siiclogo2c.gif (4671 bytes)
DIAGNÓSTICO Y TRATAMIENTO DE LA HEPATITIS C CRÓNICA EN LAS PRISIONES
(especial para SIIC © Derechos reservados)
bbbb
cccc

Autor:
Pablo Saiz de la Hoya Zamácola
Columnista Experto de SIIC

Institución:
Centro Penitenciario de Alicante 1 (Fontcalent)

Artículos publicados por Pablo Saiz de la Hoya Zamácola 
Coautores
Andrés Marco Mouriño* Julio García Guerrero** Miguel Bedia Collantes*** Joaquín Portilla Sogorb**** 
Licenciado en Medicina. Especialista em Medicina Familiar y Comunitaria, Centro Penitenciario Barcelona hombres, Barcelona, España*
Licenciado en Medicina. Especialista em Medicina Familiar y Comunitaria, Centro Penitenciario de Castellón, Castellón, España**
Licenciado en Medicina. Especialista em Medicina Familiar y Comunitaria, Centro Penitenciario de Alicante 1 (Fontcalent), Alicante, España***
Licenciado en Medicina. Especialista em Medicina Interna (Enfermedades Infecciosas), Hospital General Universitario de Alicante, Alicante, España****

Recepción del artículo: 25 de noviembre, 2008

Aprobación: 11 de diciembre, 2008

Primera edición: 7 de junio, 2021

Segunda edición, ampliada y corregida 7 de junio, 2021

Conclusión breve
Los avances científicos y tecnológicos en el diagnóstico y tratamiento de la hepatitis C crónica también deben alcanzar a la población penitenciaria.

Resumen

En 2004, ante el problema de salud que suponía la infección por el virus de la hepatitis C, la Sociedad Española de Sanidad Penitenciaria (SESP) acordó realizar unas "Recomendaciones sobre el diagnóstico y tratamiento de la hepatitis C crónica (HCC) en el medio penitenciario", que fueran avaladas por las tres sociedades científicas especialmente implicadas: la Sociedad Española de Sanidad Penitenciaria (SESP), la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (SEIMC) y la Asociación Española para el Estudio del Hígado (AEEH). Estas directrices supusieron un importante estímulo en el diagnóstico y posterior tratamiento de la HCC y redundaron en un enorme beneficio para muchos internos ingresados en las prisiones españolas. Sin embargo, transcurridos cuatro años desde aquella publicación, se constatan modificaciones relevantes en el ámbito diagnóstico y terapéutico y, por lo tanto, cambios sobre algunos de los aspectos citados en aquellas directrices. El papel creciente de la elastografía hepática y de algunos índices bioquímicos para predecir el grado de fibrosis hepática, la duración "a la carta" del tratamiento de la HCC con dependencia de las características del paciente y de la cinética viral, el ajuste de la dosis de ribavirina, así como el uso de ciertos fármacos para disminuir o evitar algunos efectos adversos son, entre otros, aspectos relevantes a los que se ha dedicado atención investigadora en los últimos años y que han supuesto modificaciones no reflejadas en aquellas Recomendaciones y que ahora, y mediante este texto, se pretende actualizar.

Palabras clave
hepatitis C crónica, prisiones

Clasificación en siicsalud
Artículos originales> Expertos del Mundo>
página www.siicsalud.com/des/expertos.php/101168

Especialidades
Principal: Infectología
Relacionadas: EpidemiologíaFarmacologíaGastroenterologíaMedicina Interna

Enviar correspondencia a:
Pablo Saiz de la Hoya Zamácola, Centro Penitenciario Alicante 1 (Fontcalent), 03113, Alicante, España

Expert recommendations for the diagnosis and treatment of chronic hepatitis C infection in the prison setting: Updating and Evaluation

Abstract
Facing the health problem caused by the hepatitis C virus infection, the Spanish Society of Penitentiary Health (SESP) agreed, in the year 2004, to carry out recommendations on the diagnosis and treatment of chronic hepatitis C (CHC) in prisons. Those recommendations were supported by the three scientific societies specially involved: the Spanish Society of Penitentiary Health (SESP), the Spanish Society of Infectious Illnesses and Clinical Microbiology (SEIMC), and the Spanish Association for the Study of the Liver (AEHH). Those guidelines were an important stimulus in the diagnosis and treatment of CHC and were very beneficial for many inmates in Spanish prisons. However, four years after that publication, there have been significant changes in diagnosis and therapy, and therefore, there have also been changes in some of the areas mentioned in those guidelines.

The growing role of liver elastography and some biochemical indexes to predict the degree of liver fibrosis, the choice of the length of the treatment of CHC depending on the characteristics of the patient and on viral kinetics, the ribavirin dose adjustment, as well as the use of certain drugs to reduce or avoid side effects, are relevant aspects which have been the focus of research during the last few years and that have resulted in modifications, not reflected in those Recommendations, which we are trying to update with the present document.


Key words
chronic hepatitis C, prisons

DIAGNÓSTICO Y TRATAMIENTO DE LA HEPATITIS C CRÓNICA EN LAS PRISIONES

(especial para SIIC © Derechos reservados)

Artículo completo
Introducción

Antes de 2004, los estudios sobre prevalencia de hepatitis C en las prisiones españolas señalaban una frecuencia de la infección por el virus de la hepatitis C (VHC) muy elevada, estimándose superior al 30%.1-4 Por otra parte, su tratamiento era poco frecuente ya que las posibilidades de éxito eran reducidas y los pacientes presentaban a menudo otros problemas de salud (consumo de drogas, coinfección por el VIH, patología psiquiátrica, etc.) que condicionaban o contraindicaban el tratamiento.

La introducción del tratamiento combinado con interferón pegilado (PEG-IFN) y ribavirina permitió aumentar la eficacia terapéutica y obtener tasas de curación mucho más altas,5,6 incluso entre la población coinfectada por el VIH.7,8 Ello impulsó a la Sociedad Española de Sanidad Penitenciaria (SESP) a realizar un Programa de Actualización en el Tratamiento de la Hepatitis C en el medio penitenciario con el objetivo de que pudieran beneficiarse los presos infectados por el VHC y que las decisiones de los facultativos penitenciarios estuvieran bien sustentadas. En 2005 se publicó la primera edición de este programa en formato de libro,9 y posteriormente aparecieron publicadas las "Recomendaciones de expertos sobre el diagnóstico y tratamiento de la hepatitis C crónica en el medio penitenciario", avaladas por tres sociedades científicas: Sociedad Española de Sanidad Penitenciaria, Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica, y Asociación Española para el Estudio del Hígado. Estas recomendaciones fueron publicadas en los órganos de difusión científica de estas sociedades.10-12

Estimamos que ha transcurrido un tiempo suficiente para evaluar indirectamente el impacto que aquel documento supuso en el diagnóstico y tratamiento de la hepatitis C crónica (HCC) en el ámbito penitenciario español y, por otra parte, dada la gran rapidez con la que aparecen nuevas evidencias científicas, consideramos que puede ser aconsejable actualizar algunos de sus contenidos.


Actualización
Diagnóstico

Las bases diagnósticas de la HCC se han modificado muy poco en estos años, manteniéndose vigentes los criterios del documento original.9-12

Se recomienda que a todo paciente potencialmente infectado (serología VHC positiva), se le solicite el análisis del ARN del VHC que confirme o descarte la existencia de replicación viral: infección crónica por VHC. Esta determinación originalmente se recomendaba que debía realizarse con métodos de amplificación genética cualitativos (ARN presente o ausente), pero actualmente, y debido al aumento de la sensibilidad de las técnicas cuantitativas (número de copias virales expresado en unidades internacionales) puede utilizarse los métodos cuantitativos incluso para el diagnóstico.

También es necesaria una correcta historia clínica que incluya la exploración física y un estudio analítico que permita realizar el diagnóstico diferencial con otras posibles causas de hepatopatía, así como excluir posibles contraindicaciones del tratamiento y confirmar o descartar comorbilidades o coinfecciones9 que puedan afectar la decisión de instaurar el tratamiento. La presencia del ARN del VHC determina la existencia o no de hepatitis HCC.

Son necesarias también la cuantificación de la carga viral del VHC (coamplificación por PCR "competitiva" del ARN viral o más recientemente con técnicas más sensibles de PCR en tiempo real1) y la determinación del genotipo viral (secuenciación directa de las regiones NS5B, E1 o E2 del genoma viral circulante tras su amplificación por PCR).

El genotipo viral, junto a la posible coinfección por el VIH, son los factores principales que permiten establecer la duración del tratamiento (6 vs. 12 meses). Los genotipos 2, 3 y las bajas cargas virales basales, son junto a las edades jóvenes, el poco peso (en dependencia del IFN usado), el menor grado de fibrosis y la ausencia de resistencia a la insulina, factores predictivos de buena respuesta terapéutica.14

Durante los últimos años se han introducido nuevas técnicas e índices bioquímicos que ayudan a predecir el grado de fibrosis hepática (FH) en los pacientes con HCC sin necesidad de realizar punción biopsia hepática (PBH). La determinación del grado de FH –útil en la decisión de indicación de tratamiento en cuanto permite valorar evolución y pronóstico– se realizaba mediante el estudio anatomopatológico de una muestra obtenida por punción biopsia. Aunque la PBH aporta elementos diagnósticos exclusivos15,16 tiene algunos inconvenientes, como la morbimortalidad secundaria, el costo económico elevado, el rechazo del paciente y variaciones en la interpretación de los resultados según el patólogo o incluso la variabilidad, que depende de la localización de la punción. En la actualidad, la PBH está en entredicho como la prueba idónea para realizar el diagnóstico y seguimiento de la FH de la HCC. Recientemente se han incorporado nuevas técnicas para el diagnóstico de la FH en estos pacientes. La elastografía hepática de transición17-20 (Fibroscan®), sola o asociada a la realización de indicadores bioquímicos,21-26 algunos de los cuales se han validado en el medio penitenciario,27 pueden resultar útiles para predecir el grado de FH, sin complicaciones para el pacientes y con un costo menor al de la PBH. Aunque la especificidad y sensibilidad de estos métodos es inferior a la PBH, su inocuidad y comodidad son enormes ventajas, lo que ha redundado en un menor uso de la PBH. En la actualidad, la realización de una PBH podría reducirse sólo a aquellos pacientes con HCC en los que estos nuevos procedimientos no ofrecen un resultado válido y determinante de la fibrosis hepática.

La elastografía tiene un importante valor predictivo positivo en FH avanzada, se estima que los resultados superiores a 9 kilopascales (kp) son indicativos de fibrosis mayores de grado 2, y los superiores a 14 kp se corresponden con posible cirrosis hepática.17-20 La elastografía hepática presenta un aceptable área bajo la curva para la determinación de una fibrosis de grado 2 o mayor (0.83; intervalo de confianza [IC] del 95%: 0.76-0.88), buena para fibrosis de grado 3 o mayor (0.90; IC 95%: 0.85-0.94), y todavía mejor para la fibrosis de grado 4 o más (0.95; IC 95%: 0.91-0.98).20 Además, la realización conjunta de elastografías e índices bioquímicos aumenta el valor predictivo positivo (VPP) y la posibilidad de cuantificar correctamente la FH de los pacientes, ayudando al clínico en la toma de decisiones. Así, esquemas como el publicado por Macias y col.28 (Figura 1), pueden ayudar en la toma de decisiones diagnósticas y terapéuticas mediante la elastografía y los análisis bioquímicos de fibrosis.







Tratamiento

El tratamiento de la HCC está basado en la combinación de IFN pegilado (Peg-INF) y ribavirina (RBV). En la actualidad se encuentran en fase de desarrollo clínico y en diferentes fases de investigación nuevos fármacos para la HCC, como los nuevos interferones (albuferón, entre otros) o profármacos de la ribavirina en investigación (tribavirin). También hay en investigación fármacos que afectan nuevas dianas terapéuticas, como los inhibidores de la proteasa del VHC (telaprevir, boceprevir o SCH503034) o los inhibidores de la polimerasa (R1626, R712 y HCV-796). Los ensayos clínicos de registro de estos nuevos fármacos se están realizando en combinación con la pauta actual.

Aunque por el momento los fármacos de elección no han sufrido modificación en las recomendaciones de tratamiento tanto en pacientes monoinfectados como coinfectados por el VIH, existen otros aspectos en el tratamiento de la HCC que actualmente están sometidos a una mayor controversia y atención investigadora. Entre estos aspectos controvertidos se destacan los siguientes.

Importancia de la respuesta viral rápida (RVR). Se define como la indetectabilidad de la carga viral (CV) del VHC en la semana 4 de tratamiento. La RVR presenta un valor predictivo positivo de éxito terapéutico; es decir de la posibilidad de obtener respuesta viral sostenida (RVS). Denominamos RVS a la indetectabilidad de la CV del VHC 6 meses después de finalizar el tratamiento. Ferenci y col.29 observaron que el 91% de los pacientes con RVR obtienen RVS. Sin embargo, si la CV del VHC en la semana 4 no ha disminuido al menos 2 logaritmos, se reduce la proporción de pacientes que obtienen RVS. La proporción de respuesta final del tratamiento (RFT) y RVS en función de la CV del VHC obtenida en las semanas 4, 12 y 24 puede observarse en la Tabla 1.







La cinética viral secundaria al tratamiento antiviral está, por tanto, adquiriendo gran importancia como factor predictivo de RVS. Si ya se conocía que la no obtención de respuesta viral precoz (RVP o indetectabilidad o disminución de la CV del VHC mayor de 2 logaritmos en la semana 12 de tratamiento) aconsejaba suspender el tratamiento5,6,30,31 actualmente la obtención o no de RVR orienta sobre la posibilidad de éxito terapéutico, sobre la conveniencia de modificar la duración del tratamiento en algunos casos y sobre la posibilidad de suspenderlo precozmente cuando las posibilidades de respuesta son casi nulas. Un posible beneficio de la interrupción temprana del tratamiento en función de la RVR en los pacientes con pocas posibilidades de obtener RVS, podría ser el de disminuir la posible aparición de resistencias a los fármacos actuales, que a su vez puedan reducir las posibilidades de respuesta a la asociación con los nuevos fármacos en estudio para el tratamiento de la HCC.

Recientemente ha aparecido alguna comunicación que relaciona de una manera directamente proporcional la caída cuantitativa de la carga viral en las primeras 24 horas de tratamiento con las tasas de RFT.32

La duración del tratamiento en pacientes monoinfectados. La duración del tratamiento es un aspecto del tratamiento de gran actualidad y sobre el que se está investigando ampliamente. El acortamiento del tratamiento a 16 o 20 semanas33,34 en pacientes monoinfectados con genotipo 2 o 3 que hayan obtenido una RVR, podría ser una medida que, aunque no aporte beneficios terapéuticos extra, sí puede suponer un ahorro económico y una disminución de los posibles efectos adversos.

Existe una mayor evidencia de que en pacientes con genotipo 1 y carga viral basal baja, en los que se ha obtenido indetectabilidad en la semana 4, el tratamiento se podría reducir a 24 semanas.35 Por el contrario, pacientes con respuesta lenta que no hayan obtenido indetectabilidad en la semana 12, pero cuya carga viral ha disminuido más de 2 logaritmos en esa semana, se podrían beneficiar del aumento de la duración de su tratamiento a 72 semanas,36-38 siempre que en la semana 24 la CV sea indetectable.

La dosis de ribavirina. Es un factor importante en la obtención de RVS y en la aparición de efectos adversos. La dosis de RBV en pacientes monoinfectados con genotipos 1 o 4,5 y en todos los coinfectados,39 debe ser ajustada al peso, y es un factor fundamental para obtener tasas elevadas de RVS. Existe suficiente evidencia que demuestra que altas dosis de RBV, si no provocan efectos adversos (sobre todo anemia), se asocian a mayor tasa de RVS.40

Tipo de PEG-IFN. La eficacia41 de los dos PEG-IFN actualmente comercializados (alfa 2b y alfa 2a) es similar, así como su toxicidad. También hay datos de que, aunque podría haber mayores tasas de RFT cuando se trata a los pacientes con altas dosis de PEG-IFN,42 estas dosis elevadas se asocian a mayor tasa de rebrote viral al final del tratamiento43 cuando no van asociadas también a altas dosis de RBV.

Uso de fármacos para reducir la toxicidad. Se ha demostrado que el uso de eritropoyetina (EPO)44 mejora la calidad de vida y evita disminuir la dosis de RBV cuando aparece anemia. Sin embargo, el uso de EPO preventivamente junto a dosis elevadas de RBV45 no ha demostrado mayor eficacia que las dosis de RBV al peso sin EPO.

La neutropenia secundaria al uso de IFN raramente supone un efecto adverso importante. El uso del factor estimulante de colonias de granulocitos y monocitos (GM-CSF)46 se ha usado en algunos casos de neutropenia para diferir o evitar la reducción de dosis de PEG-IFN, aumentando las posibilidades de respuesta eficaz, sobre todo cuando la disminución de dosis se realiza antes de obtener una RVP.47

Existen estudios en marcha que valoran la posibilidad de usar fármacos como los trombopoyéticos (trombopoetina)48,49 para estimular el crecimiento de las plaquetas en pacientes con trombopenias secundarias al tratamiento de la HCC.


Actualización del tratamiento en los pacientes coinfectados por el VIH

Los pacientes coinfectados suponen prácticamente el 50%3 de los casos con HCC en el medio penitenciario. Las aportaciones más importantes y los aspectos de mayor actualidad respecto del tratamiento de los pacientes coinfectados por VIH y VHC son:
- La evidencia de la importancia de usar dosis de ribavirina36 ajustadas al peso en todos los pacientes coinfectados, debido al cambio en la cinética viral del VHC que produce la coinfección por el VIH.

- La recomendación de no disminuir la duración del tratamiento por debajo de 12 meses, excepto quizás y con precaución, en pacientes con genotipo 2 o 3 y CV basal menor de 400 000 UI, fibrosis baja y RVR.36,50,51 Hay mayor evidencia acerca de que a los pacientes con genotipo 1 o 4 que no han obtenido RVR y sí RVP, pero no indetectabilidad de ARN, puede ser conveniente prolongarles el tratamiento a 72 semanas.36

- Interacciones de los fármacos usados en la terapia antirretroviral con los del tratamiento de la HCC. Además de las ya conocidas interacciones de la ribavirina con algunos análogos de los nucleósidos como la estavudina (aumento de toxicidad mitocondrial), la didanosina (aumento de pancreatitis) y zidovudina (aumento de la anemia), se ha añadido una posible interacción de la RBV con el abacavir que podría disminuir la eficacia del tratamiento,52 aunque esto requiere más estudios que confirmen los datos contradictorios actuales.



Evaluación

Es difícil realizar una correcta evaluación del impacto real que las recomendaciones para el diagnóstico y tratamiento de los pacientes con HCC han tenido en el medio penitenciario. Sí puede observarse, sin embargo, la evolución cuantitativa de tratamientos de HCC habida antes y después de la publicación de las recomendaciones. Esta evolución se podría valorar desde tres aspectos fundamentales.


Número de pacientes tratados

El número de pacientes en tratamiento para la HCC ha aumentado notablemente en estos últimos años. Según los datos informados por la Subdirección General de Sanidad Penitenciaria del Gobierno de España respecto de las prisiones dependientes del gobierno central (todas menos las de Cataluña), en el corte realizado en 2003 estaban en tratamiento de la HCC 148 pacientes, de los cuales recibían PEG-IFN más RBV 126, y el resto, IFN no pegilado o monoterapia. En 2007, y también según datos oficiales en el corte transversal realizado en octubre, 428 pacientes estaban en tratamiento, lo que supone un 334% de aumento.


Estudio clínicos iniciados

En 2006 se inició, promovido por el Grupo de Enfermedades Infecciosas de la Sociedad Española de Sanidad Penitenciaria (GEISESP), el ensayo clínico Ribadot (ML19953): estudio comparativo, multicéntrico, abierto, aleatorizado, de tratamiento contra la HCC directamente observado (TDO) y tratamiento autoadministrado con RBV y PEG-IFN alfa 2a. Este ensayo clínico se diseñó para valorar la eficacia de la administración de la RBV en TDO y se reclutaron 256 pacientes. El período de tratamiento finalizó en junio de 2008. Se presentaron las dos primeras comunicaciones sobre los resultados de la RVP y sobre datos de seguridad en la semana 12 en el XIII congreso de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (SEIMC) celebrado en Madrid en mayo de 2008. Las tasas de RVP fueron muy elevadas, (87%), en la semana 12 el 72.9% de los pacientes habían logrado una CV indetectable.

Otro estudio promovido por GEISESP e iniciado en 2008 en el medio penitenciario es el denominado Epiband: estudio epidemiológico, prospectivo y multicéntrico para determinar la proporción y causas de abandono del tratamiento antiviral de la HCC en la población penitenciaria. En este estudio también se valoraban las causas por las que los pacientes no iniciaban tratamiento antiviral, y su período de inclusión finalizó en julio de 2008. Se reclutó para este estudio un total de 657 pacientes (467 iniciaron el tratamiento y 190 no lo iniciaron).


Proyectos implementados

El 27 de septiembre de 2007, GEISESP puso a disposición de los centros penitenciarios españoles un Fibroscan® para su uso clínico y en estudios amparados por el Grupo. Desde esa fecha y hasta el 5 de mayo de 2008 se realizaron (excluyendo pruebas de entrenamiento) 618 pruebas a pacientes infectados por el VHC e ingresados en las prisiones españolas. Los resultados de estas primeras determinaciones se presentarán como comunicación, que ya ha sido aceptada, en el VII Congreso de Sanidad Penitenciaria que se celebrará en Murcia en noviembre de 2008, y se publicarán en el número extraordinario que la Revista Española de Sanidad Penitenciaria (www.resp.es) publicará con las comunicaciones de este congreso.

Como se puede valorar por estos datos indirectos, el tratamiento de la HCC ha pasado en estos últimos años de ser una actuación casi testimonial en el medio penitenciario a ser un importante aspecto de su práctica habitual, que además conlleva una importante faceta de investigación, como se puede comprobar en las 13 comunicaciones53 sobre la HCC que se han presentado en el VII Congreso de Sanidad Penitenciaria celebrado en Murcia en noviembre de 2008.



Bibliografía del artículo
1. Estudio Transversal (junio de 1998) sobre la sanidad penitenciaria española. Subdirección General de Sanidad Penitenciaria. Observatorio español sobre drogas: Informe 3 (1999). Población penitenciaria: indicadores de prisiones. Plan nacional sobre drogas. Consultado 23/12/03. Disponible en: www.mir.es/pnd/observa/htlm/penint.htm.
2. Añón C, Del Olmo JA, Llovet F, Serra MA, Gilabert S, Rodríguez F, et al. Virus C de la hepatitis entre población penitenciaria de Valencia. Rev Esp Enferm Dig 87:505-8, 1995.
3. Saiz de la Hoya P, Bedia M, Murcia, J, Cebriá J, Sánchez-Payá J, Portilla. J. Factores predictivos de infección por el VIH, VHC y coinfección en la población reclusa de una prisión española. Enferm Infecc Microbiol Clin 23:53-7, 2005.
4. Grupo del Noroeste para el estudio de la Hepatitis por Virus C en el medio penitenciario. Seroprevalencia de infección por virus C de la hepatitis en población reclusa del noroeste de España a su ingreso en prisión. Rev Esp Salud Pública 72:43-51, 1998.
5. Manns MP, McHutchison JG, Gordon SC, Rustgi VK, Shiffman M, Reindollar R, et al. Peginterferon alfa-2b plus ribavirin compared with interferon alfa-2b plus ribavirin for initial treatment of chronic hepatitis C: a randomised trial. Lancet 358:958-65, 2001.
6. Fried MW, Shiffman ML, Reddy KR, Smith C, Marinos G, Goncales FL Jr, et al. Peginterferon alfa-2a plus ribavirin for chronic hepatitis C virus infection. N Engl J Med 347:975-82, 2002.
7. Laguno M, Murillas J, Blanco JL, Martínez E, Miquel R, Sánchez-Tapias JM, et al. Peginterferon alfa-2b plus ribavirin compared with interferon alfa-2b plus ribavirin for treatment of HIV/HCV co-infected patients. AIDS 18:F27-F36. 83, 2004.
8. Torriani FJ, Rodríguez-Torres M, Rockstroh JK, Lissen E, González García J, Lazzarin A, et al. Peginterferon alfa-2a plus ribavirin for chronic hepatitis C virus infection in HIV-patients. N Engl J Med 351:438-50, 2004.
9. Saiz de la Hoya-Zamácola P. Programa actualización en el tratamiento de la hepatitis C [Madrid]: Scientific Communication Management, 2005.
10. Saiz de la Hoya Zamácola P, Marco Mouriño A, Clemente Ricote G, Portilla Sogorb J, Boix Martínez V, Núñez Martínez O, Reus Bañuls S, Teixidó i Pérez N. Grupo de expertos para las recomendaciones sobre diagnóstico y tratamiento de la hepatitis C en el medio penitenciario. Expert recommendations for the diagnosis and treatment of chronic hepatitis C infection in the prison setting. Gastroenterol Hepatol 29:551-9, 2006.
11. Saiz de la Hoya Zamácola P, Marco Mouriño A, Clemente Ricote G, Portilla Sogorb J, Boix Martínez V, Núñez Martínez O, Reus Bañuls S, Teixidó i Pérez N. Grupo de expertos para las recomendaciones sobre diagnóstico y tratamiento de la hepatitis C en el medio penitenciario. Expert recommendations for the diagnosis and treatment of chronic hepatitis C infection in the prison setting. Enferm Infecc Microbiol Clin 24:568-75, 2006.
11. Saiz de la Hoya Zamácola P, Marco Mouriño A, Clemente Ricote G, Portilla Sogorb J, Boix Martínez V, Núñez Martínez O, Reus Bañuls S, Teixidó i Pérez N. Recomendaciones de expertos sobre el diagnóstico y tratamiento de la hepatitis C crónica en el medio penitenciario. Rev Esp Sanid Penit 9(1) 2007.
13. Esteban JI, Sauleda S. Diagnóstico de laboratorio de la infección por el virus de la hepatitis C. En Consenso para el tratamiento de las hepatitis B y C. Gastroenterología y Hepatología 29(2), 2006. Disponible en: www.aeeh.org/doc/ConsensoVHB-VHC.pdf.
14. Strader DB, Wright T, Thomas DL, Seeff LB. Diagnosis, management, and treatment of hepatitis C. Hepatology 39:1147-71, 2004.
15. Dienstag J. The role of liver biopsy in chronic hepatitis C. Hepatology 36(Suppl):152-60, 2002.
16. Brunt EM. Grading and staging the histopathological lesions of chronic hepatitis: the Knodell histology activity index and beyond. Hepatology 31:241-246, 2000.
17. Ziol M, Handra-Luca A, Kettaneh A, Christidis C, Mal F, Kazemi F, et al. Non-invasive assessment of liver fibrosis by stiffness measurement: a prospective multicentre study in patients with chronic hepatitis C. Hepatology 41(1):48-54, 2005.
18. Castera L, Vergniol J, Foucher J, Le Bail B, Chanteloup E, Haaser M, et al. Prospective comparison of transient elastography, Fibrotest, APRI and liver biopsy for the assessement of fibrosis in chronic hepatitis C. Gastroenterology 128:343-350, 2005.
19. Coco B, Oliveri F, et al. Monitoring liver elasticity: a new tool to measure liver fibrosis during therapy. 56th Annual Meeting of the American Association for the Study of Liver Disease.
20. De Ledinghen V, Douvin C, Kettaneh A, Ziol M, Roulot D, Marcellin P et al. Diagnosis of hepatic fibrosis and cirrhosis by transient elastography (FibroScan®) in HIV hepatitis C virus-coinfected patients. J of Acquired Immune Deficiency Syndromes 41:175-179, 2006.
21. Forns X, Ampurdanes S, Llovet JM, Aponte J, Quinto L, Martínez Bauer E et al. Identification of chronic hepatitis C patients without hepatic fibrosis by a simple predictive model. Hepatology 36:986-92, 2002.
22. Halfton P, Bourliere M, Deydier R, Botta-Fridlund D, Renou C, Tran A, et al. Independent prospective multicenter validation of biochemical markers (Fibrotest-Actitest) for the prediction of liver fibrosis and activity in patients with chronic hepatitis C: the Fibropaca Study. Am J Gastroenterol 101:547-555, 2006.
23. Myers RP, Benhamou Y, Imbert-Bismut F, Thibault V, Bochet M, Charlotte F et al. Serum biochemical markers accurately predict liver fibrosis in HIV and hepatitis C virus co-infected patients. AIDS 17:721-5, 2003.
24. Wai CT, Greenson JK, Fontana RJ, Kalbfleisch JD, Marrero JA, Conjeevaram HS. A simple noninvasive index can predict both significant fibrosis and cirrhosis in patients with chronic hepatitis C. Hepatology 38:518-26, 2003.
25. Sterling RK, Lissen E, Clumeck M, Sola R, Correa MC, Montaner J et al. Developement of a simple noninvasive index to predict significant fibrosis in patientwith HIV/HCV coinfection. Hepatology 42:282-92, 2006.
26. Rossi E, Adams L, Prins A, Bulsara M, De Boer B, Garas G, et al. Validation of the FibroTest Biochemical Markers Scores in assessing liver fibrosis in Hepatitis C patients. Clinical Chemistry 3:450-4, 2003.
27. Portilla J, López Burgos A, Saiz de la Hoya P, Sánchez Paya J, Bedia M, Faraco I, Lissen E. Utilidad de dos modelos bioquímicos predictivos del grado de fibrosis hepática en población penitenciaria con hepatitis C. Gastroenterol Hepatol 2009 (en prensa).
28. Macías J, Recio E, Vispo E, Rivero A, López-Cortés L, Ríos et al. Application of transient elastometry to differentiate mild from moderate to severe liver fibrosis in HIV/HCV-coinfected patients. J Hepatol 2008 (en prensa).
29. Ferenci P, Fried MW, Shiffman ML, Smith CI, Marinos G, Gonçales FL et al. Predicting sustained virological responses in chronic hepatitis C patients treated with peginterferon alfa-2a (40 KD)/ribavirin. J Hepatol 43:425-433, 2005.
30. Davis GL. Monitoring of viral levels during therapy of hepatitis C. Hepatology 36(Suppl 1):S145-S151, 2002.
31. National Institutes of Health Consensus Development Conference Statement: management of hepatitis C: June 10-12, 2002. Hepatology 36:S3-20, 2002.
32. Laufer N, Bolcic F. Socias E, Cabrini M, Reynoso R y Schvachsa N. HCV kinetic during the first 24 hours of treatment and its relationship with RVR/EVR in HCV/HIV coinfected patients. Poster Discussion Session: WEPDB2. XVII, International Aids Conference, México City, 2008.
33. Von Wagner M, Huber M, Berg T, Hinrichsen H, Rasenack J, Heintges T, et al. Peginterferon-alpha-2a (40KD) and ribavirina for 16 or 24 weeks in patients with genotype 2 or 3 chronic hepatitis C. Gastroenterology 129:522-7, 2005.
34. Mangia A, Santoro R, Minerva N, Ricci GL, Carretta V, Persico M, et al. Peginterferon alfa-2b and ribavirin for 12 vs. 24 weeks in HCV genotype 2 or 3. N Engl J Med 352:2609-17, 2005.
35. Zeuzem S, Buti M, Ferenci P, Sperl J, Horsmans Y, Cianciara J, et al. Efficacy of 24 weeks treatment with peginterferon alfa-2b plus ribavirina in patients with cronic hepatitis C infected with genotype 1 and low pre-treatment viremia. J Hepatol 44:97-103, 2006.
36. Berg T, Von Wagner M, Nasser S, Sarrazin C, Heintges T, Gerlach T, et al. Extended treatment duration for hepatitis C virus type 1: comparing 48 versus 72 weeks of peginterferon-alfa-2a plus ribavirin. Gastroenterology 130:1086-1097, 2006.
37. Sánchez Tapias JM, Diago M, Escartín P, Enríquez J, Romero-Gómez M, Barcena R. Peginterferon-alfa2a plus ribavirin for 48 versus 72 weeks in patients with detectable hepatitis C virus RNA at week 4 of treatment. Gastroenterology 131:451-460, 2006.
38. Pearlman BL, Ehleben C, Saifee S. Treatment extension to 72 weeks of peginterferon and ribavirin in hepatitis C genotype 1-infected slow responders. Hepatology 46:1688-1694, 2007.
39. Núñez M, Miralles C, Berdún MA, Losada E, Aguirrebengoa K, Ocampo A, et al. Role of weight-based ribavirin dosing and extended duration of therapy in chronic hepatitis C in HIV-infected patients: the PRESCO trial. AIDS Res Hum Retroviruses 23:972-82, 2007.
40. Shiffman ML, Salvatore J, Hubbard S, Price A, Sterling RK, Stravitz RT, et al. Treatment of chronic hepatitis C virus genotype 1 with peginterferon, ribavirin, and epoetin alpha. Hepatology 46:371-379, 2007.
41. Sulkowski MS, Lawitz E, Shiffman ML, et al. Final results of the IDEAL (Individualized Dosing Efficacy vs Flat Dosing to Assess Optimal Pegylated Interferon Therapy) phase IIIb study. Program and abstracts of the 43rd Annual Meeting of the European Association for the Study of the Liver; April 23-27, 2008; Milan, Italy. Abstract 991.
42. Roberts S, Weltman MD, Crawford D, et al. Rapid and early virologic response rates are increased with 12 week 360 µg/wk peginterferon alfa-2a (40KD) and standard ribavirin in HCV genotype 1 treatment naive patients: efficacy and safety analysis of the induction phase of the CHARIOT study. Program and abstracts of the 58th Annual Meeting of the American Association for the Study of Liver Diseases; November 2-6, 2007; Boston, Massachusetts. Abstract 54.
43. Fried M, Jensen D, Rodriguez-Torres M, et al. Improved sustained virological response (SVR) rates with higher, fixed doses of peginterferon alfa-2a plus ribavirin in patients with "difficult-to-cure" characteristics. Program and abstracts of the 57th Annual Meeting of the American Association for the Study of Liver Diseases; October 27-31, 2006; Boston, Massachusetts. Abstract 335.
44. Afdhal N, Dieterich D, Pockros P, Schiff ER, Shiffman ML, Sulkowski MS, et al. Epoetin alfa maintains ribavirin dose in HCV-infected patients: a prospective doubleblind randomized, controlled study. Gastroenterology 126:1302-11, 2004.
45. Labarga P, Miralles C, Guardiola JM, Cadafalch J, Aguirrebengoa K, González M, et al. Early virological efficacy and haematological safety of pegIFN alpha-2a plus high doses of ribavirin in HIV/HCV-coinfected patients (PERICO Study). Fourth International Workshop on HIV and Hepatitis Coinfection, Madrid, abstract 15, 2008.
46. Lebray P, Nalpas B, Vallet-Pichard A, Broissand C, Sobesky R, Serpaggi J et al. The impact of haematopoietic growth on the management and efficacy of antiviral treatment in patients with hepatitis C virus. Antivir Ther 10:769-76, 2005.
47. Andrade RJ. Manejo de los efectos adversos del tratamiento. En Consenso para el Tratamiento de las Hepatitis B Y C. Gastroenterología y Hepatología 29(2), 2006. Disponible en: www.aeeh.org/doc/ConsensoVHB-VHC.pdf.
48. McHutchison JG, Dusheiko G, Shiffman ML, et al. Eltrombopag for thrombocytopenia in patients with cirrhosis associated with hepatitis C. N Engl J Med 357:2227-2236, 2007.
49. Afdhal N, McHutchison J, Brown R, Jacobson I, Manns M, Poordad F, et al. Thrombocytopenia associated with chronic liver disease. J Hepatol 48:1000-7, 2008.
50. Crespo M, Esteban J. 13 CROI Denver, February 2006; Abstract 81.
51. Hopkins S. HIV Med 7:248-254, 2006.
52. Vispo E, Barreiro P, Pineda JA, Mira JA, Maida I, Martín-Carbonero L, et al. Low response to pegylated interferon plus ribavirin in HIV-infected patients with chronic hepatitis C treated with abacavir. Antivir Ther 13:429-37, 2008.
53. Rev esp Sanid Penit S(10)3, 2008.

© Está  expresamente prohibida la redistribución y la redifusión de todo o parte de los  contenidos de la Sociedad Iberoamericana de Información Científica (SIIC) S.A. sin  previo y expreso consentimiento de SIIC

anterior.gif (1015 bytes)

 


Bienvenidos a siicsalud
Acerca de SIIC Estructura de SIIC


Sociedad Iberoamericana de Información Científica (SIIC)
Arias 2624, (C1429DXT), Buenos Aires, Argentina atencionallector@siicsalud.com;  Tel: +54 11 4702-1011 / 4702-3911 / 4702-3917
Casilla de Correo 2568, (C1000WAZ) Correo Central, Buenos Aires.
Copyright siicsalud© 1997-2024, Sociedad Iberoamericana de Información Científica(SIIC)