 9 meses, por la entrada del año escolar es un cataclismo del desarrollo. ¿Hasta dónde son torturantes las vivencias escolares? ¿Es posible concebir programas escolares que además del desarrollo personal y académico sean una fiesta para los alumnos? En India, Colombia y Chile algunos colegios rehusaron el estudio en niñas menores de 11 años, ya que debían explicar la menstruación a muchas niñas que aún no menstruaban. Cabe decir que en Chile cerca del 3% de las niñas menstrua a los 9 años.8 Una nota epistémica es necesaria. A menudo se exige y condiciona la aceptación de estos trabajos a un análisis estadístico que se ajuste a modelos matemáticos de ritmos. Sólo usamos el modelo de las hipótesis nulas de distribución al azar de las menarquias y de sus edades (uniforme, binomial o normal). Cualquiera desviación de éstas debe tener un factor asociado que la produzca (no que la explique). Estamos interesados en conocer los procesos bióticos (no biológicos) de la naturaleza; la estadística y la matemática son herramientas o lenguajes que expresan algunas propiedades de los procesos o, usadas para calcular sus probabilidades de que ocurran según hipótesis basadas en sus propiedades bióticas. Los procesos bióticos en general no se ajustan a los axiomas, propiedades matemáticas o estadísticas de continuidad, linealidad, homoscedasticidad, normalidad, aditividad, asociatividad, distributividad, transitividad y otras, por lo que la aplicación de modelos matemáticos o estadísticos basados en ellos esconden información (errores de tipos I y II epistémicos, no estadísticos) y tergiversan los procesos bióticos que no se ajustan o violan tales propiedades.18,19 Los algoritmos matemáticos producen distorsiones y la estimación de parámetros, a partir de los datos que incluyen desviaciones del modelo al azar, produce circularidad epistémica muy difícil de percibir.18,19 La caída de 5 a 9 meses del PEMM (rasgo poblacional cualitativo, no parámetro estadístico) entre noviembre-diciembre y enero-febrero, en tres países, indica una profunda modificación de procesos neuroendocrinos en las niñas, independientemente de su significación estadística. Muchos modelos matemáticos de ritmos, basados en cualquier factor de los mencionados, pueden ajustarse a esta caída y no por ello la hipótesis sería refutada.


Anexo


Bibliografía del artículo
1. Valsik JA. The seasonal rhythm of menarche. A review. Hum Biol 1965; 37:75-90.
2. Bojlen K, Bentzon WW. Seasonal variation in the occurrence of menarche. Dan Med Bull 1974; 21:161-168.
3. Nakamura I, Shimura M, Nonaka K, Miura T. Changes of recollected menarcheal age and month among women in Tokyo over a period of 90 years. Ann Hum Biol 1986; 13:547-554.
4. Valenzuela CY, Núñez E, Tapia C. Month at menarche: a re-evaluation of the seasonal hypothesis. Ann Hum Biol 1991; 18:383-393.
5. Wolanski N, Dickinson F, Siniarska A. Seasonal rhythm of menarche as a sensitive index of living conditions. Stud Hum Ecol 1993; 11:171-191.
6. Gueresi P. Monthly distribution of menarche in three Provinces of North Italy. Ann Hum Biol 1997; 24:157-168.
7. Tavares CH, Barbieri MA, Bettiol H, Barbieri MR, De Souza L. Monthly distribution of menarche among Schoolgirls from a municipality in Southeastern Brazil. Am J Hum Biol 2004; 16:17-23.
8. Patri A, Valenzuela CY, Morales I, Saavedra I, Figueroa L. Edad de menarquia de niñas de escuelas fiscales del área Norte de Santiago. Cuad Med Soc (Chile) 1980; 21:12-20.
9. Valenzuela CY, Srikumari CR, Gopinath PM, Ghose N, Gajalakshmi P, Csoknyay J. New evidence of non seasonal factors in the menarche rhythm. Biol Res 1996; 29:245-251.
10. Valenzuela CY, Núñez E, Tapia C. Month at menarche: a re-evaluation of the seasonal hypothesis. Ann Hum Biol 1993; 20:200-202.
11. Cohen P. Month at menarche: a re-evaluation of the seasonal hypothesis. Ann Hum Biol 1993; 20:198-200.
12. Valenzuela CY, Pineda N, Olarte G, Vásquez G. Ritmo anual de menarquia en Medellín, Colombia. Rev Med Chile 1996; 124:437-441.
13. Valenzuela CY, Srikumari CR, Csoknyay J, Pineda N. Ritmos anuales escolar (vacaciones-estudio) y de menarquia. Rev Med Chile 1999; 127:143-150.
14. Valenzuela CY. Día de menarquia, expectativa de fiesta y sesgo de memoria. Rev Med Chile 2004; 132:299-306.
15. Valenzuela CY. Confirmación de la expectativa vacación-estudio como factor principal del ritmo anual de incidencia y edad de menarquia. Rev Med Chile 2005-6; 133-4 (en prensa).
16. Howell DC. Statistical methods for psychology, 5th edn. Pacific Grove, CA: Duxbury; 2002.
17. Brundtland GH. Seasonal variations in menarche in Oslo. Ann Hum Biol 1982; 9:35-43.
18. Valenzuela CY. Algebraic and epistemological restrictions in studies on Hardy-Weinberg equilibrium. Am Nat 1985; 125:744-746.
19. Valenzuela CY. Epistemic restrictions in population biology. Biol Res 1994; 27:85-90.

© Está  expresamente prohibida la redistribución y la redifusión de todo o parte de los  contenidos de la Sociedad Iberoamericana de Información Científica (SIIC) S.A. sin  previo y expreso consentimiento de SIIC

anterior.gif (1015 bytes)

 


Bienvenidos a siicsalud
Acerca de SIIC Estructura de SIIC


Sociedad Iberoamericana de Información Científica (SIIC)
Arias 2624, (C1429DXT), Buenos Aires, Argentina atencionallector@siicsalud.com;  Tel: +54 11 4702-1011 / 4702-3911 / 4702-3917
Casilla de Correo 2568, (C1000WAZ) Correo Central, Buenos Aires.
Copyright siicsalud© 1997-2024, Sociedad Iberoamericana de Información Científica(SIIC)