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El Síndrome Agudo Respiratorio Severo (SARS), conocido también como neumonía atípica infecciosa es causado por un nuevo tipo de coronavirus. La mayoría de los pacientes presentan un cuadro de aparición aguda y experimentan un rápido desarrollo de la enfermedad.Investigadores del Department of Radiology del East Lake Hospital desarrollaron un estudio para la comprensión de las manifestaciones radiológicas del SARS y sus características más destacadas.Se registró información de 52 pacientes confirmados con SARS, admitidos en el hospital entre febrero 9 a mayo 10, 2003.Las edades de los enfermos oscilaron entre 4-69 años (edad media:29), entre los pacientes 25 fueron hombres y 27 mujeres.Los criterios diagnósticos requeridos para el ingreso en el estudio fueron la aparición aguda de la enfermedad, la presencia de fiebre como síntoma inicial, tos seca, estrías sanguinolentas en el esputo en forma ocasional, discordancia entre los signos y los síntomas, estudios de laboratorio con negatividad en los cultivos y recuento normal o levemente descendido de leucocitos y neutrófilos. Otras manifestaciones consideradas necesarias para la incorporación fueron la realización de la prueba de PCR para coronavirus, dosaje de anticuerpos IgG e IgM con resultados positivos y la existencia de imágenes sombreadas irregulares pulmonares en incidencias laterales y anteriores de las radiografías de tórax.La fiebre de más de 38.0ºC en forma intermitente o irregular ocurrió en 51 casos y en 14 de los pacientes se observaron escalofríos. En 21 pacientes se constató disnea, aceleración de los movimientos respiratorios y en 5 de ellos insuficiencia respiratoria aguda.Los focos de compromiso pulmonar se localizaron en ambos pulmones en 31 casos. Las imágenes radiológicas primarias mostraron inicialmente lesiones localizadas en un lóbulo o segmento pulmonar y la diseminación ocurrió en ausencia del control de la enfermedad.En 31 pacientes se observaron imágenes sombreadas irregulares, de bordes poco claros y en 16 sujetos las imágenes radiológicas semejaron vidrio esmerilado. En cierto número de enfermos se constató engrosamiento de los límites pulmonares e imágenes de atelectasia.Los autores manifestaron que los cambios radiológicos que aparecieron en los participantes con SARS no fueron patognomónicos de esta patología; sin embargo ciertas imágenes de bordes irregulares, los cambios tisulares instersticiales, la afectación bilateral de los campos pulmonares medios e inferiores con mayor frecuencia, las imágenes de vidrio esmerilado y la rápida modificación y migración de los focos con escasa correlación clínica fueron todas características de esta enfermedad.Otro dato que la investigación demostró fue la lenta reabsorción de los focos, con persistencia prolongada de las imágenes radiológicas.Los autores concluyeron que la radiografía de tórax constituye un método específico y sensible para el diagnóstico y el tratamiento del SARS y recomiendan su indicación cada 1-3 días en pacientes con signos y síntomas.Se sugiere la realización de nuevas investigaciones que incluyan una muestra más amplia de pacientes para asegurar la utilidad del uso de esta técnica en el Síndrome Agudo Respiratorio Severo.